Viste de fiesta la mesa por Navidad

¡Es fiesta! Engalana la mesa. Llega el momento de reunir a la gente que más te importa alrededor de la mesa. Sea una comida o una cena, Nochebuena o Nochevieja, por Navidad la mesa se viste y decora para la ocasión. Inspírate en estas ideas y toma nota de los consejos para que sea una velada mágica, única y especial.

Detalles metalizados

Son casi imprescindibles en Navidad para decorar y vestir la mesa. Dorado, plateado, incluso, nácar y cristal. Sobre una mantelería en tonos oscuros o claros, pero el brillo de estos materiales y acabados pone sofisticación. Un filo en la vajilla o en la cristalería, cubiertos dorados, un bajoplato plateado… escoge un acabado: dorado o plateado (nunca mezclados) y combínalo con nácar o cristal.

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Blanco para el día

Aunque esta regla no es inamovible, escoger tonos claros para vestir la mesa de fiesta en las reuniones de día, Navidad y Año Nuevo es un acierto. Tonos claros en la matelería, platos en blanco o crema, cristal transparente (aunque puedes introducir alguna nota de color en un acabado ahumado) y adornos en la misma línea.

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Colores profundos para la noche

Azul oscuro, negro, gris… son bases idóneas para decorar la mesa en las celebraciones de Navidad que son por la noche. Sobre ellas además los tonos metalizados aportan mucho brillo. También los colores cálidos (como en este centro que decora la mesa) como naranja y amarillo resultan muy elegantes.

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De fiesta con la mesa vista

Una opción que funciona cuando tienes una mesa bonita y resistente es vestir la mesa sin mantel, de manera que el sobre queda a la vista. Con mesas de madera, marcar cada sitio con individuales o caminos de mesa da resultado.

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¿Cómo ser la mejor anfitriona?

Prepara la mesa vestida de fiesta con tiempo, antes de que lleguen los invitados. Así podrás dedicarle tiempo y mimo a cada detalle. Plancha con tiempo el mantel y las servilletas, de manera que puedas reaccionar si ves alguna mancha. Coloca sobre la mesa un protector, se llama muletón. Es un plástico grueso que evita que la tapa se manche si cae grasa o algún líquido. Además, al ser mullido da más confort a la mesa, evita ruidos al dejar los cubiertos y hace que el canto esá blando al apoyar los antebrazos. A continuación, viste la mesa de fiesta con el mantel. ¡Ya tienes la base preparada!

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La vajilla y cristalería en una mesa de fiesta

Sobre el mantel, coloca solo los platos, cubiertos y vasos que vayas a usar porque el menú así lo pide. El plato llano va sobre la mesa. Pudes colocar un bajo plato decorativo y a continuación empezar con el resto de piezas de la vajilla. Plato pequeño o de postre sobre llano y sopero u hondo sobre este. A veces, el hondo se sustituye por un cuenco o tazón. La servilleta debe ir colocada a la derecha del comensal, aunque también a veces se coloca a la izquierda y otras sobre los platos. Los cubiertos ban sobre la servilleta sobre los platos o a cada lado de la siguiente manera: tenedor a la izquierda, cuchillo y cuchara sopera a la derecha (cuchillo más cerca del plato y cuchara en el exterior). La cucharilla de postre o tenedor pequeño se colocan en la mesa pero "encima" del plato, inclinados respecto a este.

Las copas y vasos (aunque sirvas vino siempre debes poner vaso para el agua) van colocados a la derecha del plato en la zona superior (si mirásemos la mesa desde arriba).

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Puedes colocar mantel y camino de mesa

Los caminos de mesa e individuales pueden ir sobre la mesa directamente o cualquier mantel de tela. Sirven para decorar y marcar los sitios. Caminos van de lado a lado de la mesa, como en esta fotografía, o colocados en el centro de la mesa. Esta opción es adecuada si vas a servir entrantes o aperitivos para compartir. Los indivisuales pueden tener formas originales y sobre ellos pueden ir bajoplato, plato llano, postre y hondo.

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Sobre el plato

Como ya hemos comentado, la servilleta se puede colocar sobre los platos, incluso, los cubiertos. Queda bonito agruparlos, atándolos con una cinta o cordel y colocar un cartel con el nombre del comensal que se sentará en ese lugar. Es divertido en mesas grandes buscar el nombre para saber dónde sentarse. Además, de esta manera puedes ayudar a organizar los sitios de manera que haya más afinidad entre las personas que se sientan juntas o evitar que se produzcan roces entre dos miembros de la familia que sepas que no son los mejores amigos. El protocolo indica que se deben sentar  alternados uno a uno hombres y mujeres.

