Entrevista a María Blasco, directora del CNIO

¿Cómo influyen los telómeros en el envejecimiento o el cáncer?

Los telómeros juegan un papel fundamental en la aparición de algunas enfermedades como el cáncer y en el envejecimiento. La bióloga María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas responde a unas preguntas sobre la telomerasa.

por Nuria Safont

Quizá hayas oído hablar de los telómeros y de su papel para retrasar el envejecimiento o combatir algunas enfermedades. Aunque aún es pronto para actuar sobre ellos, los estudios que se están llevando a cabo son muy prometedores. Hablamos con una de las expertas más reconocidas a nivel mundial, María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, para que nos explique qué son los telómeros y nos adelante cuáles son los avances que se están produciendo en medicina antiaging

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¿Qué son los telómeros?

Los telómeros son como unos capuchones que se encuentran en los extremos de los cromosomas, que es donde se encuentra nuestro material genético, nuestro ADN, y los protegen. Son esenciales para la vida, pero con el paso del tiempo se desgastan; lo que desencadena el envejecimiento de nuestras células y tejidos y, en definitiva, de nuestro organismo. En nuestro laboratorio hemos conseguido aumentar la esperanza de vida en ratones hasta un 40% mediante la activación del enzima telomerasa, que es capaz de alargar los telómeros y mantenerlos jóvenes durante más tiempo.

¿Son responsables también de algunas enfermedades?

Muchas enfermedades que son las principales causas de mortalidad en nuestra sociedad son consecuencia del proceso de envejecimiento, como por ejemplo el cáncer, las enfermedades cardiovasculares o las neurodegenerativas como el Parkinson o el Alzheimer. Ahora que sabemos que incidiendo sobre la longitud de los telómeros podemos retrasar el envejecimiento en ratones, estamos investigando cómo la activación de la telomerasa tiene efectos terapéuticos en estas enfermedades. Los resultados son muy prometedores aunque su aplicación en humanos no es inmediata y tendrá que pasar por las fases regulatorias y los ensayos clínicos con pacientes.

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¿Hay alguna manera de alargar estos telómeros?

Mediante el enzima telomerasa, que es capaz de mantener los telómeros largos y por lo tanto proteger de uno de los eventos que llevan al envejecimiento. La telomerasa es, además, esencial para la vida, sino fuera por la telomerasa los telómeros se agotarían en una generación y no sería posible mantener las especies.

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Si las células cancerígenas son capaces de despertar la actividad de la telomerasa, ¿podemos despertarla de otros modos?

En el laboratorio estamos buscando cómo despertar su actividad. En este sentido, hemos desarrollado una estrategia de terapia génica con telomerasa en la que usamos vectores virales que permiten despertar su actividad de manera temporal. Hemos patentado esta estrategia para distintas patologías y estamos valorizando la tecnología.

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¿Se puede vencer al cáncer evitando que actúe la telomerasa?

Efectivamente. Recientemente, hemos demostrado por ejemplo que podemos frenar el glioblastoma, el tumor cerebral más común, bloqueando una proteína llamada TRF1 que protege los telómeros. El bloqueo de esta proteína destruye los telómeros, lo que provoca el envejecimiento instantáneo de las células tumorales (senescencia) y su muerte. Ahora estamos desarrollando en el CNIO inhibidores que bloqueen esta proteína para comprobar su eficacia en combinación con otros fármacos que se están usando en la clínica con pacientes con cáncer.

Respecto al envejecimiento, ¿podemos retrasar nuestra edad biológica?

Nuestra edad biológica viene determinada por nuestros genes y por los hábitos de vida. Hay experimentos que indican que nuestro estilo de vida puede incidir en la longitud de nuestros telómeros. Sin embargo, para retrasar el envejecimiento biológico de manera muy significativa seguramente habría que incidir sobre los mecanismos moleculares del envejecimiento, y en el caso de los telómeros, esto implicaría mantenerlos largos con el enzima telomerasa. Esto es algo que hemos visto que se puede hacer en ratones. En el caso de humanos, estamos estudiando el uso del enzima telomerasa para el tratamiento de enfermedades asociadas al envejecimiento.