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Se trata del baño más saludable: biopiscinas que no utilizan productos químicos porque el agua se depura de manera natural. Los beneficios sobre la salud son evidentes y disfrutar de su estética, un privilegio. Es como tener un pequeño lago privado en el jardín

 

¿Qué es una piscina natural? ¿Es para mí?

Quizá hayas oído hablar de las piscinas naturales o naturalizadas, también conocidas como ecológicas o biopiscinas, pero ¿sabes qué son realmente y cómo funcionan? Es una piscina que su aspecto recuerda más a un lago o charca de agua cristalina en la que te puedes bañar. Se mantiene sin necesidad de productos químicos porque se forma un ecosistema con plantas que depuran el agua (también pueden ayudar los peces).

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Cualquiera puede tener una piscina natural en su jardín y disfrutarla tanto como zona de baño como decorativa como estanque o todo a la vez. Eso sí, debes saber que hay que calcular las personas que se bañarán en una piscina natural porque de ello depende el número de peces y plantas que se colocan.

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Al fin una piscina ecológica

Las biopiscinas son ecológicas y saludables para la salud pero también se ahorra con ellas. No tendrás que invertir en productos depuradores del agua y esto lo notarás en el bolsillo. Además, al no usar esos productos químicos no solo respetas más el ecosistema sino que la piel durante el baño no siente la abrasión de los mismos.

 

Las plantas son la alternativa al cloro, de manera que estas piscinas naturales depuran y purifican el agua de una forma parecida a como actúa la naturaleza en sí misma (oxigenan y eliminan los nutrientes que hacen que se propaguen las algas y otros microorganismos). Son las plantas acuáticas, gravas y microorganismos los que crean el proceso, totalmente respetuoso con el medio ambiente. Además, consume menos energía -son un 40% más eficientes respecto al gasto de una convencional- y necesita menor mantenimiento que una piscina convencional.

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Se integran en el jardín al 100%

Las piscinas naturales se integran perfectamente en el entorno, como quieras y adaptadas en forma al terreno. Se trata de recrear un espacio que recuerde a bañarse en un lugar natural. Sin embargo, también se pueden diseñar con un aspecto similar a las piscinas convencionales pero con los beneficios de este sistema de baño. Así se da respuesta a las personas que quieren un diseño tipo alberca o piscina más minimalista con un vaso delimitado y rodeado, por ejemplo, de un suelo de madera o cemento pulido.

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Ventajas de este tipo de piscinas

Entre las ventajas está la de disfrutar de un baño como si estuvieras en un lago natural. También importante la del cuidado de la salud porque el agua está libre de productos químicos (para todos es beneficioso pero imagina las personas con alergias y reacciones cutáneas). No contamina y se ahorra, como hemos indicado, en productos depuradores.

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Una biopiscina necesita plantas para mantenerse

Las plantas son las encargadas de depurar el agua porque absorben con sus raíces los nutrientes, al tiempo que la oxigenan. Si hablamos de datos algo más técnicos -recordando las clases de ciencias naturales que dimos en el pasado-, los expertos en piscinas naturales nos explican que a través de la fotosíntesis de las plantas mantienen los parámetros CO2-02 en los niveles correctos. Así el ph del agua también se mantiene en el nivel adecuado.

 

Según la calidad del agua de la localidad donde se vaya a instalar una piscina ecológica, se usan unas variedades de plantas u otras. Estas serán acuáticas -sumergidas en la piscina- o de ribera -en los márgenes de la piscina-. En una instalación se trabaja con 15 especies de plantas diferentes, que finalmente se deciden en función de las características de la zona. Los expertos te aconsejarán.

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Divididas en dos zonas

Toda piscina natural o biopiscina tiene dos zonas: una dedicada al baño en sí que puede ser plana o con distintas profundidades y otra de regeneración. Entre cada zona se crea un muro de división y el proceso es que el agua recircula mediante bombas: el agua del vaso dedicado al baño pasa al de las plantas. La depuración se hace a través de los filtros de gravas con plantas que se instalan. Se necesitan mínimo 25 metros cuadrados de superficie y 2,2 metros de profundidad para que funcione correctamente la depuración.

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El mantenimiento de una piscina natural

Lógicamente requiere unos cuidados mínimos. En primavera y otoño los básicos. En verano hay que hacer tareas una vez a la semana ya que será cuando más se use. Y en invierno cuidarla para que esté lista en el buen tiempo (pero nunca se cubre porque las plantas son seres vivos). Ten en cuenta que como ecosistema que se forma, no descansa nunca. De esta manera también es posible usarla todo el año con comodidad, si el clima de la ciudad en la que se instala lo permite. Al tratarse de plantas, hay que podarlas en algunas épocas del año.  

 

Como en una piscina convencional o artificial, hay que retirar hojas de la superficie y limpiar las cestas de los skimmers (elemento de filtración que hay en todas las piscinas). Con un limpiafondos específico se retira el exceso de sedimentos del fondo.

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Materiales naturales para construir una biopiscina

Todos los materiales que se usan en la construcción de una piscina ecológica son naturales. Según la empresa por la que te decidas para crear una en tu jardín, los sistemas constructivos serán diferentes en función, sobre todo, del estilo final elegido. La más natural, es una excavación de morfología natural impermeabilizada. Las más modernas o minimalistas tienen un vaso definido construido como un bloque.

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Como bañarse en un lago natural

La sensación de bañarse en una piscina ecológica es como hacerlo en un lago, río o charca natural. Si además hay peces que ayuden a la depuración, la sensación de naturalidad es aún mayor. Piensa que el tamaño de la piscina que crees está en función de las dimensiones de tu terreno, teniendo en cuenta el espacio mínimo que ya hemos indicado que hay que respetar por la construcción de las dos zonas. Además, puedes crear una zona de acceso con escaleras o hacerlo de manera progresiva más natural. ¡Puedes decidir prácticamente cualquier detalle"

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Siempre en constante cambio

Si finalmente te decides por crear una piscina natural en tu jardín para disfrutar de un baño saludable en verano, piensa que se trata de un conjunto vivo que cambia igual que la naturaleza con las estaciones del año. Las plantas brotan en primavera y se aletargan en otoño e invierno.
 

Más información:

Algunas de las empresas especializadasen la construcción de este tipo de piscinas son Piscinas Naturales (www.piscinasnaturales.es), Aragrup (www.aragrup.es), BioNova Piscinas Naturales (www.bionovapiscinasnaturales.com), Piscinas Ecológicas (www.piscinasecologicas.com) o Projects Daigua (www.projectesdaigua.com), entre otras.  

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