Las camas con dosel tienen una larga historia y surgieron en el Renacimiento con finalidades higiénicas. Ahora, aparte de su funcionalidad, especialmente si van enteladas, sobre todo nos fijamos en su estética. Y es que las camas con dosel son majestuosas y adecuadas para decorar dormitorios de todos los estilos. Las más modernas se quedan en el esqueleto, luciendo una estructura sencilla, y las de líneas coloniales o clásicas muestran postes de madera trabajada o hierro y muy ricas ornamentaciones. Descubre los secretos de este mueble con el que conseguirás unos sueños para enmarcar.
Asseman, ochentera y… ¡tan actual!
En la propuesta el modelo Asseman, de la firma italiana De Padova, un diseño de los 80’ de Patrizia Cagliani que todavía se produce. Esta cama con dosel es ligera y minimalista con un alma sentimental. Su silueta la conforma una estructura tubular blanca (también disponible en negro) y el toldo es a base de una lona de tul.
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Un poco de historia
¿Sabes que se las conoce como ‘la cama de los reyes’? Sus orígenes se remontan a inicios del siglo XV en Austria y desde allí se expandió por Europa, para presidir los dormitorios de la gente de la nobleza, pues las camas con dosel tenían una funcionalidad muy práctica: mantener el calor en la zona de la cama, resguardarse del frío mientras y, al mismo tiempo, protegerse de insectos y parásitos. En la actualidad los modelos con cortinajes gustan porque aportan privacidad y una agradable sensación de recogimiento.
En la imagen, un dosel clásico con rico cortinaje e incluso cabecero. Por su parte, la alfombra de pájaros es un diseño de Alexander McQueen para The Rug Company, el modelo Hummingbird Ivory, y se vende en BSB Alfombras.
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¿En qué dormitorios son adecuadas?
Las camas con dosel lucirán esplendorosas en habitaciones de techos altos, para que no se perciban encajonadas y desproporcionadas respecto al tamaño del espacio. Lo ideal es dejar como mínimo 50 cm libres entre la parte superior de las columnas y el techo, para no abigarrar la decoración y que esta resulte de lo más acogedora.
En el dormitorio de la imagen, la cama doble con dosel es un diseño de Zanotta ideado por Emaf Progetti, el modelo Milleunanotte. Presenta la estructura de madera contrachapada de roble teñido en gris y un cabecero acolchado. El espacio es de decoración minimalista, pero se siente cálido gracias al techo forrado en madera.
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Con o sin cabecero
Aparte de ser las grandes protagonistas del dormitorio, las camas con dosel ofrecen la ventaja de que no se tienen que adosar obligatoriamente a la pared. Aunque, si se sitúan separadas el diseño deberá incorporar necesariamente cabecero, como ocurre en este dormitorio con muebles de la firma Punt. La cama con estructura en madera maciza de roble super mate es Breda, ideada por Borja García.
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Materiales para la estructura
Ten en cuenta que, si te gustan las camas con dosel sin ‘vestir’ con caídas, será crucial que el mueble se construya en un material vistoso y especial. En este sentido tienes sobre todo dos opciones, la madera o bien el metal, en forma de hierro forjado, cromado, latón dorado, cobre… Menos habituales son las creaciones fabricadas con cañas de bambú.
En este dormitorio abierto al baño decorado por Toni Espuch, de Azultierra, el interiorista selecciona una espectacular cama con dosel dorada con efecto envejecido que ofrece un toque de glamur y estilo.
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De hoy y de siempre
Los diseños en madera pueden ser muy minimalistas o elaborados con la madera tallada, para ambientes de estilo colonial, clásico o rústico realmente de ensueño.
En este espacio la cama con dosel es el modelo Susice, de Vicalhome, una auténtica joya de estilo étnico llena de detalles. Está fabricada en madera de mango y el cabecero es de rejilla, una tendencia de decoración clásica que regresa con fuerza.
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Arropada con telas
Incluso en las decoraciones más modernas, las camas con dosel con diseños lineales sobrios no siempre van con la estructura desnuda, el concepto inicial de que se vista con telas sigue de rabiosa actualidad. ¿Qué zonas? Pues va a gustos. Lo más habitual es cubrir con telas los laterales, es decir, cortinas, pero también, en ocasiones, se hace en la zona superior, tipo toldo, configurando una cubierta tensada o con cierta caída. Este tipo de techos son muy indicados en las camas con dosel para exterior (las llamadas daybeds), porque de este modo proporcionan protección solar.
La ropa de cama de este dormitorio es un reciente lanzamiento de Westwing, empresa que se ha unido con diseñadora textil británica Candice Gray para crear una colección exclusiva de cojines y nórdicos.
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Tipo de textiles
Sin duda, si apuestas por una cama con dosel que incorpore telas darás un aire más romántico a la composición. Para decantarte por uno u otro textil, ten en cuenta que los ligeros visillos dejarán pasar bien la luz y ofrecen una imagen vaporosa y delicada, mientras que los textiles más tupidos resultarán perfectos para arropar el ambiente. En cualquier caso, sobre todo selecciona telas lavables.
Respecto al diseño, los lisos quedarán mucho más discretos decorativamente hablando, mientras que los estampados (como en esta propuesta floral de Ikea) acapararán todas las miradas. Por cierto, en las casas nobles del Renacimiento las telas iban exquisitamente bordadas con el escudo familiar.
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Alternativas igual de encantadoras
¿Qué define en principio a las camas con dosel? Que se caracterizan por tener cuatro postes que se alzan sobre las esquinas de la cama, unidos entre sí mediante barras laterales. Indistinto es que esta estructura lleve o no cabecero, dependerá de los gustos. En ocasiones la cama presenta únicamente los postes que se alzan en los cuatro ángulos de la cama, sin unirse entre sí, formando un dosel incompleto original. O, como vemos en este dormitorio firmado por el diseñador de interiores Raúl Martins, se apuesta por una estructura alta entelada con faldón, de la que nacen exquisitas telas (en concreto son de Gastón y Daniela). Un elegante minidosel, ¿no te parece?
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Versión infantil de utratendencia
En los dormitorios de los más pequeños de la casa una tendencia al alza son las bonitas camas tipo cabaña, que derrochan alegría e imaginación y suelen adornarse con guirnaldas para ganar en fantasía. Pensadas para favorecer su autonomía y libertad de movimientos de manera segura, el colchón se sitúa a baja altura. Lo que posibilita que no se precisen techos tan altos como en el caso de los modelos para adultos.
Esta es una propuesta de la firma Sklum para una cama de 90 cm de ancho. Se trata de Obbit Kids, fabricada en madera de pino, robusta y resistente. Otras formas habituales aparte de las camas con dosel que recuerdan a casitas son las que imitan a las tiendas de campaña.
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