¿Puede la decoración de interiores hacerte algo más feliz? La respuesta es sí. Puede hacer que te sientas mejor. Seguro que si lo piensas saber que hay espacios en los que te invade una sensación de calma, de paz, de comodidad mientras que otros hacen que no te sientas cómodo. Es algo que va más allá de estilos decorativos. Son esas sensaciones que apelan a la felicidad. Hay una serie de ideas o claves sencillas de aplicar que pueden lograr que tu casa te haga feliz. ¿Por qué no probarlas?
Espacios abiertos, comunicados y polivalentes
Desde PortobelloStreet.es y su estudio de decoración de interiores apuestan por crear casas cómodas, acogedoras y confortables que las conviertan en espacios únicos, personales y cálidos que nos hagan felices. Alberto Torres, interiorista y director creativo de PortobelloStreet.es, señala la idea de vivir en espacios abiertos, que "no solo es tendencia en decoración de interiores, sino que abrir la cocina al salón o al comedor facilita la movilidad por el espacio, lo amplía visualmente y ayuda a ganar luminosidad. Pero lo mejor es que fomenta la conversación y la participación en familia". Quizá esta clave puede parecer difícil de poner en práctica si cuentas con una casa compartimentada, pero enlaza con la idea de crear ambientes polivalentes y despejados. Si bien, prescindir de tabiques es un lujo, se puede jugar en un espacio con zonas o con muebles con doble funcionalidad que permitan compartir tareas. Despeja el espacio que tengas, hazlo más ligero. Te permitirá fluir.
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La iluminación de tu casa
Es un aspecto que destacan todos los interioristas. Una buena iluminación nos hace sentir a gusto. Así que la luz hará que tu casa te haga un poquito más feliz. Alberto Torres, de PortobelloStreet.es, comenta que "una casa mal iluminada se convertirá en un espacio frío. Por eso, es fundamental cuidar la iluminación del hogar para que el ambiente sea acogedor" y como consejo para lograrlo, añade que "las lámparas de techo y de suelo proporcionan iluminación general, pero no te olvides de las lámparas de sobremesa que, bien distribuidas, te ayudarán a crear ambientes muy acogedores". El modelo de la imagen es de Vibia.
No te olvides de aprovechar al máximo la luz natural
Porque su color y su sensación hace un espacio confortable y nos hace sentir bien. Una habitación sin ventana siempre atosiga más. La luz natural es sinónimo de vida, de apertura al exterior y ese contacto nos afecta a nuestro bienestar. No reduzcas la luz ni la entorpezcas con pesados cortinajes. Busca la sencillez. Los textiles de la imagen pertenecen a la colección Gaula de Pepe Peñalver.
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El sofá, una inversión en felicidad
Porque el sofá ha de ser cómodo, dejar que nos hundamos en él y nos refugiemos para disfrutar de esos momentos de calma en casa, de lectura sin prisas o de una sesión de juegos o de cine. Es un mueble que te puede dar felicidad porque se asocia a los momentos tranquilos. Así que invierte en uno que realmente te guste y te resulte cómodo.
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Busca el orden y la ausencia de ruido visual
Esta es otra de las claves que te harán sentir más feliz en casa. El orden es equilibrio. Debes recurrir a soluciones adaptadas al espacio y sus dimensiones para guardar. Que cada cosa tenga su lugar hará que te sientas mejor, tendrás todo recogido y sabrás dónde buscar para encontrar. Y además, esta idea está relacionada con la ausencia de ruido visual, es decir, evitar que lo que ves, lo que percibas, te altere. Ver demasiadas cosas en medio (en este caso, aunque estén colocadas). Apuesta por armarios con puertas para que todo quede dentro y así el ambiente esté despejado. En la imagen, un armario de puertas correderas con interior configurable a través de un panel perforado, idea de Phoebe Says Wow Architect.
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Un rincón para cada actividad
Con relación a la idea de orden en casa, es importante que tu casa cuente con esos rincones para ti. Esos espacios en los que tú realizas lo que te gusta o necesitas. Puede tratarse de un espacio de trabajo o de una zona de lectura o de meditación en casa. Ese pequeño espacio dedicado a lo que necesitas o a lo que te guste hace que te sientas bien sabiendo que allí te puedes refugiar.
