¿Disfrutar de unas vacaciones en casa como si estuvieras en un hotel? ¡Esta vivienda lo consigue!

Dormitorio principal

En el dormitorio de matrimonio se ha apostado por una paleta cromática neutra muy relajante, que crea la atmósfera idónea para el descanso. Situada en el centro de la habitación, la cama es la protagonista absoluta, gracias a los textiles y al cabecero de capitoné picado. Al estar empapelada con un diseño en relieve con textura, no se ha colocado ningún cuadro ni elemento decorativo sobre la pared del cabecero, evitando recargar el espacio. Siguiendo con la máxima de la funcionalidad que define el interiorismo del resto de la vivienda, el armario ropero XL se funde en el ambiente, sin restar metros visuales.

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Todo al rosa

Los tonos rosas visten la habitación infantil de las niñas, donde destaca el cabecero hecho a medida, a juego con las casitas decorativas de la pared. La luz natural se proyecta suavemente en las paredes, empapeladas con un modelo de pequeños topos, mientras que el armario blanco se mimetiza, buscando pasar desapercibido y dando protagonismo a los textiles y objetos decorativos.

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Luminoso y amplio

Al tratarse de un dormitorio ‘suite’, el cuarto de baño está separado de la habitación a través de unas paredes de cristal que conectan visualmente ambos espacios, haciendo crecer los metros. La ducha se sitúa detrás del lavabo y, a modo de separador, se diseñó un espejo que crea el efecto de ‘estar volando’. Para mantener la unidad, se ha usado en la parte de arriba de la pared, el mismo papel pintado del dormitorio, mientras que en la inferior se ha realizado un arrimadero (o zócalo alto) de cerámica con textura. El toque de sofisticación lo pone el negro del listón de la pared y la parte central del mueble bajolavabo.

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Zona de escritorio-tocador

Junto a la ventana, se ha colocado una coqueta zona de escritorio, que actúa a la vez como tocador, con una mesa de cristal y aluminio y una butaca tapizada (imitando el estilismo del comedor). Un rincón lleno de encanto, con salida al jardín, donde el espejo de pie, estratégicamente situado, multiplica la luz natural y amplía los metros visuales.

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Como un ‘resort' de lujo

¿Vivienda u hotel? Esta vivienda de Tarragona reúne lo mejor de ambos, sin perder la sensación de hogar, gracias a la decoración de interiores de Tinda’s Proyect Interiorista. Cerca de 350 metros cuadrados y tres plantas realizadas a la medida de una familia con dos niñas pequeñas, que permiten vivir en 'verano' (casi) todo el año. Así, las principales estancias están conectadas al jardín y el diseño exterior se inspira en el de un hotel, con diferentes zonas para descansar, tomar el sol junto a la piscina, ponerse el bañador en el vestuario, preparar una típica barbacoa veraniega o disfrutar de una velada con amigos.

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Electrodomésticos integrados

La pared libre de la cocina incorpora un frontal lacado en negro de suelo a techo, que integra los electrodomésticos y diferentes módulos de almacenaje, que contrasta con los muebles blancos inferiores de la zona de la ventana. Una solución que ofrece una gran capacidad para guardar. El suelo, un laminado de calidad, transmite la belleza de la madera, pero resulta mucho más resistente y fácil de mantener.

Cocina con isla central

Con un diseño moderno y funcional, donde cada elemento cumple una función y hace la vida más agradable a los moradores, la cocina juega con el binomio cromático blanco-negro. Una gran isla central, que incluye zona de aguas, fuego y campana en el techo, además de un 'office' con taburetes altos, es el corazón del espacio. Las tres lámparas de suspensión iluminan toda la superficie, al mismo tiempo, que ponen una nota ‘chic’ al ambiente. 

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Un comedor familiar

El comedor cuenta con acceso directo desde la cocina, lo que facilita la comunicación entre ambos y evita desplazamientos innecesarios. Con capacidad para seis comensales, las sillas, casi butacas, se han tapizado a juego con el sofá con una tela lavable, antimanchas y de tacto aterciopelado. Para contrarrestar el peso de los asientos, la interiorista ha optado por una mesa de cristal, mucho más ligera que un modelo de madera. La iluminación también se ha cuidado mucho, combinando tres tipos: focos, lámpara suspendida y tira de leds.

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Salón a doble altura

Además de mirar al exterior, el salón dirige su mirada hacia el techo, debido a que la planta superior, que alberga el despacho de 60 metros cuadrados de los propietarios, está abierta, lo que crea sensación de doble altura. Los grandes ventanales se han vestido con visillos ligeros blancos y cortinas de siete metros, confeccionadas con la misma tela de las tapicerías, reforzando la unidad visual y estética del espacio. 

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Espacio único

Esta vivienda a medida apuesta por la funcionalidad, con una distribución que apuesta por un espacio único, que aglutina salón y comedor, y en el que el exterior también tiene cabida. Los colores neutros (un distintivo del estudio) sirven de hilo conductor en la decoración de interiores. Desde el blanco hasta el negro, pasando por la gama de los grises crean espacios llenos de estilo y fuerza. Los acabados lacados, brillantes y naturales se mezclan con tino, ofreciendo un resultado muy elegante en cada una de las estancias. “Me gustan los materiales con textura. Esos que cuando los tocas, te transmiten sensaciones”, afirma Eva Mesa, de Tinda’s Proyect.

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Una cálida bienvenida

La puerta de entrada a la vivienda establece dos zonas en el recibidor. Una que se abre al salón-comedor con dos consolas voladas, muy prácticas para dejar las llaves y el móvil, dos lámparas de sobremesa gemelas y un estiloso espejo. Y otra, más teatral e impactante, por la que se accede a la cocina con dos cuadros XL, una mesa auxiliar dorada y un arco lacado con pintura de coche en color negro, que incluye una vitrina para piezas decorativas.

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Relax al aire libre

El color blanco, a juego con la edificación, es el protagonista absoluto del mobiliario de jardín, aportando un encantador aire mediterráneo al exterior. En la zona de la piscina se han creado dos zonas dedicadas al relax: una de hamacas para tomar el sol y otra con dos camas balinesas, ideal para echar una siesta o leer un libro. 

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