Natural, sofisticada, tradicional, original… ¿Cómo va a ser la Navidad en tu casa?

La decoración navideña puede adoptar distintas versiones en función de tus gustos; el gasto que quieras realizar; tu agenda de esos días, no es lo mismo celebrar alguna de las fechas señaladas, como Nochebuena o Navidad, en casa, que no hacerlo; y la ilusión que te proporciona el rodearte de un ambiente mágico y dejarte llevar por las guirnaldas. Seas de la que viste la casa de arriba abajo o de la que se limita a ciertos guiños ‘deco’ por alguna de las estancias, te explicamos cómo seguir, y poner en práctica, las 10 tendencias navideñas con más estilo.

1. Polar: blanca como la nieve

Si Papá Noel viene de Laponia nuestra inspiración viene con él y sus paisajes. La nieve es un requisito imprescindible, al igual que el azul del mar helado. En el mercado existen muchos árboles de Navidad nevados, pero si el tuyo no lo está o solo quieres un toque, puedes hacerla tú misma con bicarbonato de agua o espuma de afeitar. Viste de blanco todo lo que toca y hace magia al instante, con adornos y elementos para la mesa, los muebles, la chimenea y las ventanas. Para subir la temperatura ‘polar’ nada mejor que un buen sofá de terciopelo o una manta de lana sobre el sofá.

2. Un estiloso aire ‘vintage’

Si quieres alejarte de lo tradicional, sin perder la magia ni el toque de estilo, opta por dar una pincelada 'vintage', tan glamurosa como personal. Puedes apostar por el trío cromático clásico (rojo, verde y blanco) o incorporar tonos más oscuros con un plus de calidez, como el azul oscuro, verde botella o negro. Decora el árbol con pocos adornos y en estos tonos y en la mesa apuesta por cubiertos dorados, una cristalería especial, candelabros dorados y un camino de mesa elegante. Para llevar la tendencia hasta el final, cierra tus regalos con una cinta de raso o una pluma.

3. La naturaleza también es ‘chic’

Este año, la tendencia natural, que no es lo mismo que la rústica, nos atrapa entre piñas, arreglos con ramas de abeto o abedul, colores cálidos, dosis de sencillez y el uso de materiales naturales, como la madera o las fibras vegetales, como ratán y yute. Este estilo nos permite una decoración navideña casera con adornos creados por nosotras con flores secas, rodajas de frutas, galletas, troncos de madera como salvamanteles...

4. ‘Cocooning’: con ella llegó la calma

La casa también en Navidad debe ser tu refugio, tu lugar donde desconectar y sentirte cómoda y a gusto. Por eso, la decoración navideña debe integrarse suavemente, sin molestar al resto, y buscando la relajación y la calma, también en esta época del año. Sigue la paleta de colores 'cocooning' y pon la mirada en el entorno y lo habrás conseguido. 

5. Divertida, la más original de las fiestas

Si en el resto de las tendencias abogamos por la mesura y cierta sobriedad, evitando las guirnaldas y los adornos imposibles, aquí podemos dar rienda suelta a nuestra vena más juguetona y crear un ambiente visualmente impactante, que no deje indiferente a nadie. Lo malo de esta decoración es que puede hacer que caigas en lo ‘kitsch’ sin darte cuenta. Para ello, es importante que busques el equilibrio, para que resulte atrevida pero no hortera, y sigas algunas reglas. Aunque el color está permitido, no hablamos de arcoíris sino de seguir la ‘norma del tres’, aunque estos sean el verde, el azul y el amarillo. Multiplica las guirnaldas de luz, pero a ser posible evitando las multicolores y apagando la luminaria del techo. Y, por último, sé precavida con el ‘brilli brilli’, uno de los aliados del ‘kitsch’.

6. Reciclable, respetuosa con el medio ambiente y económica

Si este año has decidido que se puede decorar sin hacer un gasto extra y con cosas que te rodean, esta tendencia es la tuya. Puedes empezar por no comprar un árbol de Navidad y hacer uno, recuperar objetos que ya tienes e introducirlos en los ambientes de una manera original y distinta; dar una segunda o tercera vida a piezas que parecían inservibles, fabricar tu propia corona… Y, por supuesto, a la hora de envolver los regalos utilizar papel biodegradable, tipo kraft, sustituye el celo por una cuerda y agrega una rama de eucalipto como toque final.

7. Nórdica: el triunfo del menos es más

Y de la calidez escandinava, la madera, el abeto natural, las velas sobre la chimenea y en la ventana, la mantita en el sofá, los tejidos gustosos… Estamos ante una tendencia que busca la elegancia sencilla, con árboles poco recargados y vestidos con adornos bonitos y sin brillos extra, donde no falten los elementos naturales, como las piñas o las ramas de árbol. Las guirnaldas, las velas y las cestas son tres básicos que además de decorar crean sensación de hogar. Y para las ventanas, mejor cristales y copos que spray de nieve.

8. Tradicional, que no clásica y aburrida

Es, sin lugar, a dudas la tendencia con más seguidoras. Capaz de mantener vivo el espíritu de esta época con una decoración en verde y rojo, donde la poinsettia siempre es bien recibida y los adornos clásicos poseen el encanto de las navidades pasadas (y no estamos hablando de 'Cuento de Navidad'). Para que reluzca cada año, sin perder tirón ni resultar aburrida, debe renovarse incorporando elementos que le den un nuevo aire, sin perder su esencia.

9. Romántica y dulce, en tonos pasteles

Si para Navidad quieres dulzura, ternura y magia, esta tendencia conseguirá imprimirlas en toda tu casa. Aunque, advertimos, posee un marcado acento femenino. En este 'look', el rosa pastel se convierte en el mejor aliado, combinado, que no agitado, con neutros, como el blanco, el gris claro o el beis, que proporcionan un plus de calidez a tu hogar. Esta paleta cromática puede poseer, además, un toque ‘retro’, que nos permita mezclar elementos tradicionales navideños; escandinavo, con materiales naturales y velas blancas; o barroco, si introduces el negro, por ejemplo.

10. Sofisticada, estilo en clave navideña

La sofisticación se viste en esta época del año bien en colores neutros, como el blanco, el gris o incluso el negro, bien en tonalidades intensas de verde o azul: el ‘Classic Blue’ (el color Pantone de 2020) también es una opción. Úsalos en pequeños toques de decoración de la mesa o en las bolas del árbol, por ejemplo. No olvides que el exceso es difícil de manejar, especialmente cuando te ves rodeada de preciosos adornos, arreglos florales y destellos dorados. Por eso, ten medida con la decoración y procura distribuir los diferentes elementos en el espacio, para no saturar, armonizando siempre con el color.