¿Te imaginas pasar tus vacaciones en una vivienda concebida por un premio Pritkzer? Estas tres casas de Reino Unido, Portugal y México te permiten hacerlo. Proyectadas por Peter Zumthor, Eduardo Souto de Mora, Tadao Ando y Álvaro Siza, ganadores todos ellos de los denominados Nobel de la Arquitectura, son construcciones llenas de estilo y buena arquitectura. Una manera de disfrutar tus vacaciones en un ambiente de diseño, exclusivo, pero cómodo a la vez. Lo difícil será elegir un solo destino.
1. Secular Retreat (Devon, Reino Unido): Peter Zumthor
Moderna, inteligente y respetuosa, así es Secular Retreat, la casa de vacaciones diseñada por el ganador del premio Pritzker en 2009, para Living Architecture. Situada en la cima de una colina en Devon, con vistas a los jardines y al mar, el hormigón se convierte en el material que da forma tanto a los espacios interiores como exteriores, logrando una estética atemporal, capaz de sobrevivir en el tiempo.
“Se ha vuelto raro poder sentarse en una casa y contemplar un hermoso paisaje donde ningún rastro de otro edificio interrumpe las líneas de las colinas. Tranquilidad, contemplación, puro lujo. No pude resistirme”, argumentó el arquitecto suizo sobre esta bella construcción de vacaciones. Los sofás, las sillas y las lámparas también son obra de Zumthor.
Con Secular Retreat, Peter Zumthor continúa su tradición de crear una arquitectura cuidada y atemporal. La vivienda se encuentra en el lugar donde antes había una casa de madera en ruinas, construida en la década de 1940. Con cinco habitaciones suite, puede albergar hasta 10 personas, con un precio por persona de entre 210 y 343 euros/ noche, según la época del año.
Más información: living-architecture.co.uk
2. Casa Formosa (Tavira, Portugal): Eduardo Souto de Moura
Esta casa te da la oportunidad de disfrutar del Algarve desde otra perspectiva, desde la visión del arquitecto portugués Eduardo Souto de Moura, ganador del Premio Pritzker en 2011. Estamos antes una vivienda de vacaciones que ilustra la estética dramática, pero simple del arquitecto portugués, así como los aspectos prácticos de los espacios y del paisaje que lo rodea.
Ubicada en el Parque Nacional Ria Formosa, esta casa tiene, según el jurado del Premio Pritzker 2011, “la capacidad única para transmitir características, aparentemente contrarias: poder y modestia, bravuconería y sutileza y audacia e intimidad”. En su interior las piezas de diseño conviven con los suelos de barro y las plantas de la zona, creando un conjunto lleno de armonía y frescura.
Construida en 1995, estamos ante un espacio versátil, capaz de revelar el espíritu del Algarve de una manera elegante y poco llamativa, y de hacer que te sientas como en tu propio hogar. Así, aunque los materiales evocan a las casas de la zona, su concepción pertenece a la arquitectura moderna. Totalmente conectada con el exterior, cuenta con tres dormitorios y es apta para seis personas. Desde 1.000 hasta 2.200 € /semana.
Más información: www.boutique-homes.com
3. Casa Wabi (Oaxaca, México): Tadao Ando y Álvaro Siza
Si prefieres la playa y buscas un lugar donde desconectar, esta vivienda de vacaciones puede ser tu destino perfecto, ya que originalmente fue concebida para que los artistas encontrarán inspiración e ideas, trabajando juntos. No uno sino dos ganadores del Premio Pritzker colaboraron en el diseño de Casa Wabi, un paraíso en Puerto Escondido (Oaxaca, México) entre la costa del Pacífico y las montañas de la Sierra Madre del Sur. La zona de la piscina, totalmente integrada en el paisaje y casi a orillas del mar, es ideal para dejar pasar las horas con un libro o una bloc de dibujo.
Este proyecto, con el diseñador japonés Tadao Ando a la cabeza, en el que participaron ocho arquitectos, entre los que se encuentra también el portugués Álvaro Siza, se concibieron como lugares independientes, agrupados alrededor del complejo principal. Taller de cerámica, huerto, gallinero e invernadero son algunos de sus espacios exteriores.
Hoy, esta vivienda de alquiler ha abierto sus puertas a todos aquellos viajeros que buscan unas vacaciones diferentes. Para no perder su identidad, sus ingresos se destinan a promover los programas de la Fundación Casa Wabi, que fomentan un diálogo entre sus residentes y las comunidades locales circundantes. Con capacidad para 26 personas, cuesta 5.340 €/ noche.
Más información: boutique-homes.com