Si eres de los que buscan un estilo concreto para la decoración del baño, puede que te sumes a la tendencia escandinava. En este artículo nos centramos en las claves con las que llevar su esencia a esta estancia de la casa. Pero dentro del estilo escandinavo o nórdico hay líneas más marcadas hacia lo actual o lo rústico. Incluso, más escandinavas puras. De la mano de los estudios de interiorismo Culto y Decoryver desgranamos los matices, que ya se dejan intuir en el baño que abre este tema, del interiorista Anton Gorbatenko.
Un estilo sencillo pero rico en matices
"La simplicidad y minimalismo son algunas de las señas de identidad de los baños de estilo escandinavo. Muebles de líneas rectas, maderas, además de complementos sencillos para darle personalidad al espacio sin recargarlo", describe de manera concisa Ana Lorenzana, al frente de Decoryver (@decoryver). Y es que aunque esta es la esencia, si se apuesta por el monocromatismo, se logrará un ambiente más minimal y moderno. La clave de este baño es la sensación de amplitud y la mezcla de tonos suaves con madera natural. Las lámparas y el papel pintado personalizan. El toque de actualidad y tendencia lo aporta el negro de la grifería, cable de las luminarias y detalle del espejo.
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Este es un baño escandinavo "de libro"
Porque nos hemos quedado con los tips que marcan el estilo nórdico, pero en el caso de los baños a veces pueden no resultan tan ideales como esperamos. Los baños de muchas de las casas de los países escandinavos tienen la lavadora integrada, incluso, instalaciones vistas. En España hemos adaptado lo que más nos gusta de ellos a nuestra cultura. Por lo general, no se ven las instalaciones y, si hay lavadora, queda oculta tras un mueble. Sí nos quedamos con sus líneas sencillas, el uso de revestimientos tipo Metro en la pared, mucho blanco y gris, tonalidades suaves en elementos -como aquí el mueble del lavabo y techo-…
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Luz natural
"La luz es otro de los imprescindibles para lograr un baño de estilo escandinavo. ¡Aprovéchala! Si no eres de los privilegiados que tiene ventana en el baño, hazte con una buena luz artificial y aprovecha las ventajas del color blanco para aportar la luminosidad que le falte", señalan desde Decoryver. En los baños de estilo escandinavo las lámparas también tienen su protagonismo con diseños colgantes de techo o focos de pared. Detalles que no llenan demasiado y decoran mucho.
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La madera está presente
Daniel Rotmensch e Irene Blanco de Culto (https://culto.store), tienen claro que para llevar el estilo escandinavo al baño "debe predominar la madera en el mueble de lavabo, techo, suelo o alguna de las paredes para evocar una sauna finlandesa" y añaden que les parece ideal la idea de hacerlo a través de listones. Fíajte en este proyecto de Slow and Chic con carácter nórdico, luminoso y con madera; pero al mismo tiempo con un aire sofisticado gracias al acabado veteado de la pared y la discreta nota dorada de la lámpara.
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Gris, banco y tonos pastel
En un baño de estilo escandinavo el blanco y el gris (en cualquiera de sus tonalidades) no faltan. Por norma general el nórdico prefiere los tonos claros y luminosos, precisamente para potenciar la luminosidad porque en esa zona las horas de sol son pocas a lo largo del día. Pero es cierto que en esa adaptación, la tendencia escandinava también se basa en grises más intensos combinados con otros que equilibran. Estos dos neutros son perfectos para que la madera destaque, para aportar matices con texturas y estampados (el hidráulico es el rey por excelencia en este aspecto) y para introducir pinceladas en negro cuando se quiere actualizar. ¿Adoras el color? Entonces también puedes llevarlo a tu baño escandinavo en las versiones pastel.
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El toque fresco: incorporar plantas
Por la sencillez en las líneas y la sensación de orden que inspiran los baños de estilo nórdico, hace que resulten espacios frescos. Y en ese matiz puedes jugar con las plantas. Es frecuente ver plantas naturales o artificiales en un baño escandinavo. Cerca de la zona de la ducha, en macetas modernas, en cestas, colgantes… "Incorpora elementos naturales al baño, a través de flores, plantas artificiales o con los colores de los complementos, aportarán frescura y armonía a tu baño. El suelo de imitación pizarra también nos sirve como conductor hacia la naturaleza", aporta como truco Ana de Decoryver.
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Pocos acabados bien coordinados
"La continuidad con los materiales o en los tonos de paredes, techo, suelo y plato de ducha son claves a la hora de llevar el estilo escandinavo al baño", indican desde Culto. Puedes optar por esa sensación de unidad en todo el espacio o combinar 2-3 acabados y colores pero sin salirte de ellos. "Es frecuente jugar con los colores pastel de baja saturación como por ejemplo un rosa palo, gris verdoso suave y un blanco roto", concluyen.
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Revestimientos estrella: azulejo Metro, hidráulico y pintura
Si bien es posible decorar un baño de estilo escandinavo con madera también en el suelo paredes (con paneles, tarimas o vinílicos o cerámicos que la imitan), así como pizarra u otros efectos tipo piedra o cemento; hay tres acabados que harán que tu baño se sienta nórdico.
- Baldosa hidráulica. Sus estampados y motivos tienen ese aire retro que encaja en el estilo nórdico. Por lo general no son motivos desvaídos ni desgastados sino marcados, con efecto geométrico y óptico. No combinan demasiados colores sino que repiten un patrón ordenado y juegan solo con dos o tres tonalidades. Fíjate en este suelo sencillo y especial. Es un proyecto de Leticia Rodríguez Yáguez con pavimento Art Factory de Hisbalit.
- Azulejo tipo Metro. El rectangular, de tamaño medio, con bisel o sin él y en cualquiera de sus acabados -brillo, satinados o mate- y colores. Aparece en las paredes para cubrirlas por completo o jugando con ellos para zonificar (la zona de la ducha, del lavabo, un zócalo…).
- Pintura. En paredes. Porque no todas se revisten con azulejos. Es más frecuente ver pintura que papel pintado en un baño de estilo nórdico. Lo ideal es que sea plástica y mate.
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El estilo escandinavo mezcla
"Mezcla estilos. Un espejo diferente, un cuadro especial o algún elemento decorativo que te encante y que hagan tu baño de inspiración escandinava único y personal", aconsejan desde Decoryver. Porque la tendencia nórdica tiene sus claves pero mucho también de mezcla. De ahí que la madera más tosca encaje y sea un guiño más rústico o tradicional. Que la baldosa hidráulica retro tenga su hueco, así como espejos vintage o grifería retro. Este baño juega con el blanco y el negro o gris fuerte. Es sencillo y no tiene demasiados artificios. Y sin embargo es especial gracias al original gresite de la pared que combina líneas negras sobre base blanca y a la mesa recuperada convertida en mueble de lavabo.
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Las piezas de un baño escandinavo
En cuanto a saneamientos, un baño de estilo nórdico tiene el inodoro (más retro o actual y compacto), puede o no tener bidé -que se puede sustituir por grifería higiénica instalada junto al inodoro o un diseño con lavado-, uno o dos lavabos con pedestal en la tendencia más retro o sobre encimera; y ducha o bañera. Las duchas van con mamparas sencillas de perfilería fina que puede ir en acabado inox, blanco o negro. Es raro ver tonos dorados en el baño nórdico, aunque algo en latón envejecido puede darle sofisticación. Los cristales, transparentes (no suelen verse serigrafías ni ahumados) En el caso de las bañeras, o bien son encastradas de poca altura o, si el espacio lo permite, bañeras exentas de líneas actuales o de inspiración vintage con patas.
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