Desintoxica tu cuerpo con infusiones de frutas
Mantén tu cuerpo correctamente hidratado y ayúdale a desintoxicarse con aguas infusionadas en deliciosas frutas y vegetales.
En épocas de mucho calor la necesidad de hidratarnos bien es constante y las infusiones de frutas son ideales para hacerlo sin recurrir a los refrescos carbonatizados, nada recomendables para nuestro organismo. En cambio, las infusiones de frutas son bebidas naturales que nos ayudan a hidratar y desintoxicar nuestro cuerpo de manera saludable.
La verdad es que no hay ninguna garantía de que con estas bebidas vayas a disfrutar de las vitaminas y propiedades de las frutas de la misma forma que si te las comieras. Pero asegurarte de que tomas la cantidad adecuada de agua, añadiendo ricos sabores y matices, es algo imprescindible no solo en verano, sino en cualquier época del año.
Cómo se prepara una infusión de frutas
Por un proceso de infusión en frío, las frutas que pongamos en agua fría le transfieren a esta sabor y aroma, manteniendo el mismo poder hidratante y sin añadir nada de calorías. A la hora de cortar la fruta, piensa en hacerlo de manera que entre en contacto con el agua la mayor parte posible de superficie.
También puedes licuar una parte, mezclarla con el agua y añadir un trozo de la corteza. De hecho, mezclar con agua las cortezas sobrantes de la fruta que comes es una forma excelente de reciclar comida de forma saludable. Puedes hacer lo mismo cuando comas alguna verdura u hortaliza, como la zanahoria o el pepino.
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Las cantidades deben ser pocas, ya que se trata de una infusión, no de un zumo o batido, y debes tener siempre la refrescante sensación de estar bebiendo agua a pesar del sabor añadido. De esta manera no te cansará beber y te asegurarás una correcta hidratación.
En cuanto al tiempo de infusionado, con 8 horas sería suficiente para conseguir un buen sabor, aunque puedes dejarlas macerar hasta 12 horas. Durante el proceso, es recomendable agitar la mezcla un par de veces. Luego puedes colar los trozos de frutas y cáscaras para disfrutar de tu agua durante todo el día sin que se estropee. Al colarlas, algunas frutas seguirán intactas (por ejemplo, en el caso de los frutos rojos) y te las podrás comer. Añade el hielo justo antes de servir.
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Qué frutas puedo usar
Este tipo de infusiones admiten una gran variedad de frutas, según tus gustos y lo que tengas disponible en casa. Las más utilizadas por el punto refrescante que aportan son los cítricos como la naranja, el limón, el pomelo o la lima. También resultan muy adecuados los frutos rojos como los arándanos, fresas y frambuesas, o las frutas tropicales como la piña y el mango. Añade también verduras y vegetales como el pepino, la zanahoria o el apio. Verás qué bien combinan.
Y no te olvides de darle el toque final a tu infusión con alguna de las numerosas especias que puedes utilizar, como el jegibre, canela en rama, clavo, pimienta rosa, vainilla o anís estrellado.
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Cómo puedo combinarlas
Te proponemos unas mezclas deliciosas para que te inicies en estas infusiones de frutas, aunque existen tantas posibilidades como tú quieras probar:
- Sandía, hierbabuena y melón
- Piña y jengibre
- Frutos rojos con zumo de limón
- Pepino, zanahoria y cilantro
- Melón, limón y uvas
- Papaya, piya, mango y menta
- Pomelo, lima y limón