La fatiga y el agotamiento son uno de los 'males' más comunes en nuestra sociedad, que pueden llegar, incluso, a convertirse en crónicos si no le ponemos remedio. Las causas pueden ser un exceso de actividad o un problema de mala alimentación, pero también el calor del verano puede provocarnos fatiga pasajera. La buena noticia es que podemos plantar cara al agotamiento a través de nuestra alimentación. ¡Toma nota de los consejos de nuestra nutricionista!
A parte de estoss consejos dietéticos, recomiendo dormir ocho horas diarias, intentar no sobrecargarnos con tareas y relajarnos con clases de meditación como, por ejemplo, yoga.
- Hidratos de carbono complejos. Son aquellos que podemos encontrar en alimentos como el pan, la pasta, el arroz, la patata… Nos van a aportar gran cantidad de energía y, si los consumimos en platos bajos en grasas como, por ejemplo en ensalada, no nos tienen por qué hacer engordar y menos si gastamos las calorías que nos aportan.
- Ácidos grasos esenciales. Son aquellos que no se pueden formar en nuestro organismo y, por lo tanto, hay que aportarlos a través de la alimentación. Estamos hablando del omega 6 y 3. Podemos obtenerlos a través de la alimentación en frutos secos, aceites y pescados azules. Estos van a ser importantes también por el aporte de vitamina E, nutriente con gran importancia para nuestra salud.
- Proteínas. Principalmente debemos aportar las de mayor calidad o alto valor biológico, que son las que se encuentran fundamentalmente en alimentos proteicos de origen animal. En concreto, debemos prestar atención en este caso a un aminoácido esencial llamado triptófano, ya que favorece la hormona del bienestar, la serotonina. Este aminoácido se encuentra en la leche, huevos y cereales integrales. Os recomiendo comer soja con jengibre; ya que la soja contiene proteínas de alta calidad que, junto con las vitaminas y minerales que aporta el jengibre, sería un plato altamente revitalizante.
- Vitaminas. Importantes la vitaminas del complejo B, ya que son indispensables para el buen funcionamiento del organismo y que podemos encontrar en cereales integrales, legumbres, levadura de cerveza... Muy importante también las vitaminas C y A.
- Minerales. El más importante para evitar la fatiga sin duda es el hierro, que nos aporta oxígeno. Podemos encontrarlo en carnes rojas, espinacas, lentejas, y en especias como tomillo, orégano y laurel. Recomiendo infusiones de tomillo y romero.
El mejor aporte de energía es llevar una dieta en la que predomine el verde, rica en ensaladas de muchos colores, verduras y frutas como el higo y el plátano. Evitar bebidas excitantes como el café, el alcohol y los refrescos de cola. Por último, ingerir en el desayuno todas las mañanas una cucharada de polen o jalea real para empezar con energía la mañana.