Cada tela con su pareja
Ni todas las telas son iguales, ni valen para lo mismo. El universo de tejidos para el hogar es tan apasionante como variado, ya que, además de colores y estampados, entran en juego otros conceptos como Martindale, ancho o tratamientos extra, y es, entonces cuándo surgen las dudas. Si estás pensando en renovar tus cortinas, tapicerías o ropa de cama, sigue leyendo. Estas claves te ayudarán a poner luz a este dilema ‘deco’. Este salón vestido de arriba abajo con telas de la colección Florian de Designers Guild apuesta por tejidos resistentes en estampados ornamentados de damasco y bordados, logrando un ambiente elegante y tremendamente acogedor.
Cojines: ¿cuántos y cuáles elegir?
Son uno de los accesorios ‘deco’ con más posibilidades, tanto en el salón como en el dormitorio, porque ‘visten’, aportan calidez y sensación de hogar, hacen más confortable las piezas grandes, dan personalidad y una pincelada de estilo y, por supuesto, te permiten estrenar estancia de manera rápida, fácil y económica. Yute, terciopelo, seda, lino… Admiten una gran variedad de tejidos, estampados y colores. Eso sí, para que no resulten excesivos, bastarán con tres o cuatro. Más cantidad romperá el hechizo. En esta propuesta de KA International, las telas doradas de la colección Tánger de Tomás Alía en cojines, descalzadora y puertas, ponen una nota de sofisticación y elegancia al ambiente.
Cortinas: en sintonía con la decoración
A la hora de elegir la tela para tus cortinas debes tener en cuenta la decoración que la rodea. “Si tus paredes son blancas, las de este color, además de dejar pasar la luz, se verán como una continuación de la pared, integrándose totalmente en la estancia y ofreciendo un resultado ligero y equilibrado, que te permitirá jugar con el resto de textiles”, señalan desde Pepe Peñalver Madrid. Mientras que en colores oscuros o con estampados llamativos requerirán una base neutra, para convertirse en las protagonistas del espacio. Es importante “que tengas en cuenta si está expuesta a un sol directo y potente, ya que si optas por tonos oscuros puede que con el tiempo se vaya decolorando”. Las de este ambiente, con tonalidades intensas inspiradas en los elementos arquitectónicos, pertenecen a la colección Momentum de Harlequin (en Pepe Peñalver).
La luz y el tamaño de la estancia importan
Elegir las cortinas para la casa es una de las decisiones más difíciles, ya que su presencia (o su falta) es determinante en el resultado final del ambiente. La luminosidad y el tamaño de la estancia son dos de los factores que deberás tener en cuenta a la hora de elegir tus cortinas. Así, en estancias de pocos metros, lo ideal son tejidos ligeros, que no sobrecarguen el ambiente, mientras que, si es oscura, siempre tonos claros. Partiendo de estas premisas, luego hay que ahondar en otras cuestiones como los estampados, la trama, la caída de la tela... Estas pertenecen a la colección Melsetter de Morris & Co, en Gancedo.
¿Y si son estores?
Los estores son una buena opción en ventanas pequeñas, irregulares, galerías, miradores o ventanas que estén sobre algún mueble. En este ambiente se convierten en actores decorativos principales, gracias a la rica y suntuosa tela con motivos bordados de Colefax and Fowler, en Gastón y Daniela. Recuerda que es más cómodo poner varios que uno grande, para manipularlos con más comodidad.
Vestir la mesa
Las telas tienen la capacidad de transformar lo que tocan en cuestión de segundos. Además de tapicerías y cortinas pueden dar mucho juego en secundarios que dan vida al sofá, como los cojines, o a la mesa, como este camino que gana la partida al mantel con sus detalles metálicos. Colección Baleares de C & C Milano (en Macarena Saiz), se inspira en las 'telas de Lenguas mallorquinas',
La opción de las antimanchas
Si en tu vida familiar el sofá es el centro de tu hogar, tienes niños pequeños, cenas habitualmente en la mesa de centro o le sustituyes por la cama en tus siestas del fin de semana, quizás debas pensar en elegir una tapicería fácil de limpiar, como la Calvia EasyClean de Villa Nova, que revoluciona el mundo de este tipo de tejidos (con mala fama estética) con ricas texturas y una amplia variedad de tonos, y que solo necesita agua para acabar con las manchas difíciles.
¿Integradas o con luz propia?
A la hora de elegir las cortinas para tu casa, puedes apostar por dos efectos: integradas en el ambiente o protagonistas. Esta segunda opción, más arriesgada y teatral, siempre debe ir acompañada de una decoración neutra, para que no acabes harta de tanto atrevimiento, como en esta propuesta de la colección Kandisnky de Coordonné. Recuerda que para que luzcan bonitas, siempre deben pecar de exceso de tela.
Ten en cuenta el color
Además de por su resistencia, una buena tela para el sofá debe sentirse a gusto en el ambiente en que se encuentra. Así, en salones XS o S, y siempre que no tengas niños pequeños, lo ideal es elegirla en tonos neutros claros, mientras que si es de tamaño mediano o grande, resulta mejor opción una tapicería ‘intensa’, como esta de Osborne & Little, que le convierta en el rey de la estancia, evitando, además, que se pierda en la inmensidad del espacio.
Tapicerías a prueba de...
Un uso intensivo, niños, años... Una tela para un sofá o un sillón debe ser capaz de aguantar el trote diario luciendo siempre su mejor versión. Para ello, antes de elegir, pregunta o mira la etiqueta y comprueba el índice Martindale (un test que establece la resistencia de los tejidos). A partir de 15.000 ciclos Martindale es apto para tapicería, pero si vas a darle mucho uso, asegúrate y sube mínimo hasta los 25.000. Evidentemente, cuantos más ciclos, más fuerte, resistente y duradera será. Este terciopelo de Pierre Frey es uno de los tejidos 'top' en las casas actuales.