La llegada del buen tiempo nos invita a practicar deportes al aire libre como el running, que además de tener la gran ventaja de disfrutarlo en cualquier momento y lugar es, según algunos estudios, muy beneficioso para nuestra salud mental ayudando, entre otras cosas, a combatir la ansiedad y el estrés.
No es nada nuevo que la práctica de ejercicio físico trae consigo mejoras físicas y estéticas, pero también una gran sensación de bienestar con nosotros mismos; ya que mejora la autoestima y la motivación. ¿Quién no siente después de unas semanas entrenando que hasta la ropa le sienta mejor?
La explicación la encontramos en la biología humana y, concretamente, en las hormonas. El ejercicio provoca la liberación de adrenalina, serotonina y endorfinas, hormonas asociada al placer. Por esto mismo, también facilita la relajación y mitiga la sensación de ansiedad o la depresión. Un estudio elaborado en 2015 por el psicólogo deportivo Oliver Martínez junto con los doctores Josep Pla y Óscar Pino, lo corrobora. “El running ayuda a conocer y superar nuestros límites mentales. Esto queda reflejado, por ejemplo, en el runner que se inicia corriendo 20 minutos por su cuenta y acaba por ponerse el objetivo de correr una maratón. Esta manera de establecer objetivos y alcanzarlos nos da una sensación de control que refuerza nuestra confianza. Esto facilita la superación de otro tipo de adversidades mucho más complejas, ya sean familiares, laborales o de salud”, explica Oliver Martínez.
Otros beneficios psicológicos que proporciona el running a las personas que lo practican según los expertos:
- Es uno de los deportes que más favorece la productividad y sensación de control del tiempo. Como decíamos, el running nos permite salir de nuestra zona de confort y rendir mejor; lo que se traslada también a nuestra vida cotidiana y al trabajo. En definitiva, consigue motivarnos y ayuda a que trabajemos el autocontrol de las emociones e incrementa la capacidad de tolerar el estrés.
- Ayuda a desarrollar la capacidad de aprendizaje, el rendimiento cognoscitivo y a frenar el declive del funcionamiento cerebral, llegando incluso a prevenir demencias y enfermedades neurodegenerativas. Ello es debido al efecto de varios mecanismos neurobiológicos, como el incremento de los niveles de BNF en el cerebro, una proteína que estimula el crecimiento y longevidad de las neuronas y de norepinefrina, neurotransmisor que mejora la atención y la concentración.
- Mejora nuestras relaciones personales. La práctica de running en grupo o en pareja promueve habilidades sociales como la empatía, la comunicación, la negociación, la persuasión y la motivación.
- Por último, cabe señalar otros beneficios fisiológicos, como que reduce el riesgo de padecer diabetes, favorece el control del peso, la buena digestión y el descanso y fortalece los huesos.