Alfombras de exterior: un plus 'deco' para tu terraza o jardín

¿Ideas para hacer más personal y confortable la decoración exterior? Sin duda, debes mirar al suelo porque allí tendrás un aliado que aportará un plus a tu terraza, porche o jardín. Las alfombras también son para el exterior. En este artículo queremos que te inspires a través de los ambientes que te proponemos pero también que sepas los tipos de alfombras de exterior que hay, sus materiales y características, así como los cuidados y mantenimiento que te exigirán.

Alfombras de exterior e interior

Nos vamos a centrar en el uso de este tipo de alfombras en espacios exteriores porque es su finalidad más conocida por los materiales en los que se realizan pero debes saber que son apropiadas para que decores con ellas cualquier estancia interior de la casa. Sobre todo, son una opción adecuada para aquellos que viven con animales o conviven con personas alérgicas al polvo o asmáticas porque las alfombras de exterior, al no tener "pelo", son antialérgicas. Dentro de casa se barren o aspiran como hagas habitualmente con tu suelo (incluso con robot aspirador) y se friegan también de manera manual o mediante robot friegasuelos.

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Alfombras de verano para tu espacio al aire libre

Cuando hablamos de decorar terrazas, porches, jardines, patios o balcones  con alfombras de exterior nos referimos a aquellas de materiales apropiados. Pero dentro de las existentes, cada uno tiene características que lo hacen más o menos adecuados.

Alfombras de verano en polipropileno

Es un material adecuado para exterior porque es impermeable y resistente a los rayos UV. Este tipo de alfombras se pueden quedar expuestas al sol y no se deterioran. Imitan texturas de otros tejidos, por ejemplo, de fibra natural.
 

Alfombras de exterior vinílicas

Están realizadas en PVC, es decir, son de un material plástico. Son impermeables por lo que soportan el contacto con el agua. Se pueden decorar con motivos impresos de todo tipo. Solo  debes tener en cuenta que deben quedar protegidas debajo de un techado o pérgola porque los rayos UV hacen que pierdan color.
 

Alfombras de vinilo tejido Keplan

Puede que también veas alfombras así denominadas. Son resistentes al agua. Su composición en 97% PVC, 2% polyester y 1% fibra de vidrio. Son resistentes a la luz solar así su colorido perdura. Son antideslizantes por lo tanto ideales para terrazas, porches o zonas de piscinas.
 

Alfombras de fibra natural

Las fibras naturales son también adecuadas para llevar al exterior. Según la fibra las hay más o menos resistentes al uso. Pero no se pueden mojar ni conviene que les dé el sol directo. No tienen pelo y no atrapan tanto el polvo como una alfombra de lana pero no se pueden lavar. Algunas, como las de bambú, tienen propiedades antibacterianas de manera natural.
 

Alfombras de algodón o esteras

Son un tipo de alfombra realizada en fibra de algodón que se puede lavar en lavadora (solo habrás de prestar atención al tamaño y peso para comprobar que tu lavadora lo soporta). Tienen diseños coloridos y son perfectas para superponer unas con otras. Generalmente no cuentan con base antideslizante y es conveniente incorporarla. Son resistentes a las altas temperaturas –aunque el sol puede decolorarlas– y no acumulan electricidad estática.

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El mantenimiento de las alfombras de exterior

Que no te eche para atrás el tema del mantenimiento y limpieza para decorar tu espacio al aire libre con una o varias alfombras de verano. Las de polipropileno y vinílicas se limpian con un manguerazo o fregándolas con fregona (con agua y jabón neutro) en caso de que no puedas dárselo porque vivas en un piso con terraza o balcón sin desagüe. Además, son resistentes a las manchas, así que puedes usarlas para decorar un comedor de exterior sin problema. Las de fibra vegetal hay que sacudirlas cada cierto tiempo (incluso aspirar con frecuencia). Quizá esto es más engorro. Y las de algodón tipo estera van a la lavadora. Sin duda, las alfombras de exterior de polipropileno y vinílicas son las más fáciles de limpiar y mantener. Debes evitar siempre los productos fuertes o abrasivos.

