Trucos que funcionan para decorar un pasillo largo y estrecho

Decorar un pasillo largo y estrecho y convertirlo en un espacio agradable y cálido no es tarea fácil. Son rincones oscuros, a veces angostos, que no invitan a estar y que tampoco cuentan con los metros cuadrados necesarios para resultar funcionales y prácticos.

Sin embargo, siempre existen alternativas que mejoren la apariencia de un pasillo, y muchas veces son más sencillas de poner en práctica de lo que podría parecer.

Efecto óptico

Hay pasillos que son muy largos. Se extienden ante ti como un interminable corredor que conecta (o más bien separa) dos zonas de la casa. Atravesarlos no es agradable porque no tienen ningún interés, ni nos ofrecen estímulos a nivel decorativo.

Pero eso puede cambiar drásticamente si te pones manos a la obra y desarrollas algunas de las ideas que vamos a explicar. Podrás transformar tu pasillo para que deje de ser un lugar hostil y sea un espacio dinámico e interesante, perfectamente integrado en el interiorismo de tu casa.

Para empezar, si es muy largo, tendrás que acortarlo visualmente. ¿Cómo? Rompiendo la perspectiva con elementos verticales: puede ser un mueble, un cuadro, etc. Es importante evitar todo aquello que remarque la horizontalidad, como estantes volados, especialmente si son largos.

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Aprovecha el color

No nos cansamos de decir que la pintura, y con ella el color, es uno de los recursos más poderosos con los que contamos a la hora de transformar un espacio concreto para darle un sentido totalmente distinto al que tiene.

De hecho, es un elemento fantástico para actualizar el pasillo. Elegir los colores adecuados es la clave que te ayudará a conseguirlo.

Si tu pasillo es muy largo, un truco que funciona consiste en pintar la pared del fondo con un color oscuro que hará que parezca más corto. Y si el techo es demasiado alto, puedes pintarlo de un color intenso para “bajarlo” visualmente y conseguir darle más amplitud visual a lo ancho.

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Las cualidades del papel pintado

Es una solución decorativa genial para toda la casa y, por supuesto, también para el pasillo. Si eliges el diseño adecuado no tendrás que hacer nada más para conseguir un rincón acogedor e interesante.

Una buena idea es combinar dos papeles pintados diferentes, eligiendo siempre estampados pequeños que no resulten demasiado agobiantes. Ten en cuenta que el pasillo no deja de ser un espacio reducido en el que todo parece más potente. Opta, por ejemplo, por unas rayas verticales no demasiado anchas y por otro estampado de pequeño formato que las complemente, como n el pasillo de la imagen.

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Con un friso a media altura

Dividir la pared a la mitad revistiendo la parte superior de un material diferente a de la parte inferior es una buenísima idea para acortar un pasillo demasiado alto. Puedes poner papel pintado en la parte inferior y pintar la parte superior, separando ambas zonas con una moldura, tal y como se aprecia en la imagen. O puedes poner un friso de madera debajo y papel pintado en la parte de arriba. Incluso puedes revestir una parte de la pared con corcho. Combina los materiales a tu gusto. ¡Hay muchas posibilidades!

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Un “vestidor” en el pasillo

Si el pasillo en cuestión separa la zona del dormitorio del cuarto de baño, por ejemplo, puede convertirse en un buen emplazamiento para instalar tu vestidor o, al menos, parte de tu armario.

Para eso no te servirá cualquier pasillo, ya que ha de tener una anchura mínima para poder instalar armarios en ambos laterales (o al menos en uno de ellos). En una de las paredes se puede poner un mueble zapatero, como el de la foto.

Puede que no te den los metros cuadrados para un vestidor, pero sí para desarrollar alguna idea de almacenaje que resulte práctica y aporte utilidad a este espacio.

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El poder de las alfombras

Colocar una alfombra pasillera es otra de las alternativas que funcionan a la hora de actualizar este tipo de zonas de paso.

Tienes muchos materiales para elegir, desde las de lana hasta las de fibras vegetales. Todas ellas aportan calidez y le darán a tu pasillo ese toque decorativo que necesita.

Si tu pasillo es sencillo, no cuenta con otros elementos que destaquen, y está pintado en blanco o en tonos claros, puedes elegir una alfombra llamativa con colores intensos.

En lo que a la medida se refiere, no elijas alfombras demasiado anchas. Debe quedar un espacio de unos 15 o 20 cm a cada lado entre la alfombra y la pared.

Si el pasillo es muy largo conseguirás acortarlo con dos alfombras similares colocadas con cierta separación entre ellas.

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La iluminación es clave

Crear para el pasillo una buena iluminación no es solo una cuestión práctica, sino también decorativa. Existen numerosas soluciones originales para dotar de luz estos espacios y conseguir, además, efectos muy especiales.

Puedes, por ejemplo, instalar tiras led ocultas en un mueble, colocar focos empotrados, poner luces a ras de suelo, etc.

También puedes colocar a lo largo del pasillo dos o tres apliques de pared que, además, lo acortarán visualmente si es muy largo. Lo importante es optar por alternativas de iluminación ambiental que resulten cálidas.

Un consejo: instala un detector de presencia en el pasillo. Se trata de un mecanismo equipado con un sensor que detecta cuando alguien llega y enciende la luz de forma inmediata, apagándola cuando no hay nadie. Con este sistema se ahorra en la factura del suministro eléctrico, ya que eliminamos el riesgo de dejarnos las luces encendidas.

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Más amplitud gracias a los espejos

Que los espejos multiplican la luz y aportan sensación de espacio no es ningún secreto y es justo lo que necesitas en el pasillo de tu casa. Apuesta por ellos y utilízalos para decorarlo.

Tienes una amplia variedad para elegir en cuestión de estilos, tamaños y materiales. Puedes poner varios que combinen entre sí. Como sugerencia: los espejos redondos son tendencia.

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Soluciones infalibles para guardar

Seguramente piensas que en un pasillo es difícil integrar elementos de almacenaje, más allá de un perchero y poco más. Pues no es del todo exacto, ya que existen módulos con las medidas adecuadas que se pueden instalar en casi cualquier pasillo.

Son muebles de poco fondo, perfectos para espacios estrechos. Como este zapatero de Ikea. Apenas ocupa y te ofrece una solución de lo más práctica para zapatos y muchas más cosas.

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