Peperomia, una planta de interior muy decorativa y fácil de cuidar

La peperomia (Peperomia spp.) es una planta de interior de lo más decorativa, gracias a sus frondosas ramas y a sus hojas bellas y originales. Además, es muy sencilla de cultivar, ya que se adapta de maravilla a cualquier entorno y no es exigente en sus cuidados. Descubre cómo tratarla y conseguirás que crezca espectacular.

De allende los mares

La peperomia es una planta muy especial. Aunque no es demasiado grande, sí es muy decorativa, gracias a sus hojas, muy originales y variadas. Dependiendo de la especie, pueden ser lisas y de color verde oscuro, o estar matizadas en otros colores, y hacer gala de diseños muy variados.

Se trata de una planta de origen tropical procedente de diferentes latitudes: América del Sur, África y Asia. Aunque las especies son diferentes dependiendo del lugar del que proceden, todas son fáciles de cuidar y poseen un gran valor ornamental.

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Una gran familia

Existen un sinfín de variedades de peperomia (cerca de 1.000 diferentes) que pertenecen a la familia de las Piperaceae, y todas ellas presentan hojas diferentes con matices en distintos tonos de verde, amarillo, blanco, etc.

Dentro de la familia de las peperomias encontramos especies trepadoras, otras de porte rastrero, etc. Elijas la especie que elijas, será fácil de cuidar. Puedes optar por la Peperomia caperata, de hojas arrugadas de color verde oscuro; o por la Peperomia obtusifolia, pequeña y resistente; también destaca la Peperomia scandens, de porte rastrero o trepador; la Peperomia sandersii, por otro lado, posee un bonito porte compacto.

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Búscale un emplazamiento luminoso

Cuando busques a tu peperomia el mejor lugar para colocarla en tu casa, recuerda que necesita mucha luminosidad para crecer feliz. Ponla en una habitación con mucha luz natural, pero sin que le alcancen los rayos del sol de forma directa, ya que podrían quemarse las hojas.

Un consejo: si notas que tu peperomia está perdiendo su porte bello y elegante, que sus tallos parecen estar alargados y débiles, y que el verde de sus hojas está deslucido, colócala en un rincón con más luz natural. ¡Verás cómo se anima!

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Una planta que no tolera el frío

Tener en cuenta las temperaturas es importante a la hora de cultivar una planta de peperonia, ya que esto afecta a su crecimiento. Se trata de una planta que necesita entornos cálidos, con una temperatura ideal de 21º C.

Aunque resiste las temperaturas altas del verano, siempre y cuando esté bien regada, no ocurre lo mismo con el frío, ya que no soporta temperaturas por debajo de 13º C.

Un consejo: mantenla alejada de las corrientes de aire, ya que la perjudican considerablemente.

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Trasplántala cada año

La peperomia necesita tierra rica en nutrientes para crecer y desarrollarse. Puedes utilizar un sustrato para plantas verdes enriquecido con materia orgánica.

Las raíces de la planta han de tener espacio suficiente para crecer, por lo que es necesario trasplantarla una vez al año, mejor en primavera. Elige cada año una maceta un poco mayor que la anterior hasta que la planta sea adulta y la hayas puesto en un tiesto de unos 20 cm de diámetro. A partir de este momento ya no tendrás que trasplantarla más; únicamente cambiar la capa superficial del sustrato para renovarlo.

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¿Cómo hay que regar la peperomia?

Si al principio decíamos que esta planta no presentaba grandes exigencias en cuanto a los cuidados que debías darle, el riego es una excepción. Debes procurar proporcionarle el agua que necesita, porque de lo contrario tu peperomia sufrirá.

No te pases con el aporte de agua, ya que no tolera que se la riegue en exceso. En invierno bastará con un riego semanal, mientras que en verano serán dos o tres a la semana. Lo importante es comprobar que la parte más profunda del sustrato se ha secado antes de volver a regar.

Por otro lado es importante conseguir que la humedad ambiental sea alta: pulveriza las hojas de la peperomia y coloca debajo de la planta un plato con agua y piedras.

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Energía para tu planta

La peperomia necesita que la abones de vez en cuando para contar con la energía suficiente para crecer y desarrollarse. Utiliza un fertilizante para plantas verdes diluido en el agua de riego, desde la primavera hasta el otoño y cada tres semanas más o menos. Una vez haya llegado el otoño deberás suspender el abonado.

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¿Hay que podar la peperomia?

Aunque la poda no es uno de los cuidados que demande esta planta, en ciertas ocasiones es más que recomendable. Por ejemplo, es importante eliminar las hojas secas o que estén deterioradas. Si por falta de luz los tallos de la peperomia se debilitan, debes podarla recortando las puntas de las ramas unos centímetros para conseguir que esos tallos adquieran más fuerza.

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El ataque de las plagas

La peperomia es una planta muy atractiva para los insectos que seguro que la atacarán, en especial si hemos descuidado alguno de los cuidados que tenemos que proporcionarle. Cuanto más fuerte y sana esté tu planta, menos riesgo tendrá de ser atacada por las plagas.

Los insectos más frecuentes son la cochinilla algodonosa, los ácaros y la araña roja. Permanece atento y en cuanto veas la primera señal de que han aparecido combátelos con un insecticida ecológico.

Es importante mantener un buen nivel de humedad ambiental, ya cuando este es bajo es más fácil que aparezcan las plagas.

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