Los vinilos, los papeles pintados, la pintura de efecto tiza o chalk paint… actualmente contamos con cientos de opciones para dar un toque personal a la decoración de nuestro hogar sin tener que gastar demasiado. Un variado catálogo en el que no falta tampoco la pintura de pizarra, una solución que combina tendencia con practicidad y que tiene muchas más aplicaciones de las que, a priori, imaginas. No hay estancia de la casa que se le resista y el resultado es, además, muy divertido. Lienzos improvisados como el de este ejemplo, en el que se ha pintado uno de los lados de una columna de la cocina, integrando en el espacio un elemento del que no se estaba haciendo uso