La granada, el antioxidante de temporada
Es un fruta única por la gran cantidad de nutrientes que contiene, y por ser un poderoso antioxidante.
La granada es una fruta cuya temporada es algo corta, su mejor momento de consumo es de septiembre a noviembre, aunque puedas encontrarlas antes y después. De hecho alguna variedades se recolectan entre los meses de agosto y diciembre. Lo cierto es que este es el momento idóneo para disfrutar de esta fruta tan rica y saludable.
La granada es un potente antioxidante
Es una fruta muy apreciada, además de por su característico sabor, tan dulce como ácido, por la gran cantidad de fitoquímicos antioxidantes que contiene. La granada es rica en moléculas activas (ácidos grasos poliinsaturados, flavonoides y fitosterioides) y también en vitaminas C y E, y una gran cantidad de minerales (calcio, magnesio, hierro, silicio, potasio, cobre, silicio y zinc). Esta gran combinación la convierte en un poderoso antioxidante, cuyo efecto contra efectos negativos de los radicales libres está más que demostrado.
De hecho, según un estudio realizado en Estados Unidos y publicado en The Journal of Nutritional Biochemistry, los taninos de la granada tienen propiedades anticancerígenas e inducen la muerte de células tumorales, concretamente si se padece cáncer de mama o de próstata.
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Otro estudio realizado en la Universidad Miguel Hernández de Alicante determinó que su contenido en polifenoles supera al de otros productos como el té verde o los arándanos, conocidos por su gran poder antioxidante. Además, se realizó un estudio en Turquía que aseguraba que su acción acción antioxidante es efectiva ante los efectos adversos causados por la exposición a Rayos X.
Los polifenoles que contiene ayudan a disminuir el riesgo de padecer diabetes y otras enfermedades metabólicas gracias a su acción antiinflamatoria. También a luchar contra el envejecimiento y las enfermedades degenerativas.
Tiene otras muchas propiedades
Las virtudes de esta fruta no acaban en su poder antioxidante. La granada es también muy digestiva, y ayuda a calmar y aliviar posibles afecciones gastrointestinales gracias a sus propiedades ligeramente diuréticas y laxantes. Según un estudio realizado en la Universidad de California, también ayuda a depurar el hígado, los riñones y la sangre si se consumen granadas con regularidad durante un mínimo de tres meses.
La granada también puede servir de ayuda a la hora de reducir la grasa corporal o evitar que se acumule en exceso. Además, ayuda a fortalecer el sistema inmunitario y a mejorar el sistema circulatorio.
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La conservación de las granadas
Si vas a consumirlas en pocos días, es mejor conservar las granadas fuera del frigorífico. Pero si no es así, puedes mantenerlas dentro hasta tres semanas y alargar su vida útil hasta tres semanas.
Si te resulta más útil, puedes congelar los granos sueltos en un recipiente hermético, ya que la granada conserva así sus propiedades nutricionales y se conservan mucho tiempo en buen estado. Además, en el momento de consumirlos no es necesario que los descongeles, con lo que aún te resulta más cómodo aprovechar los granos de granada congelados.
Formas de tomar granadas
Los granos de esta fruta pueden tomarse solos o en macedonia, con frutas como el melón, la naranja o la fresa. También funciona muy bien en helados, cremas y gelatinas.
Es habitual incluirla en ensaladas que tengan una base de rúcula o canónigos.
Puedes preparar zumos en los que combines granadas con naranja o arándanos, o prueba la deliciosa mezcla de esta fruta con pepino y aguacate.
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