Las frutas, como ya sabes, son muy beneficiosas para nuestra salud. Por eso existe la recomendación de tomar 5 piezas (y otras 5 de verdura) al día. Las frutas contienen agua, vitaminas y minerales. Nos ayuda a mantener el cuerpo hidratado y a eliminar las toxinas que acumula nuestro cuerpo. También nos regulan el tránsito intestinal gracias a su alta cantidad en fibras y nos proporcionan sensación de saciedad.
Incluye siempre fruta en tus desayunos y combínalas con proteínas o carbohidratos para asegurarte un desayuno muy nutritivo. Que no falten las manzanas, el plátano, la sandía...También son opciones las mandarinas, el kiwi, el melocotón, las fresas, la piña o la pera. Y no te olvides de las ciruelas frambuesas o las cerezas. Combínalas a tu antojo, procurando que haya variedad, y aprovecha aquellas que sean de temporada.
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Prepara nutritivos smothies
Los batidos de frutas o smothies son una atractiva opción para que nuestro desayuno esté cargado de nutrientes. Estos se concentran en una sola presentación y sin sobrecargar tu sistema digestivo, lo cual resulta ideal para la mañana. La absorción rápida de estos nutrientes se traduce en más energía y más vitalidad para afrontar el día. Además, los smothies son sencillo de preparar, y no requieren mucho tiempo ni seguir elaborados pasos.
Mezcla las frutas con el yogurt
El yogurt es un gran aliado de nuestra salud, que nos aporta de proteínas de alta calidad, vitaminas, calcio y minerales. Además, contienen probióticos, muy beneficiosos para el sistema digestivo. Al mezclarlo con frutas se produce una combinación saludable que nos aporta una gran variedad de vitaminas y minerales, y ayuda a regular nuestro tránsito intestinal. Si te gusta esa opción de desayuno, no descartes tomarla en otros momentos del día: es perfecta como merienda o como postre después de las comidas.
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Añade porciones de fruta a tu tostadas
Las tostadas son una excelente opción para un desayuno. Elige un pan integral, que tiene tres veces más fibra que un pan blanco y presenta un menor índice glucémico que este. Además, al contener cereales no refinados, todos sus nutrientes permanecen intactos.
Ahora piensa en sustituir la mantequilla por un poco de requesón o queso ricotta, y la mermelada por una pera o una manzana a rodajas. Para terminar, espolvorea un poco de canela por encima. Puedes hacer esto con la fruta que te apetezca y obtendrás un desayuno rico en hidratos de carbono saludables, calcio a través del queso, y todas la vitaminas y nutrientes de la fruta que elijas.
Haz un porridge de avena y frutas (y chocolate)
El porridge de avena es un desayuno muy saludable y saciante que se prepara en apenas unos minutos: solo tienes que cocer avena en leche hasta que alcance una textura cremosa. El puré resultante combina de maravilla con cualquier fruta que elijas. Algunas de las más utilizadas para este desayuno son el plátano, los frutos rojos o el coco rallado. Puedes añadir una onza de chocolate negro o un espolvoreo de canela para terminar de darle el toque dulce.
Con este desayuno combinas el valor nutritivo de las frutas con todos los beneficios que aporta la avena: fibra, vitamina A, aminoácidos esenciales y ácidos grasos omega 6.
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