Descubre por qué la encimera es el elemento estrella en la cocina

Son muchas las decisiones que hay que tomar cuando se acomete la reforma integral de la cocina, y una de las más importantes (sino la principal) es la elección de la encimera. Esta superficie de trabajo es la protagonista absoluta de la vida cotidiana en la cocina, por lo que acertar al elegirla se convierte en algo fundamental. Estas claves pueden guiarte en el proceso.

Es el centro y lo sabes

Desde que nos levantamos cada mañana hasta que nos acostamos, la cocina es uno de los espacios de la casa en los que más tiempo pasamos, especialmente en los últimos tiempos en los que está reivindicando su función social dentro del hogar.

Ya no es ese lugar en el que se cocina y punto. Es, más bien, un espacio multiuso donde se cocina, se trabaja, se come y desayuna, se comparte… De hecho, cada vez son más las personas que abren la cocina al salón para integrarla en el espacio de estar de la casa. En este escenario elegir la encimera se convierte en un aspecto prioritario.

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Los materiales, de calidad

Si, a la hora de plantear la reforma de la cocina, tu presupuesto es limitado (algo que suele ser lo habitual) será necesario estar bien centrado al elegir los materiales para paredes y suelos, mobiliario, electrodomésticos y, por supuesto, la encimera. Es increíble de qué forma se disparan los gastos cuando añadimos un par de ideas o deseos a la lista de imprescindibles.

Sin embargo, hay ciertas cosas en las que merece la pena invertir y una de ellas es, sin duda, el material de la encimera. Piensa que la vas a usar continuamente, durante muchos años, por lo que ha de gustarte y ha de convencerte. Debe ser capaz de resistir el paso del tiempo y continuar en perfecto estado.

Los materiales de calidad para encimeras se centran, sobre todo, en la piedra natural, el cuarzo compacto y el porcelánico o piedra sinterizada. Aunque son los más caros, también son los más funcionales, los más bellos y los más resistentes y duraderos.

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El elemento integrador

Uno de los objetivos que se persiguen al decorar un espacio, ya sea la cocina o el dormitorio, es lograr un efecto equilibrado y armonioso, en el que los elementos se combinen y acompañen unos a otros de manera natural. Eso es, precisamente, lo que hemos de pedirle a la encimera: que actúe de elemento integrador entre las distintas superficies de la cocina.

No hay una única forma de conseguirlo. Puedes apostar por colores y acabados neutros, más fáciles de combinar, o elegir un tono llamativo que contraste con el resto de elementos y se convierta en el punto de atención de todo el espacio.

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Apuesta por el mejor mantenimiento

Deja las superficies delicadas para otros espacios de la casa. En la cocina, y concretamente en la encimera, no puedes estar preocupándote de no manchar, de no deteriorar y de cómo limpiar.

Necesitas una encimera que no se raye (aunque uses tablas de cortar), que no se estropee si le cae vinagre, aceite o zumos de frutas. Que, además, se limpie de una pasada. Los materiales que existen hoy para encimeras te ofrecen todo eso y más. Muchos de ellos presentan una porosidad muy baja, prácticamente nula, por lo que las manchan no penetran en el material y su limpieza es muy sencilla.

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El blanco infalible

Tanto si tu cocina es espaciosa como si se trata de un espacio pequeño, una encimera de color blanco será siempre un acierto. Lo mismo sucede con el estilo o con el tipo de mobiliario: las encimeras blancas van bien en cualquier ambiente y combinan con todo (o casi todo). Este color refleja la luz como ningún otro y consigue que los espacios se perciban más amplios y desahogados.

A la hora de combinar la encimera y los muebles, todo es posible. Los armarios blancos quedan genial si se acompañan de una encimera también blanca, en un efecto total white superdecorativo. Si esta idea te parece algo fría, piensa que hay muchas formas de aportar calidez: con accesorios de madera, tiradores y grifería en negro, un antepecho o salpicadero de un color diferente, etc.

Otra opción genial es combinar la encimera blanca con muebles de madera clara (puedes elegirlos todos de madera o solo algunos). El efecto es muy decorativo y cálido, con un punto nórdico que nos encanta.

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En cocinas abiertas al salón

En este tipo de espacios, cada vez más apreciados, es muy importante elegir para muebles de cocina y encimeras materiales y acabados neutros y serenos, que armonicen con el salón. Eso no significa que debas poner todo en el mismo color, sino que apuestes por elementos que se integren fácilmente: armarios de líneas rectas y limpias con puertas lisas y sin tiradores, colores neutros que no sean muy llamativos, etc.

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Cuarzo, resistencia y atractivo en uno

Es un material de siempre, que ya no podemos considerar novedoso. Sin embargo, gracias a sus muchas cualidades, está a la orden del día, sin perder vigencia. Sigue siendo una de las opciones más recomendables al elegir el material para la encimera.

No solo es muy decorativo y está disponible en un interminable número de colores, acabados, texturas, etc., sino que resiste inalterable durante muchos años. No se raya fácilmente, no es poroso y se limpia con facilidad. Como desventajas, podríamos decir que su resistencia a los impactos es mejorable y que no aguanta altas temperaturas.

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Efecto mármol

La piedra natural, y el mármol concretamente, es un material muy decorativo para la encimera de la cocina, ya se trate de un ambiente clásico o vanguardista. Sin embargo, además de su alto precio, el mármol natural es un material poroso, que es necesario tratar para evitar que se manche y se deteriore en poco tiempo. Si se les aplica un protector específico, las encimeras de mármol son duras y muy resistentes al rayado, a los golps y al calor.

En cualquier caso, puede que prefieras una alternativa más práctica: apuesta por un material que lo imite con fidelidad, como el cuarzo compacto o el porcelánico. Tendrás la belleza del mármol y las cualidades técnicas de estos materiales más innovadores.

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Encimeras del siglo XXI

Si, en cuestión de encimeras, lo quieres todo, tienes a tu alcance un material que te va a convencer: el porcelánico o piedra sinterizada. Se trata de un material compacto que se fabrica a partir de compuestos minerales naturales, tratados a altas presiones y temperaturas.

El resultado es una superficie no porosa, muy dura y resistente, capaz de imitar a la perfección al mármol, la madera o cualquier otro material.

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