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Usa las alfombras de exterior para "marcar" ambientes

Si dentro de casa se usan las alfombras para dar calidez a la pisada, amortiguarla, aislar de frío y ruidos y delimitar espacios; fuera ocurre algo similar. Quizá aquí no piensas en aislar pero sí tendrás una pisada más confortable. Sin duda, úsalas como elemento estético pero también práctico para delimitar ambientes en exteriores amplios donde puedes jugar con un salón al aire libre, un comedor, una zona chill out…

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Cubre un suelo que no te guste

Si tienes un pequeño balcón o una terraza con un suelo alfo deteriorado o poco estético, las alfombras de exterior juegan a tu favor porque con ellas puedes cubrir el pavimento y darle el estilo que quieras. Puedes combinar varios diseños superpuestos hasta que llegue el momento de invertir en un suelo nuevo, si es que llega.

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¿Qué medida debe tener la alfombra de exterior?

Depende. No es lo mismo si -como decíamos- quieres cubrir todo el suelo de una terraza mini porque entonces se trata de usar alfombras adecuadas para tal fin; que si las usas de manera más estética. Entonces, las reglas en cuanto a dimensiones son similares a las que se aplicarán en una alfombra de interior. Piensa que en el caso de un salón al  aire libre, al menos las patas delanteras de los asientos deben quedar dentro de la alfombra. Para un comedor, las sillas han de estar dentro  (también al menos las patas delanteras) cuando estas están separadas de la mesa.

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¡Diseños atrevidos!

Puede que todo el exteriorismo de tu terraza esté basado en el color o que quieras añadirlo para dinamizar un conjunto de mobiliario más tradicional. Si este es tu caso, las alfombras de exterior te ayudarán a lograr el objetivo puesto que se fabrican en diseños alegres, atreevidos, coloristas, desenfadados… Todos los motivos que imagines pueden decorar una alfombra de verano: estampados tropicales, botánicos, animales, florales, geométricos… nUestra recomendación es que si optas por un diseño así es que el resto de textiles serán en telas lisas.

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Alfombras en un único color

Lisas aunque con textura. Las alfombras de exterior pueden imitar diferentes tipos de tejido y aportar trama en su diseño aunque te decantes por un color liso. Son más neutras pero también perfectas. Puede que sea el estilo que demanda tu terraza o porche. Si no encuentras una alfombra de exterior que se adapte a lo que quieres, puedes recurrir a marcas de alfombras que las realizan a medida. En este caso es fácil que incluso, según el material, puedas escoger el tipo de remate de los bordes.

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Y en cuanto a los colores…

Tanto para un diseño de alfombra lisa como estampada, los colores medios son muy sufridos en cuanto a suciedad. Ya hemos dicho que se limpian fácil y que las de polipropileno y vinilo son resistentes a las manchas; pero siempre un tono medio como tierra, topo o gris disimula más. También los estampados en esta gama disimulan la suciedad. Los colores oscuros son más sucios y con los muy claros sucede lo mismo. Elige también en función del acabado de tus muebles de exterior y el efecto que quieras conseguir más neutro o llamativo. Piensa que si vas a usar la alfombra en un exterior sobre todo en verano te apetecerá un ambiente relajante y fresco, para contrarrestar las altas temperaturas. Así que no te fijes en colores demasiado cálidos (o al menos que no predominen) ni oscuros.

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Las alfombras de exterior más naturales

Las de fibra vegetal son alfombras atemporales que siempre gustan. Si te preguntas cómo puedes combinarlas, te ayudará saber que las maderas exóticas siempre combinan bien. Las tonalidades naturales son perfectas para crear una decoración exterior sosegada, más tradicional, actual, boho o  exótica en función del diseño de los muebles y de los complementos que escojas. También pondrán una nota cálida en una terraza o porche decorada con muebles en metal en color negro. Así equilibras. Debes saber que las alfombras de fibra vegetal de yute también están disponibles en colores (porque se tiñe bien), incluso, con estampados.

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