La chimenea encendida, el crepitar del fuego, una manta gustosa y una taza de chocolate caliente. Es la imagen que nos viene a la cabeza cuando hablamos de estilo rústico. Pero también mucha madera, alfombras de pelo largo y calidez, muchísima calidez. Por eso es el mejor estilo para vestir tu casa durante los meses más fríos. Y no, no te decimos que conviertas tu piso urbano en una pseudo cabaña, sino que añadas ciertos detalles que harán que tu casa presuma calidez en cualquier época del año. Te damos varios tips para llevar el estilo rústico a tu casa.
La madera, uno de los materiales protagonistas
La madera es el material estrella en la decoración rústica. Y no lo vemos solo en mesas, complementos y accesorios. En los ambientes rústicos, la madera se sube por la paredes y el techo aportando calidez y creando atmósferas extra acogedoras. Lo mejor de este recurso es que, además de aportar calidez visual, la madera también actúa como aislante térmico y acústico. Y si quieres llevarlo a tu casa, es fácil. Un revestimiento o friso de madera es sencillo de instalar y puedes, dándole más presencia. Incluso hay papeles pintados y vinílicos que imitan la madera y que subirán también la temperatura.
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Otros materiales que invitan a lo rústico
Sumándose a la madera, la piedra es otro de esos materiales que son un básico en este estilo de montaña. Y, aunque tal vez llevarlo a tu piso urbano no es factible, siempre puedes hacerlo con papeles pintados que imiten su textura. Las fibras naturales, tan en tendencia, tienen su cabida también en lo rústico gracias a su carácter artesano.
Incluso el microcemento ha encontrado su sitio en este estilo decorativo. Aunque es un material moderno y, además, muy empleado en estancias de corte contemporáneo, los nuevos acabados, con tonalidades más cálidas, encajan genial y aportan un punto más actual.
Estampados con carácter
La calidez de los espacios rústicos es innegable. Y gran parte de ese éxito se debe a los estampados que emplean, que recuerdan al invierno y al ambiente de montaña. Los de cuadros, ya sean tartan, vichy, pata de gallo o tweed, son el complemento perfecto para dar ese plus rústico a tu salón o tu dormitorio. Puedes aplicarlos en pequeñas dosis mediante los textiles de los cojines, una manta en el sofá o la colcha de la cama.
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Los textiles mandan en el estilo rústico
Lana, algodón, chenilla, piel… Incluso el tejido bouclé o borreguito, muy en tendencia, encuentra su espacio en el estilo rústico. Son básicos para sumar calidez a cualquier estancia y conseguir ese punto rústico que estás buscando en tu casa. Y no te olvides de las alfombras. Aunque para un total look, mejor que sean de lana o pelo largo, así la pisada también estará protegida.
Un estilo decorativo que también 'pide color'
Una de las mejores características del estilo rústico es su aspecto desenfadado. Por eso, huye de una decoración sobria y de tonos neutros e incluye algo de color. Algunos cálidos como los caldero, ocres, arenas y marrones subirán la temperatura, más aún combinados con verdes o azules muy oscuros. Evita también tonalidades muy estridentes, que chocarían con el espíritu relajado y cálido del estilo rústico.
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Piezas recuperadas y artesanía
Otra de las maneras de llevar el estilo rústico a tu casa, y con él su calidez, es incluyendo piezas recuperadas en la decoración de tu casa. Puedes hacer una visita a casa de tu madre o abuela o, incluso mejor, dar un paseo por algún mercadillo. A veces se encuentran auténticas gangas que podrás recuperar tú si eres un poco mañoso. Y, por supuesto, también la artesanía cobra importancia en el estilo rústico, caracterizado por su aspecto natural. Así, añade piezas de barro, cerámica, mimbre o madera hechas a mano.
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Cómo hacer que el estilo rústico sea más luminoso
Cierto que la madera, la piedra, los suelos de barro y los textiles del estilo rústico pueden provocar que el ambiente se torne oscuro. Pero puedes evitarlo si eliges las grandes piezas de tonos luminosos y neutros: son la mejor base para decorar en cualquier estilo y acertar. Otra opción es pintar la madera o las paredes de blanco, el espacio seguirá siendo cálido, sin embargo, ganará en luminosidad.
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El estilo rústico también puede ser moderno
Y es que las líneas sencillas y puristas del estilo contemporáneo hacen una pareja estupenda con el aspecto al natural de los materiales que se emplean en el estilo rústico. Como el yin y el yang, de manera que juntos encuentran el equilibrio perfecto para dotar a los espacios de calidez y un punto desenfadado lo rústico sin perder de vista la modernidad de las tendencias en decoración más actuales.
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