Claves para distribuir (bien) un salón en L

¿Tienes un salón con planta en forma de L? Quizá te genere dudas acerca de cómo crear los ambientes y distribuir los muebles. Lo mejor es que sepas qué debes tener en cuenta para acertar con la distribución. La colocación del mobiliario es clave. Te proponemos 4 distribuciones que te inspirarán.

Ten en cuenta puertas y ventanas

El primer paso para distribuir con acierto un salón con planta en forma de L es analizar dónde se encuentran las ventanas y la puerta de acceso. Lo más habitual es colocar cerca de la puerta de acceso la zona de comedor para que el paso hacia la cocina sea más directo. Siempre es recomendable intentar que el comedor y cocina queden cerca, pero no es un regla inamovible. Se puede quebrantar si así se consigue una mejor distribución del espacio. También al alejar el estar de la puerta, este gana en intimidad. Queda más resguardado de miradas.

Las ventanas también tienen importancia porque lo ideal es que todos los ambientes reciban luz natural y queden bien iluminados. La ventana de las distribuciones en L es que la mayoría de las veces ambos ambientes cuentan con ventanas. Sino, debes pensar en qué espacio haces más vida para concederle el privilegio de la ventana.

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Trucos parea distribuir el salón en L: un plano y muebles recortables

Lo primero que debes hacer es realizar un plano con las medidas. Si puedes, realízalo a escala (basta con que uses una regla y a cada centímetro le asignes una medida, por ejemplo 20 cm o 40 cm). Si ya tienes muebles, realiza un dibujo con los de mayor tamaño con el mismo sistema. Recorta la silueta y úsalos como plantillas para mover en el espacio dibujado. Si no tienes aún muebles, entonces mide bien cada espacio sobre el plano para saber de qué medida sería el sofá, la mesa, el mueble del televisor, etc… Así sabrás qué zona de ofrece más espacio para ubicar el salón.

Con este sistema también podrás ver si se respetan zonas de paso. Nunca dejes sin ellas el salón. Usa siempre muebles de tamaño acorde a las dimensiones del salón y estarás respetando al mismo tiempo esas zonas de paso.

Distribución en L: una zona alargada y otra más pequeña

La mejor forma de aprovechar el espacio en un salón con forma irregular en L es colocar la zona de estar en la parte más amplia o larga y el comedor en la más pequeña. Lo bueno de las plantas en L es que la simple disposición del espacio delimitará o marcará los ambientes. Puedes usar muebles similares en estilo o crear contraste entre salón y comedor.

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La zona de estar de un salón en L

Las distribuciones en L del salón se prestan a colocar sofás en ángulo o rinconeras, pero el uso de sofás con chaise longue es más reducido a no ser que la L tenga una parte ancha. Según las medidas, el ambiente de estar puede configurarse con un sofá amplio o no y con otros asientos auxiliares que completan la zona (butacas, sillones, pufs, bancos…). Hay casos en los que el sofá se enfrenta al mueble de los audiovisuales y otros en los que quedan en perpendicular. Lo mejor es que las ventanas queden a un lado del mueble del televisor por la incidencia de la luz, aunque siempre se puede tamizar con estores de screen que evitan brillos.

Puedes elegir un mueble modular para la composición principal o uno exento para los audiovisuales, tipo bancada y completar el estar con otros muebles como una librería en otra pared. El uso de alfombras es puramente decorativo ya que, como hemos dicho, la propia disposición en L delimita cada ambiente.

En cuanto a las mesas de centro las de diseño redondo son apropiadas para romper paralelismos que se crean inevitablemente entre las paredes, los muebles y los sofás. Son ligeras y no saturan las zonas de paso. En los salones en L más amplios sí se pueden colocar diseños redondos más amplios hasta de 80-90 cm como mesas cuadradas o rectangulares.

El comedor cuando la planta tiene forma de L

El espacio de comedor será más o menos amplio según dimensiones del salón. Hay salones en L con zonas de comedor que permiten colocar una mesa rectangular extensible y otros fija de 2 m de largo. Las cuadradas son las menos recomendables para salones en L. Encaja mejor un diseño rectangular, más estrecho que largo, como la planta. Las mesas redondas y ovaladas también son una buena opción. Las primeras para comedores pequeños y las ovaladas cuando no hay problemas de espacio. Las líneas curvas rompen la linealidad de la planta.

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Zonas extra que se ganan en un salón en L

Ocurre muchas veces que las plantas en L permiten crear rincones extra como una zona de lectura, un espacio de trabajo o un rincón de juegos. El comedor y el salón se organizan con los muebles que quieres y ves que queda un hueco algo más retirado o vacío. Es ahí donde tienes que pensar qué espacio te vendría bien y “llenar” así el hueco.

Si el salón es pequeño, puedes incluso prescindir de un ambiente, suele ser el comedor, y crear un salón en la parte más amplia y reservar la parte pequeña de la L para una zona de trabajo. Esto se suele hacer cuando por ejemplo se cuenta con un comedor en la cocina. Así el área de estar queda espacioso y se resuelve la necesidad de crear una oficina en casa.

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Primera opción: un salón en L con estar preservado de miradas

En este salón la parte más amplia es la que quede justo nada más acceder. Aquí se ha resuelto con una zona de lectura con librería alta y una butaca. Junto a la ventana se ubica el comedor con una mesa amplia, perfecta si haces muchas reuniones en casa, y la zona más preservada de la entrada la ocupa el salón. Se podría ubicar el estar junto a la entrada si desde el recibidor no se ve directamente el estar. En ese caso habría que enfrentar los sofás y colocar el mueble de los audiovisuales en la pared larga sin ventanas. La zona estrecha de la L sería para el comedor.

Segunda opción: un salón en L pequeño

Aquí la zona de estar ocupa el espacio más amplio mientras que el comedor queda junto a la puerta de entrada al salón, que, en general, no es demasiado grande. Se ha elegido un sofá sin reposabrazos para que resultara más ligero, enfrentado al mueble de los audiovisuales. Una butaca completa la zona de asientos y sirve de unión, al mismo tiempo, con el espacio que ocupa la gran librería.

Tercera opción: una planta en L con una zona casi cuadrada

En este ejemplo de salón en L la zona de estar ocupa la parte más cuadrada. Aquí se podría colocar dos sofás enfrentados o, como aquí, un sofá y butacas o sillones. La parte más pequeña, junto a la entrada, la ocupa el comedor con una mesa redonda. Otra opción de distribución sería colocar un sofá rinconera o con chaise longue pegado a la ventana que queda justo detrás de las butacas en el plano y el ueble de los audiovisuales enfrentado.

Cuarta opción: una L muy regular

En este caso el salón tiene una planta con forma de L pero de dimensiones muy parecidas, es decir, no hay una zona más estrecha y alargada (que sería el cuerpo largo de la L) y otra más pequeña. Así se crean dos espacios similares en dimensiones por lo que la decisión de ubicar salón y comedor en una u otra responde al lugar que ocupan entrada y ventanas. En este caso el estar se ha preservado del acceso directo y se amueblado con un sofá de tres plazas, una butaca, un mueble aparador alto junto al sofá y el módulo de los audiovisuales. Una mesa redonda deja las zonas de paso despejadas. El comedor se decora con una mesa rectangular y un mueble auxiliar de apoyo.