No te prives de los beneficios del cacao
Si logras controlar su consumo, no hay ninguna razón para que renuncies a las propiedades que encierra este súper alimento.
A veces nos asalta la duda de si debemos renunciar al chocolate, o podemos consumirlo si nos garantizamos que no va a repercutir en nuestra salud y en nuestro peso. Claramente no debemos renunciar a él y a todos sus beneficios, pero sí debemos atenernos a algunas pautas y, sobre todo, distinguir el cacao original de los productos procesados, que le añaden azúcares, leche y aceites vegetales.
Una vez que sabemos que no nos equivocamos a la hora de comprar el producto, es importante que no nos pasemos con la cantidad. Lo ideal, 1 o 2 onzas unas 3 veces por semana. Elige chocolate negro con el mayor contenido posible de cacao, que tenga la menor cantidad de azúcares y grasas saturadas.
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Rico en minerales y vitaminas
El cacao destaca por contener numerosos minerales. El magnesio es el que se presenta en un mayor porcentaje y, entre otras cosas, favorece la concentración y mejora la memoria. Donde se encuentra más cantidad de este mineral es en su semilla.
Además contiene fósforo, potasio, cobre, hierro, calcio y zinc. El cobre, por ejemplo, ayuda a absorber el hierro y a la creación de colágeno; el potasio previene accidentes vasculares; y el hierro es necesario para que el oxígeno recorra nuestro cuerpo.
También nos aporta vitaminas A, B1, B2, B3, C, E, y encabeza la lista antioxidantes naturales, junto al té verde y el vino tinto. En su manteca natural tiene grasa monoinsaturada similar a la del aceite de oliva.
Repleto de beneficios para nuestra salud
La gran cantidad de antioxidantes que, como hemos dicho, posee el cacao, se asocia a la prevención de enfermedades cardiovasculares, hepáticas, gástricas e incluso diabetes. El cacao tiene dosis muy bajas de cafeína, que resultan prácticamente insignificantes. Su efecto estimulante se debe a la teobromina, que es más suave y tiene un efecto más prolongado. También contiene otras sustancias como la feniletilamina, que proporciona sensación de placer, y serotonina, que nos sumerge en una sensación de calma y bienestar.
Por otra parte, si lo consumimos desde la infancia, ayuda a prevenir problemas neurológicos cuando somos adultos. Una de sus virtudes más sorprendentes es que ayuda a reducir el colesterol malo (LDL) y aumenta el colesterol bueno (HDL).
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Es un gran aliado de tu belleza
Es un ingrediente muy utilizado en cosmética, especialmente por su efecto sobre la piel, a la que deja suave y brillante. El mismo efecto tiene sobre el cabello, que recupera su brillo e hidratación tras una envoltura en cacao. El cacao, ingerido, tiene un poderoso efecto antioxidante que actúa contra el envejecimiento celular gracias a su alto contenido en polifenoles. Por otro lado, sus flavonoides te protegen contra el daño celular causado por los radicales libres.
También tiene un efecto antiinflamatorio y te ayuda a tener un vientre plano gracias a su contenido en fibra, que ayuda a regular el tránsito intestinal.
Hay diferentes formas de tomar cacao
Es cierto que la presentación en tabletas divisibles en onzas es muy cómoda para comer y nos permite llevar un control de la cantidad de cacao que tomamos. Pero no tenemos que renunciar a otras formas tradicionales que nos gusten, como el clásico vaso de leche (o bebida vegetal) a la que puedes añadir cacao en polvo a tu gusto; es un imprescindible en la elaboración de bizcochos y galletas caseras; resulta delicioso en una fondue de chocolate con frutas; y de todas las maneras que a ti se te ocurra.
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