Qué debes tener en cuenta al elegir el espejo del cuarto de baño

No lo dudes: es mucho más que un simple accesorio de baño. Aunque el espejo es, ante todo, un objeto funcional y práctico que nos ayuda en nuestro día a día, también aporta estilo a la estancia, hace crecer los metros, ofrece un lugar estratégico para almacenar, proporciona luz… Por eso, una adecuada elección hará que le saquemos realmente el potencial que tiene. Antes de colgar el tuyo, ten en cuenta estas ideas de decoración. Con ellas, solo le faltará decir quién es la más guapa del reino.

1. Determina tus necesidades

Si quieres que tu espejo sea mágico, necesitas que dé respuesta a tus necesidades y hábitos. Si te maquillas en el baño o no, si lo compartes o es para ti sola, si tienes que ponerte lentillas, si te falta espacio para guardar, si eres bajita o alta… Cuantas más pistas tengas, más sencillo será encontrar el modelo ideal para ti. 

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2. No olvides las condiciones del espacio

Además de adecuarse a tus necesidades, el espejo debe adaptarse a las dimensiones y la forma de la estancia. Curiosamente, aunque en un baño XL, un espejo XS quedará desangelado y pobre, esta regla no funciona al revés: un modelo grande en un baño pequeño puede dar juego, ampliar los metros y atrapar la luz.

3. En función del mueble bajolavabo

Para lograr un efecto equilibrado, el tamaño del espejo de baño también debe tener en cuenta el bajolavabo sobre el que se colgará, salvo que elijas un modelo de cuerpo entero, colocado directamente en el suelo. Para una armonía visual óptima, asegúrate de que el ancho del espejo respeta el del mueble, aunque puede sobresalir un poco o ser un poco más pequeño. ¡Tampoco hay que ir al milímetro! 

4. Con luz incorporada

Si tu baño carece de luz, natural o artificial, o no tiene la suficiente para evitar el temido ‘ojos de panda’ al maquillarte o cortes durante el afeitado, opta por un espejo que integre una fuente led. Los modelos retroiluminados son tendencia, tanto por su funcionalidad como por su efecto decorativo.

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5. En baños compartidos

En baños compartidos, lo más cómodo, especialmente si tenéis los mismos horarios, es contar con dos lavamanos que permitan usarse a la vez, sin entorpecerse ni causar conflictos. En estos casos, colocar dos espejos, frente a uno XL que abarque ambos, es otra buena opción, ya que mantiene delimitadas las ‘zonas de acción’ también con los espejos. Esta regla se puede romper, cuando no compartes baño y quieres ganar amplitud y luminosidad.

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6. Según el 'look' que buscas

En el aspecto estético de tu espejo, entran en juego la forma y el marco o la ausencia de él, que también determina (y mucho) el estilo. Así, un modelo rectangular o cuadrado sin marco, combinado con iluminación incorporada, funcionará bien en interiores minimalistas. Para ambientes más acogedores o de estilo barroco, apuesta por redondeados y marcos de madera. Para uno moderno y contemporáneo, atrévete con un gran espejo compartimentado tipo 'estudio de artista' con marco de metal negro: le dará un aire industrial a tu baño y ¡te permitirá ampliar el espacio!

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7. Si necesitas espacio extra para guardar

Las rutinas de belleza coreanas con sus muchos productos y la facilidad de ‘reproducción’ de los cosméticos provocan que siempre necesites algo más de espacio para guardar. Sin olvidar, que la falta de metros es una constante en las casas actuales, de las que tampoco se libra el cuarto de baño. Para ayudarte en la tarea, ten en cuenta que hay modelos con armario, dentro de los cuales descubrimos un ‘cofre escondido’ para guardar joyas o pequeños objetos de valor. Otros también pueden incluir estantes y brindarte centímetros adicionales para colocar tus cremas y botes.

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8. Cómo colgarlos

Es importante concentrarse en la sección de la pared donde montarás el espejo, tanto para elegir el sistema adecuado, no es lo mismo el Pladur que azulejos, como para situarlo a la altura adecuada. Así, aunque tu propia altura también tiene mucho que decir y el criterio principal debe ser la comodidad en el momento de su uso, lo normal es situar la parte superior a unos 200 cm del suelo, para que puedas ver bien tu rostro. Si se trata de un baño familiar, piensa también en los más pequeños, minimizando el espacio entre el mueble y el espejo.

9. Cómo iluminarlos

Tan importante como acertar en la elección del modelo ideal es saber iluminarlos, para que no haya sombras y puedas maquillarte a gusto. Para ello, coloca apliques a cada lado del espejo que acaben con los molestos reflejos. Elígelos con una luz blanca fría, que permita ver incluso las imperfecciones de tu piel y, si es posible, resistentes a la humedad, para evitar accidentes.

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