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Un extra de la decoración: el centro de mesa

Además de la vajilla, mantelería y cristalería, para que la  velada sea más especial y se note que es una noche especial, en la que has puesto todo el cuidado en decorar la mesa, piensa en un bonito centro de mesa. Puedes optar por un bouquet de flores de poca altura (para que no entorpezca la visión entre comensales) en los colores que hayas elegido para decorar o en los tradicionales de la Navidad (verde y rojo). También bastan unas ramas de abeto u hojas de acebo o eucalipto en el centro de la mesa, sobre la tapa, en las que intercales algunos adornos navideños.

Guirnaldas y velas

Sobre la mesa te ayudarán a crear una atmósfera mágica las velas y las guirnaldas. Una buena idea es colocar una guirnalda en el centro de la mesa, enredada en una rama verde como aquí entre las hojas de eucalipto. Además, si eliges unas hojas frescas de esta variedad tendrás un aroma natural muy agradable que evocará a la naturaleza. Las guirnaldas de led no queman ni se calientan, funcionan con pilas y apenas gastan. También puedes intercarlas velas en vaso y otros candelabros con velas.

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Otros detalles sobre la mesa o en un rincón

Bien directamente encima de la mesa o en un rincón del comedor. Cuida la iluminación y decoración de la mesa con detalles que no solo estén sobre esta pero que también ayudan a que tu elección brille con luz propia. Si no tienes lámpara de techo puedes sustiuirla por algún colgante luminoso, como estas estrellas de papel. También puedes colgar del techo una rama y de estas que pendan adornos navideños colgantes. Si no quieres o puedes colocar la composición festiva sobre la mesa, hazlo cerca de esta, en una esquina, en un rincón en el suelo o sobre el aparador.

Una propuesta decorativa muy natural

Rescata una rama caída de un paseo por el campo, límpiala bien para eliminar restos de tierra, colócala en un jarrón con piedras (para que tenga peso y no venza) y decórala con bolas de Navidad o tus adornos preferidos. Es un detalle natural que junto con la decoración de la mesa hará que el comedor sea como un bosque en la comida de Navidad. En la mesa, una composición sencilla con individuales, velas y un arreglo de acebo en el centro de la mesa.

La mesa más tradicional: rojo y dorado

Esta propuesta para vestir y decorar la mesa en Navidad es de las más tradicionales puesto que usa dos de los colores más recurrentes en estas fechas: rojo y dorado. Una combinación clásica que nunca defrauda.

Una mesa de estilo nórdico

Sencilla y luminosa. No falta el toque cálido de la madera y el guiño a la naturaleza. Esta mesa se decora en un estilo nórdico y acogedor. Mucha madera, mesa a la vista, textiles de pelo largo que caldean y menaje en color blanco con detalles en tonos tierra. Los arreglos son sencillos, ramas con frutos o varas de algodón. Y no falta la atmósfera sugerente que crean las luces. ¿Qué te parecen las guirnaldas que cruzan sobre la mesa?

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Para los más pequeños

En muchas reuniones familiares hay tantos niños que todos se sientan juntos en un lado de la mesa o en una específica para ellos. Sea como sea, compartan mesa con los mayores o no, haz que se sientan especiales esa noche. Viste su mesa con un guiño infantil y divertido. Incorpora muñecos de nieve, osos polares, deja que se asome Papé Noel…

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La Navidad más sofisticada

Dorado, blanco y negro. Un trío de ases que harán que la mesa de Navidad y el comedor se sientan en estas fiestas  sofisticado y lujoso. Sobre un mantel de fondo blanco con estrellas doradas se coloca la vajilla en tono oscuro liso y cristalería transparente con detalles en dorado. Sencillo, limpio y muy sugerente.

Azul y plata para vestir la mesa de fiesta

Son dos colores que funcionan a la perfección combinados para decorar mesas inspiradas en los tonos del invierno, en el frío ártico. ¿Te gusta? Coordina varias tonalidades de azul y detalles en plata. Puedes dejar que se cuele el blanco y el cristal (transparente o ahumado, que aporta color). Si usas más grises será una mesa más seria. Aquí encajan las estrellas y las formas que recuerdan a los copos de nieve.

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Sea como sea… ¡lo importante es disfrutar juntos!

Cada detalle que pongas en la mesa representará lo importante que es para ti ese día. Vestir y decorar la mesa es solo el paso previo para recibir a los que más nos importan en unas fechas especiales. Ese es el objetivo: que disfrutes mientras preparas todo pero que los demás sepan lo importantes que son para ti. Así que disfruta y disfrutarán todos.