Diseño moderno, muebles eclécticos y otras piezas originales que personalizan. Así transcurre el interiorismo de este proyecto creado por el estudio Nicole Fuller Interiors, donde el jardín, el porche y la piscina son la guinda de una casa diez.
Una casa de interiores relajados y exteriores para disfrutar
Viajamos hasta East Hamton en Nueva York para descubrir este proyecto del estudio de interiores Nicole Fuller Interiors: una majestuosa casa con espacios interiores muy luminosos y confortables, decorados en un estilo contemporáneo al que no le faltan detalles personales; y exteriores que permiten disfrutar del aire libre con jardines, porche y piscina.
Toda la casa está planificada a medida y realizada desde cero por el estudio en colaboración con el arquitecto encargado. La repetición de elementos estructurales en color negro -como la carpintería de las ventanas- pone una nota de contraste en un conjunto en el que predominan los tonos claros y luminosos. Así es como se logra ese aire contemporáneo tan atractivo.
El toque especial de cada ambiente lo ponen muebles de diseño vintage o customizados. Piezas que personalizan las estancias y que destacan claramente sobre el resto pero, al tiempo, encajan en el conjunto.
En la zona de estar, la chimenea revestida en mármol Travertino sobresale entre las cristaleras que permiten disfrutar de las vistas al jardín y a la piscina. Todo se ha decorado en tonos neutros para lograr una atmósfera sosegada, que invitase al relax. Solo se han escogido unos pocos muebles para este ambiente -como la mesa de centro o auxiliar o la ligera estantería negra adosada a la pared-, cediendo todo el protagonismo a los textiles: un gran sofá de tapicería en tono arena con cojines que mezclan tejidos y dan riqueza con sus acabados y tramas y la gran alfombra tejida que marca el espacio. Sin estridencias ni notas sobresalientes: la unidad es la seña de identidad del salón.
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El salón comunica con la cocina y el comedor, dos ambientes ubicados en un extremo de la planta, aunque perfectamente delimitados. Detrás del sofá, que marca con su diseño en L la transición entre los espacios, se ha ubicado una ligera consola. Desde el comedor, un espacio funcional amueblado con una mesa rectangular y varias sillas, se accede al porche, que es una extensión del interior. Toda la planta cuenta con un suelo en madera lavada y blanqueada que solo cambia en el espacio que ocupa la cocina, donde se ha buscado el contraste.
En la cocina se ha optado por muebles en color blanco con mobiliario de frentes lisos. Un diseño moderno y ecléctico al mismo tiempo, que se adapta bien al conjunto. Cuenta con muebles adosados a las paredes en forma de L y una gran isla con muebles de almacén y superficie de trabajo. La encimera en mármol blanco y el frente de la zona de cocción en piedra blanca son las únicas notas que rompen “discretamente” la sencillez del diseño.
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Aquí se aprecia un detalle del porche, junto a la piscina y comunicado directamente con el interior de la casa a través de un amplio ventanal de paneles correderos. Al fondo, detrás de los muebles que decoran el porche a modo de zona de estar exterior, se aprecia la zona de la barbacoa. Y a la derecha una pequeña casita de la piscina. El porche se crea por un saliente de la construcción que prolonga en una terraza en el primer piso, creando una zona techada en el primer nivel.
El porche es un espacio que amplía los metros útiles de la vivienda. Se ha concebido como un salón exterior que disfruta de las vistas del entorno. Se decora con un sofá en madera lavada y blanqueada y un par de butacas trenzadas. La mesa de centro pone el contraste con su diseño de línea industrial (es una pieza en metal oscuro con remaches). Y en el centro, una chimenea que se prolonga en la terraza de la primera planta.
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Alrededor de la piscina, una zona revestida con baldosas que simula cemento facilita el paso hacia el interior a la hora del baño. Dentro del vaso rectangular, un espacio delimitado como jacuzzi crea dos zonas de uso y baño diferenciadas. Los árboles que rodean la casa son la mejor solución de ocultación para mantener la privacidad de la casa, principalmente cuando se hace uso de la zona exterior.
En el interior, la escalera es un elemento más decorativo en la zona de día. Guarda relación en su diseño con los materiales utilizados en la casa: barandillas en metal negro, como la carpintería exterior; y madera suave, en la línea de los tonos predominantes.
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Ya en el primer piso, el dormitorio principal se decora en tonos luminosos, con predominio de colores blancos y discretas pinceladas en azul lavado. Son las piezas vintage las que personalizan y dan ese aire especial y veraniego que tiene esta estancia. Una cómoda de madera envejecida, un precioso sillón trenzado en fibra en azulón índigo y una mesita auxiliar en dorado envejecido y de pie contorneado. El resto de la decoración se puede decir que es de básicos y, sin embargo, el resultado es perfecto y equilibrado.
Por el ventanal se accede a una amplísima terraza, que es la que da forma al techado del porche en la planta baja. Precisamente un maxi chimenea continua permite que tanto la terraza como el porche cuenten con este elemento para crear un salón exterior al abrigo del fuego.
Este dormitorio cuenta con un baño integrado en el que destacan los destellos metalizados de los revestimientos de pared de la zona del lavabo y de la ducha. En el suelo, un gresite grande en tonos blancos y grises, a juego con la encimera del mueble bajolavabo en mármol blanco con un discreto veteado grisáceo y que integra los lavabos.
El otro baño de este nivel es un espacio completo, concebido como un spa, donde no hay una nota que destaque sobre otra en la elección de la paleta cromática y, sin embargo, está repleto de matices y texturas gracias al uso de varios revestimientos. En el suelo una baldosa rectangular en mármol, mini azulejos en la zona de la ducha, gresite en el frente del lavabo y una encimera en mármol gris veteado que integra los dos lavabos. El mueble bajolabavo es una pieza a medida en blanco de frentes lisos que deja despejado el suelo. La ducha doble es espaciosa y queda integrada perfectamente gracias a la continuidad visual que logra la mampara transparente. Para los momentos de relax en los que no hay prisa, una bañera exenta para disfrutar de un placentero baño.
El dormitorio infantil también se encuentra en la primera planta y aquí el color hace su aparición con pinceladas vibrantes en rosa, amarillo, azul y verde. En lugar de una mesita de noche, entre las dos camas, se ha elegido un mueble aparador con puertas y decorado con franjas coloridas, en combinación con el diseño multicolor de la alfombra. Sobre ropa de cama en blanco destacan los cojines decorados con animales. En la pared principal, varias figuras a modo de trofeos, también de animales.
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En la planta baja se encuentra el tercer dormitorio de la casa con acceso directo al exterior a través de un amplio ventanal. De nuevo la sencillez y neutralidad es la nota destacable de la decoración, toda en tonos neutros con discretas notas en un suave azul aguamarina. Si hay un elemento que acapara miradas y que pone ese guiño retro que se repite en toda la casa, es la lámpara de techo de brazos metalizados con globos de cristal blanco.
Este baño, aunque de idéntica distribución al del nivel superior, abandona los blancos y grises para decorarse en gris y marrón, también combinando diferentes revestimientos, con lavabo doble, cabina de ducha y bañera exenta.