En decoración la creatividad no tiene límites y por eso, al armonioso dormitorio con dos mesas de noche iguales le ha salido un fuerte rival si se desea una composición más divertida y dinámica, ¡desconjuntarlas!
Selecciona el grado de contraste con el que te sientes más cómodo, simplemente la misma mesita en otras dimensiones, más alta o ancha, por ejemplo, o diseños diametralmente opuestos, para un resultado más original y hasta excéntrico, como en esta opción de Westwing con una elegante y ecléctica decoración, en la que las frescas fibras se emplean para una mesita de noche y la alfombra y la calidez de terciopelo arropa el cabecero envolvente.
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Estética semejante sin ser idéntica
En esta propuesta Banak Importa juega con el mismo tipo de pieza, pero con el acabado del sobre distinto, mientras que el de la izquierda es trenzado en un algodón blanco, el de la derecha es a base de ramas, para aprovechar esta parte del árbol que en ocasiones se acaba desperdiciando. Ambas piezas pertenecen a la colección Nusa, como el cabecero de cama.
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Del mismo material
Para una composición armoniosa una buena elección es apostar por que las dos piezas mantengan el mismo material, como en el caso de estas mesitas de noche adquiridas en La Redoute Interieurs en fibras naturales. A la izquierda se encuentra Marrak, de líneas cuadradas y hecha en ratán y bambú y, a la derecha, un modelo redondo también con estructura en bambú. Ambas piezas también comparten una estética ligera.
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Manteniendo la misma silueta
Para conseguir orden formal y armonía, en este proyecto los interioristas de Egue y Seta apuestan por mesitas de noche redondas, sumándose a la tendencia bold que tan de moda está.
Del mismo modo que se decora contrastando claroscuros en la tabiquería, se hace con el mobiliario, así, en el área con la pared en microcemento negro el juego de mesitas con el sobre blanco procede de Zara Home, mientras que, a mano derecha, frente al microcemento realizando un ‘efecto encofrado modular’, la icónica mesa auxiliar es Componibili, de Kartell, aquí seleccionada en color negro.
El toque de genialidad es que las piezas tienen un acabado brillante, lo que da unidad al conjunto.
Cambio de tamaño
Otra alternativa que genera mucha armonía, al pertenecer las dos mesitas a la misma colección, es que compartan estética pero no dimensiones, como vemos en esta propuesta de Mobiprix (el modelo Kap es una cajonera que puedes escoger en seis medidas de ancho diferentes y en opciones de dos o tres cajones).
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Incluso, para una imagen todavía más dinámica del conjunto una puede ser una mesita y, la otra, una cómoda (cajonera de un tamaño considerablemente mayor), todo dependerá del espacio disponible en el dormitorio. Es la opción que han tomado en este proyecto con mobiliario de Lastdeco (by Vical). En concreto se trata de la serie Briec, piezas de estilo industrial que combinan la frialdad del metal con la calidez y naturalidad de la madera. Aparte de mesita y cómoda, la colección cuenta también con armarios, escritorios, mesas de comedor…
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Cuando la necesidad obliga
Alguna circunstancia que podría parecer inconveniente resulta que da los resultados más imaginativos y originales. El interiorista Mikel Irastorza explica los motivos que le llevaron a instalar dos mesitas totalmente diferentes en esta habitación: “una de las características que más define muchos de mis trabajos es el empleo de elementos vintage que, creo, ayuda a que esos proyectos sean más ‘únicos’ ya que, al utilizar piezas que son más difíciles de encontrar dos iguales, ayuda siempre a crear algo más distinto y personal”.
La apuesta es singular y la mezcla resulta toda una genialidad ¿no te parece? Atrévete a irte a un mercadillo de muebles antiguos o a una tienda de antigüedades o almonedas para crear una composición con igual carácter.
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¡La noche y el día!
Pura osadía. Las mesitas de noche que mezcla Leonela Rivas, interiorista al frente de Lé Interior Design, son totalmente dispares en material, altura, forma y color. No obstante, la rica combinación queda armoniosa gracias al recubrimiento de pared que lo envuelve todo. La artífice del proyecto resalta que “la parte inferior del cabecero está hecho con un material acústico flexible y muy versátil, ayudando a enlazar todos los espacios y trazando la circulación”.
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Dinamismo en el colorido
Por último, ¿por qué no apostar por el mismo modelo de mesita de noche, pero en diferente color? En esta propuesta se trata del modelo Artic, de Maisons du Monde, en gris y blanco, ambas con las patas de roble blanqueado. Si tienes dos mesitas iguales, otra opción es que pintes una de ellas para lograr un resultado similar.
Fíjate que, además, la iluminación que flanquea la cama también consigue hacer un mix & match de lo más interesante: con un flexo de sobremesa y otro directamente instalado en la pared.
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¿Cómo decorar dos mesitas de noche distintas?
En esta cuestión no hay una norma fija, dependerá de si te apetece seguir apostando por una composición dispar o, aquí sí, vas a querer que los elementos sean gemelos. Especialmente si las dos piezas de mobiliario son de dimensiones muy distintas (como aquí, con la mesita de noche y la cómoda Hegas, de Kenay Home) te recomendamos aprovechar la que tiene un mayor tamaño para apoyar cuadros, poner jarrones grandes y esculturas o hasta una lámpara más vistosa.
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