Sé industrial con una isla en acero inoxidable
Durante años ha sido el material por excelencia de muchos electrodomésticos, pero, sin duda, su acabado brillante y que recuerda al acero de las construcciones lo hace perfecto para destinarlo a una isla completa en la que el estilo industrial predomine. Y queda genial con las paredes de ladrillo, las estructuras vistas, las vigas de madera y los techos de bóveda catalana. Además, gracias a su acabado es capaz de reflectar toda la luz, aportando más luminosidad y carácter al espacio.
Cómo tener una cocina con isla, ¡pero sin obras!
Hay muchos muebles que se instalan sin obras y que pueden hacer las veces de isla de la cocina. Cierto que en ella no podrás instalar ni la zona de cocción, puesto que sería necesario llevar las conexiones eléctricas hasta ella, o la de aguas, con las tuberías y desagües. En ambos casos, las obras serían necesarias. Pero sí que puedes colocar una isla de cocina que sirva como zona de trabajo y que, además, ofrezca almacenaje.
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Una isla de cocina con doble función
En pisos pequeños o cuando se une la cocina al resto de la estancia, la isla de cocina puede tener muchas más funciones además de las comentadas previamente. Y es que su mera presencia puede actuar como ‘pasillo’, separando los ambientes. En este caso, la isla de cocina cumple la función de barra de desayunos y se extiende en forma de librería para potenciar esa sensación de pasillo y, al mismo tiempo, conseguir más espacio para guardar.
Cómo destacar la presencia de la isla de la cocina
Para que la isla de la cocina no pase desapercibida, la mejor manera de convertirla en el centro de todas las miradas es mediante la decoración. Si cuenta con barra de desayunos, coloca unos taburetes con personalidad que resalten su presencia. Utiliza también recursos como la iluminación para destacarla. Unas grandes lámparas que contrasten con el color de la isla, como estas en negro pueden ser el activo necesario para que tu cocina con isla sea más personal. Además, este tipo de complementos decorativos te ayudarán a marcar más su estilo sin perder la funcionalidad.
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Materiales que sirven de transición
Si tu cocina es abierta y tiene isla, utiliza su diseño para que actúe como elemento de transición entre esta y el comedor o el salón. Para ello, puedes revestirla de un acabado que esté también en la zona de al lado para que la decoración sea fluida y homogénea. En este caso, se ha revestido la isla de una madera de nogal que vemos también en la mesa de comedor, pero que destaca también en los muebles inferiores de la zona de trabajo. El resto, en blanco, asegurando la luz y la amplitud.
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Una cocina con zona de aguas y almacenaje abierto
La idea anterior del almacenaje te sacará de muchos problemas, pero si ubicas la zona de aguas en la isla, tienes que tener en cuenta que dentro de ella también van las conexiones de agua y desagües, que ocuparán mucho espacio, restándoselo al posible almacenaje. Puesto que el espacio para guardar se ve reducido, en este caso te recomendamos que lo dejes abierto y lo emplees para colocar algún objeto decorativo, los libros de cocina o una cristalería con carácter como en este ejemplo.
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Una isla con todo necesario
Porque contar con almacenaje en una cocina suele ser uno de los principales problemas, si cuentas con una isla, asegúrate de destinarlo a guardar todo tipo de utensilios. Y, como suele tener varios frentes, en el lado que dé al comedor guardar la vajilla, las soperas, juegos de té… Si tienes un juego bonito, piensa si colocar unos frentes de cristal que deje que tus platos se luzcan con elegancia.
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Una isla con tabique de cristal y mesa de comedor
Hay muchos tipos de cocinas con isla, pero en las que se apoya un cerramiento de cristal pueden cumplir además varias funciones. Por un lado, amplía la zona de trabajo y de almacenaje, pero por otra sirve para separar la cocina de la estancia contigua sin impedir el paso de la luz o la amplitud del espacio. En este caso, además, esta isla se convierte en mesa de comedor, actuando como transición entre ambientes.
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Las cocinas pequeñas también pueden tener isla
Cierto que si son cocinas abiertas se sacará más partido al espacio, pero aun así esta mini cocina llama la atención por su marcado estilo campestre y acabados en color verde, que la convierten en una de las más originales de esta galería. En ella se ha ubicado no solo una cómoda barra de desayunos, sino también la zona de aguas y de trabajo de manera que gran parta de la actividad se realiza mirando hacia afuera, ayudando a la percepción espacial.
Una isla que se vuelve natural
La mesa adosada a la isla de la cocina puede ser de muchas maneras. Puede ir hasta sobrepuesta, de forma que parezcan una sola pieza aunque en realidad sean dos. Pero, cuando hay espacio, ¿por qué no crear una zona para comer cómoda y original al mismo tiempo? Esta moderna cocina con isla encuentra su punto más natural gracias a la superficie en madera cien por cien natural que hace las veces de mesa. ¿Verdad que no puedes dejar de mirarla?
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Una cocina con isla a dos alturas
Lo comentábamos al principio: muchas islas de cocina se convierten en cómodos y agradables offices en los que desayunar cómodamente. En esta cocina con isla, el material de la encimera es el mismo, de manera que baja hasta la mesa. Pero lo que realmente llama la atención es la pata de cristal que la culmina, haciendo que su imagen sea mucho más ligera. Llama la atención también el acabado claro de la misma, en contraste con el color oscuro de los muebles de la cocina. Un recurso que sirve para llevar la luz sin prescindir del color.
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La cocina con isla que no quería ser cocina
Porque, aunque estamos acostumbrados a cocinas modernas, con muebles de líneas sencillas y puras, no todas las cocinas han de ser así. En esta cocina con una gran isla se han empleado materiales nobles tanto para su base, donde vemos una elegante madera, como para su encimera, que luce un impresionante porcelánico con acabado en mármol. Pero, sin duda, el punto de sofisticación lo ponen las molduras del techo en combinación con la moderna lámpara de lágrimas. Un espacio que respira elegancia y exquisitez.
Tener una cocina con isla se ha convertido en el sueño de muchos. Y es que, además de más espaciosas, son más cómodas. En ellas, la actividad gira en torno a la isla, muchas veces destinada a zona de trabajo, otra con la vitrocerámica en ella y otras con la zona de aguas, donde se ubica el fregadero y el lavavajillas. Pero una isla de cocina puede ser muchas más cosas: una barra de desayunos, una mesa de comedor adosada o donde te reúnes con tus amigos cuando haces una cena en casa mientras preparáis la cena. Estas 12 cocinas con isla son pura inspiración. ¡Algunas se instalan sin obras!
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