Este verano ¡toca pintar toda la casa! Descubre el color que mejor le va

Estamos en la época ideal para pintar la casa: el verano. En la temporada estival, los días son más largos, hay más horas de luz, y por tanto es el mejor momento para apreciar cómo quedarán los colores con iluminación natural. Pero además, durante el verano, puertas y ventanas se abren con frecuencia para que corra el aire, lo que facilita, ya no solo que la pintura se seque antes, sino también a mitigar los olores. Por eso, si estás pensando en transformar cualquier espacio de tu casa con una mano de pintura, no pierdas tiempo y empieza por elegir el tono que dará un giro a la decoración de tu casa. Te ayudamos a despejar dudas con las tendencias cromáticas de la temporada.

Blanco: más luz y amplitud

Es, sin duda, el gran preferido para pintar las paredes. ¡Y no es de extrañar! Además de multiplicar la luz y hacer que los espacios parezcan más grandes, el blanco es un color atemporal que encaja en cualquier estilo y contribuye a realzar la decoración. El contraste del fondo blanco con el color de los textiles y el acabado de los muebles crea un efecto visual muy atractivo.

Para realzar una pared blanca y convertirla en un punto focal, siempre puedes recurrir a molduras decorativas como nos propone en este caso la marca Valentine. Las molduras añaden textura y dimensión, rompiendo la monotonía y creando interés visual en una pared pintada en color blanco.

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¿Quién dijo frío?

No descartes pintar de blanco por miedo a que la estancia se vea fría, pues existen muchas fórmulas para sumar calidez. Una idea es apostar por blancos cálidos como marfil, lino o hueso, tonos envolventes y acogedores. También puedes contrarrestar esa sensación fría del blanco, con muebles y complementos de madera o fibras vegetales; con acentos de color a través de los accesorios, como cojines, cortinas, obras de arte o muebles auxiliares y, con plantas y otros elementos vegetales que aporten vida. Basta con ver este salón de El Corte Inglés para comprobar que una estancia pintada de blanco también puede ser cálida.

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Beis: calidez al instante

Si buscas una alternativa cálida al blanco puro, igual de versátil y atemporal, el beis es tu color. Es un tono suave y discreto que combina con una amplia gama de colores y estilos decorativos y, puesto que transmite calma, ideal para espacios de descanso como salones o dormitorios. Un ejemplo perfecto lo vemos en este ambiente, con textiles de la firma Lizzo, que distribuye Pepe Peñalver, en la misma gama de las paredes, si bien el beis también funciona de maravilla con toques de colores vibrantes, tonos tierra y pastel. Si pintas las paredes de beis, un tono cálido y suave, y el techo de color blanco se creará un contraste visual que hará que la estancia parezca más amplia.

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Topo: sereno y elegante

Entre el marrón y el gris se encuentra el color topo, un tono neutro que evoca serenidad, lo que lo hace especialmente adecuado para salones y dormitorios, aunque también es perfecto para sumar un punto de elegancia a baños y cocinas. Es una elección ideal cuando se desea disimular pequeñas imperfecciones en las paredes, como marcas o pequeñas grietas. Su tono medio y neutro ayuda a que estos detalles sean menos visibles, brindando una apariencia más uniforme a las paredes. En este caso, se ha combinado dos colores de Pinturas Montó: Grava Húmeda en el zócalo y Nuez de Cola en el resto, un tono beis que realza la belleza y elegancia del color topo.

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Terracota para paredes con carácter

Inspirado en los tonos terrosos y arcillosos de la naturaleza, el terracota es un color con mucha personalidad y sus tonalidades más suaves son sorprendentemente versátiles. Combínalo con tonos neutros como beige, blanco o gris para lograr una paleta suave y sofisticada, o con toques de colores complementarios, como azul o verde, si eres más de contrastes dinámicos. En cualquier caso, pintar las paredes en este tono dará a la estancia un toque clásico y sofisticado que perdurará a lo largo de los años. El salón que ves sobre estas líneas se ha pintado con el color 12179 Embrace de la gama Majestic Beauty&Resist, de Jotun.

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Verde, el color de moda

Ahora que todo lo que tenga que ver con el mundo natural está tan de moda, el verde, un color que nos conecta directamente con la naturaleza, está en el top de las tendencias cromáticas. En este caso, la firma italiana San Marco nos propone Dim Green, una tonalidad muy suave, refrescante y luminosa, que funciona de maravilla tanto con tonos blancos y grises como con toques de colores vivos, como naranja, amarillo o rosa y, cómo no, con colores tierra, como marrones y beis.

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¿Y si combinas dos tonalidades diferentes del mismo color?

Es un recurso ideal para romper la monotonía de una pared lisa y añadir dinamismo al espacio. Pero, además, si sabes jugar con las distintas tonalidades, la estancia ganará profundidad y sensación de amplitud.

En este caso, la firma Gancedo, que cuenta con su propia línea de pinturas, nos propone utilizar el tono más oscuro en la parte inferior y el más claro en la zona superior para agregar luminosidad y amplitud. Los colores son Pátina y Greenish.

Ten en cuenta que, una vez decidido el color de las paredes, que será el dominante, tendrás que decidir con qué otros colores acompañarlo. Este color secundario será el de los grandes textiles –tapicerías, alfombras, cortinas…– y/o papeles pintados. Puedes optar por un esquema de color en armonía, con tonos de una misma gama cromática, o en contraste, es decir, jugar con colores complementarios para conseguir mayor grado de contraste.

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Azules suaves: frescos y relajantes

Siguiendo con la moda de los colores inspirados en la naturaleza, el azul está también en tendencia. Las tonalidades claras, como el T0.10.70 de Bruguer utilizado en este rincón de trabajo, contribuyen a crea ambientes relajantes y serenos y, como reflejan la luz, están especialmente indicadas para espacios pequeños. Van a la perfección con otros colores naturales como el blanco, el beige y los tonos de madera, así como con acentos de colores vivos como el coral o el verde. En este caso se ha combinado con el gris TN.01.71 y con el amarillo G0.16.78, también de Bruguer.

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Sofisticado

Los azules oscuros son geniales para crear ambientes íntimos y acogedores, especialmente en espacios como comedores o zonas de estudio. Si temes que pintar toda la habitación de este color pueda resultar abrumador, utilízalo solo en un frente y combínalo con tonos más claros para crear contraste y equilibrio visual. Con blancos, gris y negro, tendrás un look elegante y vanguardista. En este caso, se trata del azul Teal Blue de la marca italiana de pintura San Marco.

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Tonos empolvados (y si es rosa, mejor)

Sí, el rosa triunfa esta temporada estival en todas sus versiones, pero a la hora de pintar las paredes de tu casa, las tonalidadas más suaves o apagadas se llevan la palma. Ayudan a crear ambientes serenos y tranquilos y son una opción ideal para espacios pequeños o algo oscuros, ya que contribuyen a ganar amplitud y luminosidad. Y además de todo esto, los tonos empolvados son conocidos por su apariencia delicada y elegante, por lo que con ellos el look sofisticado y femenino está garantizado. Las paredes de este salón se han pintado con el color Maquillaje Suave de Pinturas Montó.

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