Maderas claras
Blanqueadas y en tono natural suave. Estas son las dos tonalidades de madera más frecuentes en los salones veraniegos. Son claras, reflejan la luz, nada pesadas, conceden amplitud y son muy armónicas. Sin tonos oscuros predominantes, las estancias también parecen más relajantes. De hecho, si recuerdas las tendencias más slow life en decoración o el estilo hygge o lagom de los países del norte, que apuestan por crear ambientes relajados, donde el tiempo se detiene, abusan de las maderas claras.
Úsalas en el suelo (con revestimientos de madera o cerámicos), en carpinterías y en muebles. Aunque predomine el mobiliario en madera, no están prohibidas otras combinaciones…
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