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¿Has notado últimamente que el jabón que usas para el baño te reseca más la piel o te produce picor? Es posible que no estés utilizando el producto adecuado y debas acudir al dermatólogo o a la farmacia para que te aconsejen cuál es el más apto para ti. También puedes optar por un jabón casero, hecho de forma artesanal, con ingredientes naturales. Si es de buena calidad, elaborado por manos expertas, reducirás el riesgo de alergia o problemas dermatológicos, ya que suelen utilizarse las materias primas que más protegen nuestra piel y, de paso, el medio ambiente.
Amelia Pérez, de Los Jabones de Mi Mujer, una empresa de cosmética artesanal autorizada por la Agencia Española del Medicamento señala que, para la fabricación de jabones caseros, utilizan "aceites de oliva virgen extra, mantecas de karité, cacao y ceras de abejas, además complementamos cada base con aceites de primera presión como romero, argán, rosa mosqueta, germen de trigo, jojoba, entre otros. El resultado son jabones muy nutritivos y delicados para las pieles extremadamente sensibles". Además, respetuosos con el entorno, y mucho más cuando reciclamos el aceite que hemos empleado para freír.
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Jabones 'eco' para limpiar la casa
El uso que queramos darle también es múltiple. Lo podemos utilizar para nuestro aseo personal, para la ducha, o el cuidado del cabello, en pastillas o líquido. También podemos emplearlo para la limpieza del hogar y de nuestra ropa. De hecho, si usamos productos más naturales para la lavadora o para mantener la higiene de nuestras casas, evitaremos la aparición de alergias y podremos contribuir a combatir algunas afecciones. Es el caso de Amelia, que sufre una dermatitis atópica y que, asegura, la mantiene a raya desde que empezó a usar su propio jabón.
"El jabón artesano de ingredientes naturales es una joya para nuestra piel gracias a que el proceso de elaboración es en frío y mantiene los nutrientes de los aceites y mantecas vegetales intactos. Además, al emplear aceites de primera presión y mantecas naturales vegetales, estamos nutriendo nuestra piel desde el aseo diario, además de sentirla hidratada, cómoda después de nuestro baño y protegerla", afirma.
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Si vas a hacer jabón casero
Toda precaución es poca ya que se trabaja con algunos ingredientes que pueden ser tóxicos cuando están en proceso de fabricación. Es el caso del hidróxido de sodio (sosa). Por ello, debemos proteger nuestro cuerpo con bata, guantes y gafas, además de utilizar una máscara para evitar inhalar el gas corrosivo que desprende este químico. Asimismo, debemos elaborarlo en un espacio aislado y lejos de niños, mascotas u otras personas para evitar distracciones. Es esencial que esté muy bien ventilado.
"El hidróxido de sodio es un ingrediente nocivo en su estado puro, y por eso la insistencia en la precaución. Sin embargo, cuando se mezclan los ingredientes y da lugar al proceso químico de la saponificación del alcalino (sosa) con el graso (el aceite), el hidróxido se neutraliza y deja de serlo, siempre que esté hecho con la combinación correcta", recuerda la especialista en la fabricación de jabones.
Sin embargo, si no se utilizan las medidas correctas, se corre el riesgo de quemadura. De ahí la importancia de asesorarse bien antes de hacer jabón casero o adquirirlo en establecimientos autorizados. "Nosotros, por ejemplo, hemos conseguido elaborar una mezcla reducida de hidróxido de sodio en combinación con aceites de primera calidad para garantizar un lavado nutritivo para las pieles sensibles, sin riesgos para el cuerpo", concluye Amelia Pérez.
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