Remedios caseros para mantener tu piel perfecta los días de playa
Soluciones para los problemas que afectan a nuestra dermis en las jornadas de sol junto al mar o la piscina.
Los días previos a las vacaciones suelen ser los que más se dedican a cuidar nuestro cuerpo y prepararlo para estar en su versión más saludable. Dentro de esta rutina de belleza, que muchas veces precede a las escapadas junto al mar, se incluye también una específica para atender las necesidades de nuestra piel. Pero, en ocasiones, olvidamos que entre jornada y jornada en la playa también es importante prestar atención al estado de la dermis. Para aquellos momentos en los que nos apetece volver a las recetas naturales e ingredientes auténticos, recopilamos cinco remedios caseros que dejarán tu cuerpo tan suave como al comienzo de tu viaje.
Infusión de té verde para daños solares
Las propiedades calmantes del té verde lo convierten en un ingrediente de lo más completo. Conviene incluirlo en la despensa pues, más allá de ser una bebida saludable, es perfecta para hacer frente a las quemaduras provocadas por el sol. Una vez realizada la infusión, puede aplicarse con algodones, cuando se haya enfriado, o utilizar directamente la bolsita sobre las zonas dañadas.
Yogur griego para la zona del ojo
Cuanto más espeso sea el yogur griego, mejor le sentará a tu mirada. Consecuencia de algunas fiestas propias de esta estación, es posible que algún día encuentres la piel del contorno del ojo cansada o inflamada. Para acabar con esta antiestética imperfección con facilidad, solo hay que mezclar este producto lácteo con unas gotas de miel y distribuirlo por el área de la ojera. Simplemente déjalo actuar 15 minutos y verás los cambios inmediatamente.
Café molido para piernas y glúteos
La celulitis es uno de los temas 'beauty' que más preocupación genera entre las mujeres del siglo XXI. Para favorecer su desaparición, y tratar de que no regrese, conviene incluir en la rutina veraniega un mix de nuestro gel habitual y café molido. Aplicar la crema resultante con un masaje cuando estemos duchándonos beneficiará a nuestra circulación y además exfoliará las células muertas de la dermis.
Aceite de lavanda para calmar
Sin olvidar las ventajas del oro líquido español, fruto del olivo, el aceite de lavanda es uno de los remedios caseros más eficaces para calmar la piel después de horas y horas de luz solar. Con su característico aroma, este producto ya conquistó a griegos, fenicios y árabes siglos atrás. Igual que antes, ahora este óleo destaca por sus ventajas: reduce rojeces, alivia la desagradable sensación de una quemadura y posee cualidades antimicrobianas.
Miel para ayudar a corregir las marcas de acné
Las personas que tienen acné pueden ver disminuida la aparición de granos durante el tiempo que pasan en la costa. Sin embargo, las marcas que dejan las espinillas pueden quedar para siempre si no nos protegemos correctamente u olvidamos los tratamientos que los expertos hayan recomendado para nuestro rostro. Para eliminar gradualmente las imperfecciones y manchas que deja el acné se puede utilizar miel. Se trata de un humectante natural que puede ayudar a que nuestra dermis tenga un tono unificado. Aplicando una capa densa durante 20 minutos varias veces por semana podríamos ver reducidas estas marcas.