¿Sabes cómo hacer el mantenimiento de la cocina? Descubre los cuidados que debes darle

La cocina es una de las entancias más importantes de la casa. No solo es el lugar en el que preparamos la comida, sino que cada vez más se está convirtiendo en un espacio social en el que nos reunimos, trabajamos y pasamos tiempo en familia y con amigos.

Por eso es esencial que la cocina sea cómoda y acogedora, y que esté limpia y cuidada. Y para que se mantenga así durante mucho tiempo, hemos de darle las atenciones que merece y necesita. Toma nota de las tareas de mantenimiento que debes tener en cuenta.

El centro de la casa

Precisamente porque la cocina se convierte muchas veces en el centro de la casa, es un espacio con mucho uso. Cocinar, fregar, limpiar... Las superficies de muebles y revestimientos están expuestos a actividades intensas, a la suciedad y las manchas, a la humedad y el agua.

Es esencial que seamos cuidadosos para que la cocina no se deteriore antes de tiempo. Para ello, hay que evitar el uso de objetos punzantes, estropajos abrasivos o productos de limpieza agresivos. También hemos de tratar con cuidado los muebles a la hora de abrir y cerrar puertas o cajones.

Leer: Estas son las claves para planificar una cocina moderna

La limpieza, profunda pero suave

Limpiar con delicadeza no significa que no vayamos a acabar con la suciedad, las manchas o los microorganismos. Podemos dejar la cocina perfecta utilizando los productos y utensilios adecuados a cada superficie, con el fin de no deteriorarlas.

Hoy hay múltiples formas de limpiar los muebles, los revestimientos y las encimeras sin riesgo de estropearlas. Como punto de partida siempre podemos utilizar agua y jabón neutro, una mezcla que resulta efectiva y no daña los materiales porque no es agresiva.

Un consejo: conviene no empapar las superficies de madera, ya que el agua no le viene nada bien a este material. Utiliza bayetas y trapos que no rayen y escúrrelas a conciencia antes de limpiar.

Leer: Descubre qué materiales triunfan en las cocinas de hoy

La protección es esencial

Para evitar que tu cocina se estropee antes de lo necesario has de apostar por la protección de los materiales y superficies, algo que puedes llevar a cabo de distintas maneras.

- Utiliza tablas de cortar a la hora de cocinar y no se te ocurra prescindir de ellas y cortar sobre la encimera. Aunque pienses que vas a tener cuidado y que no pasará nada, es fácil arañar la superficie con el filo de los cuchillos.

- Usa soportes o protectores de calor para apoyar las ollas y cazuelas cuando las retires del fuego. No las coloques directamente sobre la encimera, ya que el calor puede estropear el material.

- Si tienes ventanas en la cocina, vístelas con un estor o con algún otro sistema que salvaguarde los muebles y la encimera del sol.

- Puedes proteger la placa de cocción con algún panel para evitar que se dañe o se raye.

Leer: Claves para elegir los mejores azulejos para el salpicadero de la cocina

¡Guerra a las manchas!

En una cocina las manchas están a la orden del día, como no puede ser de otra manera. Sin embargo, la forma en que actuamos ante ellas puede determinar el resultado.

Para empezar, es fundamental ser cuidadoso con las superficies porosas, ya que si una mancha penetra en ellas después será muy difícil de eliminar. Por eso, materiales como la madera o el mármol han de llevar un tratamiento protector que los impermeabilice. Tenlo en cuenta y renueva dicho tratamiento cuando sea necesario.

Recuerda, además, limpiar las manchas lo antes posible, ya sean de café, de té, fruta o tomate. Cuanto antes las elimines de las superficies, tanto mejor.

Un consejo: cuidado con los limpiadores agresivos. Utiliza el producto adecuado para cada tipo de material y superficie y, si tienes dudas, haz una prueba en una zona no visible.

Leer: Descubre por qué la encimera es el elemento estrella en la cocina

El calor, un riesgo en la cocina

Puede que pienses que tu encimera es capaz de aguantarlo todo. Sin embargo, sea cual sea el material del que está fabricada, lo mejor es evitar poner cazuelas calientes sobre ella.

También es importante controlar el calor que desprenden ciertos electrodomésticos, que pueden calentarse en exceso y estropear las superficies próximas, como armarios, muebles o estantes. Es el caso de cafeteras, tostadoras, etc.

Leer: Todas las claves para elegir el mejor color para decorar tu cocina

Utiliza la campana extractora

Ponerla en funcionamiento cuando empieces a cocinar es muy importante. Puede que te parezca un poco molesta debido al ruido que pueda hacer, pero no solamente te librará de humos y olores mientras preparas la comida. También evita que la grasa se deposite en las paredes y los muebles de la zona de cocción.

Para lograr que funcione correctamente es importante que la limpies con la frecuencia necesaria. Deja los filtros como nuevos metiéndolos en el lavaplatos (consulta las instrucciones para comprobar que lo puedes hacer) y utiliza un producto desengrasante para el interior y el exterior de la campana.

Leer: Así eliminarás la grasa de cualquier rincón de la cocina

Mantenimiento de los electrodomésticos

No se trata únicamente de limpiarlos. También es necesario utilizarlos correctamente, desde la lavadora hasta el frigorífico, pasando por el lavavajillas. No los sobrecargues, sigue las recomendaciones de uso de los fabricantes y dedica un tiempo a hacer el mantenimiento que necesitan.

Esto último implica limpiarlos adecuadamente cada cierto tiempo, renovar o limpiar los filtros (en caso de que los tengan), etc.

Leer: Todo lo que tienes que saber para elegir los muebles de la cocina, y acertar de pleno

¡Cuidado con la humedad!

El agua y la humedad no son nada beneficiosos en la cocina, ni en la mayoría de espacios de la casa. Sin embargo, están muy presentes en ella por razones evidentes. Por eso es importante tener cuidado con el agua.

Con el paso del tiempo y gracias a la tecnología desarrollada, hoy tenemos muchos materiales capaces de soportar sin problemas los efectos de la humedad, las salpicaduras de agua, etc. Sin embargo, eso no evita que pueda suponer un riesgo de deterioro para los materiales y superficies de tu cocina, por lo que merece la pena tener en cuenta ciertos cuidados.

Recoge el agua que se derrame en la encimera, alrededor del grifo o en cualquier otra superficie, como los muebles. También es conveniente esperar un rato antes de abrir el lavavajillas cuando este termine el ciclo de lavado, de forma que no salga el vapor caliente que puede estropear los muebles cercanos.

Leer: Cómo limpiar y cuidar la encimera de la cocina para que esté siempre como el primer día

Organiza el interior de los muebles

Hay muchas cosas que almacenar en la cocina, en muebles, armarios, gavetas y cajones. Es fundamental organizar de una forma lógica los interiores, de forma que el peso de lo que guardes (especialmente si son cazuelas y ollas grandes) quede bien repartido. De esta manera no se deteriorarán algunas partes por estar sobrecargadas y los muebles durarán más. Coloca las cosas más pesadas en los cajones de abajo o en la parte inferior de los mismos.

Leer: Así debes organizar y limpiar los armarios de la cocina