Apuesta por lo natural
Tanto en lo que a tonalidades se refiere como a materiales. De esta manera creas una base perfecta para sentirte bien. Tonos suaves, arenas, neutros, materiales como la madera, las fibras vegetales, el lino, el algodón… Esa mezcla es idónea para el bienestar. Se pueden lograr ambientes especiales con esta base, aunque luego añadas pinceladas más específicas con las que lograr un estilo decorativo concreto o con las que levantar el conjunto (a través del color). Pero ten en cuenta que con una base así, acertarás. Si se trata de lograr espacios equilibrados en los que estar bien, es el camino. El equilibrio es lograr incorporar aquello que te haga feliz sin estropear la magia de los neutros y materiales naturales.
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Cuida paredes y suelos para sentirte bien
Hemos halado de la importancia de crear una base sosegada que te haga sentir bien en casa, pero también de la personalización y de los elementos que a cada uno le llegan especialmente, el color y el papel pintado puede ayudarte mucho. Debes percibir las paredes de manera especial. Puedes incorporar elementos únicos en alguna de las paredes de la estancia, no tiene que ser en todas. El papel pintado decora sin saturar de objetos. Los cuadros también son una forma de expresión y reflejo de tu personalidad. En definitiva, se trata no solo de sentir que los muebles te gustan sino de que el continente de esa decoración es adecuado. Para ello no debes descuidar la base, las paredes y el suelo. La manera sencilla de hacerlo es con pintura en el caso de las paredes y con alfombras en el suelo, en caso de que su revestimiento no te guste especialmente.
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Incorpora piezas de significado especial
Ya sean recuerdos o piezas de diseño que te gustan por bonitas. No se trata de rellenar ni de saturar, pero sí de incorporar a la decoración, como elementos de menor tamaño, aquellos objetos que te gustan especialmente. Y solo los que te aportan algo.
Plantas en interiores
¿Sabes que las plantas mejoran la atmósfera? Ayudan a regular la temperatura y la humedad. Esto influye en cómo nos sentimos en un espacio. Así que decora con ellas y potenciarás ese efecto de conexión con lo natural, con el exterior y el aire libre, con la luz exterior. Hay especies que requieres cuidados sencillos y que son perfectas si sientes que la jardinería te cuesta. No subestimes el poder de la vegetación, te hará sentir felicidad, al tiempo que notas el poder terapéutico de su cuidado.
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Decora con algún mueble especial
Único o personalizado, un mueble a medida o customizado. Esas piezas son las que dan valor a la casa aunque le resto de mobiliario sea más o menos estándar. Sentirte en un espacio que es a tu medida, personalizado, también hace que tu casa te haga sentir más feliz. No sientes que vives en un ambiente igual al del vecino. Sino tú, que refleja tu personalidad y carácter. No lo dudes, incorpora eso que hace diferente tu decoración, ya sea un mueble o un complemento. En este salón, Pia Capdevila Interiorismo recurre a muebles a medida del espacio.
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El aroma que percibes
En este sentido, como clave sencilla para que tu casa te haga más feliz, Alberto Torres, de PortobelloStreet.es, indica que "los recuerdos siempre se asocian a un aroma, por eso
es importante perfumar siempre las casas. Ventila bien y elige una fragancia que te defina y que no te resulte agobiante". Para Astrid Izquierdo, experta en Feng Shui en Sincronía Integral y autora de El Pequeño libro del Feng Shui, "el Feng Shui y la aromaterapia son grandes aliados. El uso de la aromaterapia para mejorar el bienestar, tanto físico como emocional, del ser humano se ha venido utilizando en todas las culturas desde la antigüedad. La combinación de un buen Feng Shui con la aromaterapia es ideal, porque las fragancias (al igual que los colores, las formas, los materiales y el simbolismo) influyen, también, en la energía de un espacio. Las fragancias son grandes “dinamizadoras” y es un elemento más a tener en cuenta".
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