Cómo hacer que tu casa tenga espíritu de ‘loft’, aunque vivas en un segundo

Al hablar de una vivienda tipo ‘loft’ se piensa directamente en Nueva York y en casas de estilo industrial, grandes y situadas en un local o en un ático, pero no siempre es así y lograr ese espíritu abierto e inclusivo es posible, aunque vivas en un segundo y tengas 80 metros cuadrados. Estas ideas de decoración impregnarán a tus espacios ese aire que tanto te gusta, para que saques tu lado más moderno, sin sufrir algunos de sus inconvenientes.

1. Distribuye adecuadamente

Las casas abiertas son sociales y puede que tú también, pero eso no significa que no haya momentos en los que necesites paz y estar solo para trabajar mejor o relajarte ajeno a la vida diaria de tu hogar. No se trata tanto de tirar tabiques y quedarse con una vivienda diáfana, sino de jugar con la distribución a tu favor, especialmente ahora que teletrabajar es algo habitual y hacerlo en una habitación independiente es más aconsejable. Sin olvidar que, a la hora de vender tu casa, el número de habitaciones también marca el precio. Por eso, no lleves el open space al límite y juega con espacios comunicados, que pueden tener puerta entre ellos, pero que con una corredera o un tabique de cristal son también independientes cuando lo necesitas. Usa el cambio de pavimento para delimitar visualmente. 

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2. Mantén el recibidor

No solo porque a veces no puedes integrarlo al salón de manera fácil, sino porque el confinamiento ha demostrado que la entrada a la casa es parte esencial de la misma. Da la bienvenida al visitante, te permite dejar los zapatos y todo lo que traes de la calle (virus incluidos) y te ayuda a mantener el orden. Por eso, di sí al open concept, pero manteniendo lo bueno de la distribución convencional.

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3. Refuerza su estética industrial

Si hay una decoración de interiores ligada a estas viviendas esa es la estética industrial. Por eso, si no vives en una vieja fábrica a las afueras de la ciudad, nada mejor que apostar por una pared de ladrillo, aunque sea falsa (hay papeles pintados que dan el pego), acabar con los falsos techos donde no se necesiten y elevar la altura de la estancia y dejar a la vista alguna tubería u otra instalación, aunque solo sean de adorno. Tampoco nos podemos olvidar del mobiliario, con piezas prácticas y simples que parezcan haber tenido otra vida. 

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4. Saca partido a su versatilidad

Vivir en un loft es hacerlo en un lugar libre y abierto, capaz de adaptarse tanto a una pareja sin hijos como a una familia numerosa o una persona mayor con inquietudes y muchos (nuevos) hobbies o problemas de movilidad. Su versatilidad es una de sus muchas ventajas frente a una casa convencional, así que sácala partido y crea cada zona según tus necesidades de uso. Los muebles con más de una función te ayudarán a conseguirlo, al igual que dejar a la vista pilares o vigas que estaban escondidos y que ahora acaparan la atención.

5. Da protagonismo a las paredes

Una de las mejores maneras de lograr que tu casa tenga aire de loft es ceder parte del protagonismo a las paredes. Para ello, puedes combinar diferentes revestimientos según el espacio o los ambientes que quieras crear. El ladrillo visto es la estrella en este tipo de viviendas, pero no el único. Los listones de madera envejecida o el cemento son otras dos buenas alternativas. En función de si quieres o no meterte en obras, ten en cuenta que hay revestimientos que imitan este ‘look’ y se instalan fácilmente sobre la pared.

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6. Cede el estrellato a la cocina

Nada tan sencillo para crear ese espacio de loft que abrir la cocina al salón y convertirla en el corazón de la vivienda. Una idea intermedia que funciona, incluso si el resto de la casa mantiene su independencia y sus habitaciones cerradas a cal y canto. “Si tienes un muro o tabique de contención que no puedes derribar, aprovéchalo y pon la cocina alrededor de él, podrás tener un lugar cómodo y funcional y un espacio para comer con taburetes altos que podrás aprovechar también para invitar a amigos”, aconsejan desde BC3 Cocinas.

7. Haz que todas las estancias sean de ‘primera’

En una casa tipo loft, los acabados son importantes y todas las estancias, incluida la cocina, deben mantener el nivel decorativo alto. Apuesta por un mobiliario versátil que unifique los diferentes ambientes y eleve el listón 'deco'. “En este piso, los paneles 3D de Orac Decor en la pared de la cocina la diferencian del resto del espacio. Además, el muro suspendido revestido igual, con televisión en un lado y chimenea, delimita dos ambientes en un mismo espacio. Sin olvidar otra de sus ventajas: la insonorización, ya que aíslan del ruido tanto en paredes como en techos y no requieren obras para su instalación”, explica Víctor Valentín, director de Orac Decor España.

8. Potencia la sensación de amplitud

La sensación de amplitud es una de las señas de identidad de un loft que puedes copiar para tu casa. No nos vamos a engañar, este tipo de viviendas se caracteriza por estar abiertas y no tener pasillos, lo que ayuda a hacer crecer los metros física y visualmente. Por eso, una de dos, o tiras tabiques u optas por soluciones como eliminar la puerta que separa el recibidor del comedor, colocas un modelo corredero entre la cocina y el salón, apuestas por la típica cocina americana o te alías con los tabiques de cristal que amplían los metros y otorgan profundidad.

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9. Da alas a la luz natural

La ausencia de paredes y los ventanales logran que la luz natural forme parte de ellos, sin casi esforzarte. Algo que, a lo mejor, no es tan fácil de conseguir en tu vivienda, pero que también puedes lograr abriendo ventanas XL (asegúrate de que se puede hacer) o instalando tabiques de cristal de aire industrial, grandes y con cuarterones negros. Para que la luz no encuentre ningún impedimento, no pongas muebles altos que impidan que pase el sol, coloca estratégicamente algún espejo y alíate con los colores claros.

10. La iluminación también ayuda

Una buena iluminación no solo contribuye a crear atmósferas y a hacer más fáciles ciertas tareas, sino que, en este tipo de ambientes, permite delimitar visualmente diferentes zonas que comparten un mismo espacio. Opta por lámparas en metal, como focos o apliques, o por modelos de bombilla a la vista, que refuerzan el espíritu industrial que poseen las viviendas de este tipo.