© Annie SloanAunque el día a día nos empuja a una vida ajetreada y dominada por las prisas en la que tomar un baño es una costumbre en desuso, relegada al olvido a favor de las duchas revitalizantes, tener una bañera exenta en casa es la excusa perfecta para disfrutar de vez en cuando de un reconfortante baño de espuma. Descubre qué tipo de bañera es la que mejor le va a tu baño.
No solo para bañarse
Una bañera clásica, con sus patas y su porte señorial, o un modelo contemporáneo, con su diseño avanzado y vanguardista. Sea como sea con la que sueñas, disponer de una bañera exenta en el baño es una gran idea que te deparará momentos de auténtico lujo.
Aunque no se trate de una costumbre habitual que repitamos a diario, tomar un baño puede convertirse en una actividad relajante y especial. Sin embargo, las bañeras exentas cumplen otra misión, además de la de servir para bañarse: la de decorar el espacio y aportar carácter, elegancia y distinción.
No te resistas a colocar una bella bañera como este modelo clásico que se ha pintado en un precioso color verde agua a juego con la pared decorada con un degradado de color con pintura chalk paint de Annie Sloan. El resultado no puede ser más decorativo.
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© Garden TradingVentajas e inconvenientes de las bañeras exentas
Uno de los mayores alicientes de disponer de una bañera exenta es su gran poder decorativo que la convertirá en el centro del espacio. Sin embargo, no es la única ventaja. Toma nota de todo lo que una de estas bañeras puede hacer por ti y por tu cuarto de baño, y de los inconvenientes, que también tiene alguno.
- Contar con una de estas maravillosas bañeras te deparará baños relajantes y momentos de máxima felicidad.
- La instalación es más sencilla que la de una bañera encastrada.
- Como puntos en contra podemos citar que las bañeras exentas son más caras y que requieren más espacio en el cuarto de baño.
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© ViaduriniEl tamaño es la clave
Pero, ¿qué se necesita para poder disfrutar de una bañera exenta en el cuarto de baño? Lo primero de todo, metros cuadrados. No tiene sentido querer instalar una bañera de este tipo si nuestro baño es muy pequeño. Apenas nos dejará espacio para movernos y se convertirá en un estorbo.
En caso de no tener suficiente espacio, lo mejor es renunciar a la idea y apostar por una buena ducha. Pero si tu baño es mediano, aunque no sea tan espacioso como un salón de baile, sí podrás cumplir tu sueño de tener una bañera exenta.
Existen modelos de pequeño tamaño que son perfectos para baños de dimensiones medianas. Las bañeras rectangulares estándar suelen tener entre 70 y 80 cm de ancho, y entre 150 y 180 cm de largo.
También puedes elegir una bañera redonda como esta de Viadurini, que quedará muy bien instalada en una esquina del baño y no te robará mucho sitio.
© Feathr¿Qué forma te gusta?
En lo que a la forma y al diseño se refiere hay un repertorio interminable de opciones entre las que elegir, comenzando por las rectangulares, más acordes a estilos modernos y actuales. Sus líneas rectas y puras son perfectas para ambientes de aire minimalista. Elígelas si tu cuarto de baño no es demasiado grande, para colocar junto a una pared.
Los modelos ovalados o redondos, como las clásicas bañeras de época de patas o con pedestal, son una buena idea en baños amplios, ya que puedes instalarlas en el centro del espacio para convertirlas en las protagonistas absolutas.
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© English BlindsLas clásicas bañeras de patas
Tienen un aire señorial y elegante que decora por sí mismo, y resultan perfectas en cuartos de baño de estilo clásico o retro. Las antiguas, por lo general de la primera mitad del siglo XX, estaban fabricadas en hierro fundido a partir de un molde específico según el tamaño y la forma de la bañera, y después recubiertas con porcelana esmaltada.
Todavía hoy puedes conseguir modelos clásicos auténticos en empresas como Cántabra de Franquicias, especialistas en restaurar bañeras antiguas. La de la imagen es un modelo nuevo de inspiración clásica, de la firma Viadurini.
Un consejo: si vas a instalar una bañera de hierro fundido, ten en cuenta que puede tener un peso considerable.
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© Norsu InteriorsLos materiales de hoy
En la actualidad se utilizan diferentes materiales para fabricar bañeras. Las más habituales, tanto de encastrar como las exentas, son de acero esmaltado, un material muy resistente. Por sus ventajas duran muchos años en perfecto estado.
También destacan las bañeras acrílicas, muy habituales por ser bastante económicas. No son demasiado resistentes, por lo que se suelen reforzar con otros materiales como fibra de poliéster.
Existen bañeras de resina y carga mineral, muy moldeables, con las que se pueden conseguir gran variedad de diseños y formas.
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© Boca do LoboPuro diseño
Además de las antiguas bañeras de patas y de los modelos más contemporáneos, existen otro tipo de bañeras que hacen gala de una gran elegancia y glamour.
Son auténticas maravillas del diseño más exclusivo, como la bañera Diamond de Boca do Lobo. La estructura está fabricada con fibra de vidrio y la bañera con hierro fundido, con un acabado lacado en negro alto brillo.
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© The Curious DepartmentLa grifería: cómo elegir la adecuada
Existen diversas maneras de incorporar la grifería a la bañera, en función del modelo que elijas. Puedes instalar la grifería en la pared si la bañera se encuentra junto a una de ellas, o colocar los grifos en la propia bañera, ya sea en la cabecera o en uno de los laterales. Por último, los grifos se pueden instalar sobre tuberías metálicas que suben directamente del suelo.
Elijas el sistema que elijas, opta por griferías contemporáneas para bañeras modernas y grifos de aire retro para las clásicas bañeras de patas.
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© ViaduriniTu bañera, como el primer día
Según la manera en que cuides tu bañera te durará más o menos años. Para empezar, la limpieza es fundamental. Tendrás que emplear productos y utensilios que no sean agresivos para evitar arañar la superficie, ni por el interior ni por el exterior.
Limpia tu bañera con frecuencia para evitar que se acumulen los restos de jabón y la cal del agua. De lo contrario, serán mucho más difíciles de eliminar. Si vives en una zona de agua muy dura, con mucha cal, sécala bien después de limpiarla.
En caso de que se produzca algún desperfecto en la bañera, puede ser que tenga solución. Las de hierro fundido como las de patas se pueden restaurar. También es posible reparar las bañeras de resina y carga mineral.
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