Frutas ricas en vitamina C para superar el otoño
El otoño es una época del año que pone a prueba nuestra resistencia y que precisa de un cuidado extra para no caer en resfriados y catarros.
Después de las vacaciones nuestra alimentación probablemente se haya relajado, y en el otoño el ritmo diario se hace más frenético, y nos falta tiempo para mimarnos y fortalecer nuestras defensas. La vitamina C es nuestra aliada para afrontar este último trimestre del año con salud, estimularnos y preparar el curso que se inicia con nuestra mejor cara. Porque esta vitamina es un potentísimo antioxidante y antiinflamatorio, y su aporte es indispensable para la formación de colágeno. Con la vitamina C estamos mejorando la luminosidad de nuestra piel y aportando un efecto antiedad. Y además de la famosas naranjas y mandarinas, podemos encontrarla en otras frutas en grandes cantidades.
Kiwi
Aunque en los supermercados podemos ver kiwis todo el año, la temporada de esta fruta comienza en octubre y termina en marzo. Es una fruta de otoño e invierno, y aunque proviene originalmente del otro lado del planeta, de Nueva Zelanda, durante el otoño podremos ver kiwis nacionales cultivados generalmente en el norte del país: Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco. Sin embargo, cuando los kiwis no son de origen nacional, lo más probable es que sean chinos, pues China desbancó a Nueva Zelanda como principal productor de esta fruta, seguida por Italia y Chile.
El kiwi tiene un altísimo contenido en vitamina C, de hecho una sola pieza está aportando el triple que una naranja, por lo que un solo kiwi al día basta para alcanzar la cantidad diaria que necesitas de esta vitamina. Así, previenen los resfriados, porque refuerzan el sistema inmunitario y reducen el cansancio y la fatiga. Además, fomentan la formación de colágeno que necesario para la piel y mantener los huesos sanos.
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Caki
Esta fruta está de temporada de octubre a diciembre, y aunque el caqui es una fruta originaria de asia, su cultivo llegó a España en los años noventa y desde entonces se extendió por la cuenca mediterránea (Comunidad Valenciana y Murcia). Sin embargo, la variedad que mejor se asentó en nuestro país, la “rojo brillante”, tenía un problema: era muy astringente. Por lo que se requiere la aplicación una serie de técnicas después de la cosecha para eliminar esa cualidad. Esto hace que los caquis nacionales eleven algo su precio por encima de una fruta que no requiere de este proceso y, sin embargo, España es un país exportador, y los caquis nacionales llegan a Alemania, Francia y Brasil.
Su sabor es muy dulce, tiene un alto contenido en agua, lo que ayuda a renovar y purificar nuestro organismo. Su aporte de vitamina C nos ayuda a absorber hierro y nos hace más resistentes a las infecciones. Además, también aporta potasio, por lo que resulta una fruta muy recomendable para quienes padecen de hipertensión arterial y otras afecciones cardiovasculares.
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Chirimoya
Es originaria de los Andes, entre Perú y Ecuador, aunque también se encontraron muestras en Colombia y Chile. Sin embargo en la actualidad es España el primer productor a nivel mundial. Esta fruta, que inicia su temporada en octubre y la mantiene hasta diciembre, se cultiva en más de 3.000 hectáreas en Granada y Málaga, y desde ahí se exporta al resto de Europa y América.
Se la conoce como la aspirina natural, porque tiene propiedades muy similares, ayudando a prevenir la hipertensión y otras afecciones cardiovasculares. Además, la fibra de su pulpa ayuda a regular nuestro nivel de azúcar, por lo que es una fruta muy recomendable para diabéticos. Tiene efectos tranquilizantes gracias a un alcaloide presente en sus nutrientes, que ayuda a regular la segregación de ciertos químicos que ocasionan cuadros de depresión. Es rica en vitamina C y en minerales como el potasio, calcio, hierro, magnesio y zinc.
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