10 recibidores que nos han conquistado por sus ingeniosas soluciones de almacenamiento

¡Cómo nos gustan las soluciones que aúnan estilo y decoración con practicidad y almacenamiento! Son dos características que sí o sí deben darse la mano en el interiorismo de un espacio como la entrada de casa. El recibidor ha de resolver el almacenamiento de abrigos y otros elementos. Pero también ha de ser cómodo en uso al llegar o salir de casa y lucir perfecto.

Muebles a medida diseñados al milímetro

Con una solución a medida, el recibidor se transforma. Es posible diseñar teniendo en cuneta las características del espacio y sus dimensiones para rentabilizar centímetros y hacerlo en el acabado que desees para lograr la estética oportuna. En este caso, el diseño del estudio Egue y Seta pasa por aprovechar toda una pared con un mueble con armarios y una zona de banco con cajón inferior. En la trasera, perchas de pared y un bonito juego de iluminación ambiental para la entrada.

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Piezas esenciales con mucha capacidad para guardar

Este es un ejemplo de recibidor en el que no se usa un diseño a medida y también se aprovecha el espacio. Hay que recurrir a muebles con capacidad que no saturen. Armarios, cómodas, aparadores y zapateros. Los zapateros son un gran aliado porque tienen poco fondo y solucionan mucho. Además, se pueden convertir en el mueble de apoyo sobre el que colocar espejos y láminas y algún elemento decorativo. El armario de fondo convencional tiene 60 cm y los reducidos de 40 cm también te permiten guardar zapatos, mochilas y abrigos. Aquí, una propuesta con productos de Ikea.

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Cómoda y armarios

En este recibidor diseñado por la interiorista Natalia Zubizarreta, la pared principal se aprovecha con dos módulos de armarios hasta el techo y se aligera con un elemento central a modo de aparador con espacio para guardar (carpetas, ropa de casa o zapatos, en función de necesidades) más bajo, que sirve de elemento de apoyo al llegar a casa.

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Un diseño para el recibidor que lo tiene todo

Andrea Diego y Vanesa Vergara, gerentes de IN56, han diseñado esta composición que cuenta con todo lo necesario para aprovechar el recibidor y guardar mucho. Un frente de almacenaje con puertas lisas, un espacio de asiento con banco integrado y un mueble de apoyo con cajón y espejo que incorpora también un puf. Todo en neutro y madera, combinando los acabados en una composición ligera y cálida al mismo tiempo.

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Con un elemento divisorio de almacenaje

El Estudio de Arquitectura Mónica Diago ha creado un elemento de almacenaje que, al mismo tiempo, es divisorio. Entrada y salón quedan delimitados aunque conectados por un mueble estantería de madera con trasera calada que deja pasar la luz y preserva de miradas desde la puerta de acceso.

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De fondo reducido

Si quieres delimitar el recibidor de otra estancia sin perder luz ni conexión visual, quizá pienses que pierdes capacidad para guardar. Pero con este tipo de solución, puedes jugar con ambas ideas. Crea un mueble de almacenaje en la parte inferior que puede ser de fondo reducido y actuará como zapatero con estantes o soportes inclinados en el interior. Sobre esa pieza, instala el cerramiento de cristal o alistonado que quieras para lograr la separación sin restar amplitud.

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Cajones que sacan partido a un espacio difícil

El diseño de esta zona de pasillo es una creación del estudio de interiorismo Crea Spacios que resuelve el almacenaje aquí con armarios, ubicados a continuación de este elemento bajo que suma espacio para guardar. Se trata de dos cajones ubicados debajo de un vano acristalado que comunica estancias. Se aprovecha un banco que queda adosado al otro lado del cristal para "sacar" cajones por el pasillo.

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Ajustar medidas y elementos para no saturar un recibidor pequeño

Si necesitas un armario para guardar y almacenar en el recibidor, pero es pequeño y no quieres saturarlo, juega con el ancho de este (desde 50 cm) y combínalo con un banco que resulta más liviano. Es de poca altura, no llena, sirve de apoyo y para sentarse al llegar a casa. En la parte baja puedes incorporar gavetero o puertas para guardar. Aquí, Pia Capdevila Interiorismo ha optado por un diseño a medida en blanco que encaja en una zona de paso, que delimita el recibidor de la cocina con cerramiento de cristal.

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Almacenaje en paralelo: un pasillo para guardar

Este espacio de paso queda custodiado a cada lado por armarioa para guardar. Un proyecto a medida, ideado por Tinda´s Project, en el que un lado está ocupado por las puertas de armarios de suelo a techo y, en el contrario, módulos de almacenaje con puertas sin tirador y una hornacina central que aligera la composición y sirve de apoyo. Estilismo de Mar Gausachs. El tono en el que está lacado el diseño, un color arena suave, resulta confortable y no satura.

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Un espacio mini resuelto en L con espacio de almacén

Thinking Home ha ideado aquí una solución práctica y con capacidad para un espacio mini de recepción. Y tiene lo suficiente para resultar tremendamente estético y práctico. Un banco con gavetas sobre un zócalo en la pared. Y en L un armario con puertas lisas sin tiradores y una hornacina que sirve de apoyo y como espacio para colocar algún detalle decorativo.

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