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¿Cómo planificar la reunión, fiesta o evento en casa?

“La clave está en que sea apetecible, en ponerle ilusión y planificarlo con tiempo suficiente. Abrir las puertas de tu casa siempre tiene que ser un plan perfecto. No hay que esperar una ocasión,  el 'porque sí', gusta mucho más”, explica Sonia Sánchez, de la empresa de organización de eventos Cayetana en Rosa.

 

Lo primero que debemos tener en cuenta es el espacio del que disponemos porque en función de eso podremos reunir a más o menos personas. Se trata de que haya espacio suficiente para no sentirse agobiado. Queda muy mal no tener hueco en una mesa o que un salón o jardín esté atiborrado. “A los invitados les debe apetecer sentarse a la mesa, tienen que tener un hueco suficiente para moverse (calcula aproximadamente 60 cm por comensal) y poder disfrutar de la velada”. Y si no tienes una mesa grande, Sonia propone “adquirir un tablero que tengas guardado y que uses cuando necesites. Solo debes tener un mantel adecuado en medidas para cubrirlo”. ¡Nadie sabrá que no es una mesa convencional!

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La invitación que mandarás para tu fiesta

“Tiene que ser especial y denotar lo apetecible que es para ti recibir invitados en tu casa. Si hay tiempo suficiente, envía una invitación personalizada sobre el tema de la celebración. Si no lo hay, una invitación digital es práctica y socialmente aceptada”, matiza la experta wedding planner.

 

Pide que te confirmen cuántas personas asistirán antes de una fecha para que te dé tiempo a organizarte con la comida y la bebida. Además, en la invitación debe aparecer el día del evento o reunión, la hora a la que esperas a los invitados y el teléfono o modo de confirmación. También, si tienes alguna cuestión que transmitirles como que acudan en calzado cómodo porque la fiesta será en el jardín o si deben traer algún elemento o look concreto.

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El estilo de la fiesta

Define qué estilo quieres darle a la reunión. “En función de ello y del tipo de celebración podemos montar una mesa tradicional con vajillas tipo Limoges, Vista Alegre o Sagardelos o por el contrario súper actual, introduciendo colores y materiales de mucha tendencia, si la celebración tiene un carácter más informal”, aclara Sonia.

 

Para una celebración en primavera o verano, las vajillas de melamina son perfectas, atractivas, con muchas posibilidades de combinación por sus colores, formas y material. Son duraderas y su precio es asequible. La fórmula 'liso + estampado + liso' va perfecta a la hora de combinar platos. “Mi consejo, si te gusta recibir en casa y ser la anfitriona perfecta, es que te hagas con una vajilla en tonos lisos y neutros, que no pierde actualidad, reemplazando piezas que permitan combinarla con otras de más tendencia que vayas adquiriendo”.

 

Si vamos a utilizar algún color que no sean los neutros, la gama de los azules y verdes son sinónimo de energía, frescura y optimismo. Los amarillos aportan vitalidad y luz y los rosas, delicadeza.

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Una reunión sentados a la mesa

Si vas a preparar una comida o cena con todos los invitados sentados a una mesa (es decir, has descartado la opción más informal tipo buffet), entonces el protocolo marca que el invitado de honor, de mayor edad o rango social, se debe sentar a la derecha de la anfitriona. La invitada de honor, de mayor edad o mayor rango social, se sentará a la derecha del anfitrión. Puedes mantener este criterio o no, según te apetezca o el tipo de evento que prepares. Pero lo que siempre funciona es alternar a los invitados, es decir, sentar hombre-mujer-hombre-mujer y así hasta completar la mesa.

 

Aquí también has de ser lista y precavida y distribuir los asientos teniendo en cuenta la afinidad entre los comensales porque esto te asegurará un buen ambiente durante toda la velada.

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¿Cómo vestir la mesa: con o sin mantel?

Existen las dos opciones: cubrir la mesa con un mantel impecablemente planchado o dejar a la vista la mesa porque no se estropea. Esta última. opción es tendencia total.

 

Si optas por una mesa con mantel, “un básico liso de tejidos naturales (el lino es perfecto) y colores neutros que armonicen con todo es una opción segura que marida perfectamente con una vajilla en colores neutros, lisa de colores llamativos o estampada”, propone Sonia. Además, siempre puedes añadir encima individuales o caminos de mesa. Y en el caso de que no quieras usar un mantel, “monta con mucho mimo cada servicio, bien en camino de mesa para cada dos (enfrentados) o individualmente con su mantelito y a continuación, todo lo demás. Bajo plato, plato llano, plato hondo…. lo que sea que vayamos a utilizar por el tipo de menú que hayamos elegido. También en la línea de la celebración, más formal o informal”, remata la experta en protocolo.

 

Y en cuanto a las servilletas, en un evento especial, recurre a las de tela. Las de papel están permitidas solo si son de muy buena calidad como las de lino reutilizables. “Especial cuidado en la elección, siempre en sintonía con la mantelería y vajilla elegidas. Se puede jugar con colores y estampados, pero sin estridencias”. Si te preguntas dónde colocarlas, hay varias opciones: está permitico colocarlas sobre los platos o junto a ellos, pero olvida composiciones estrambóticas de servilletas dentro de copas.

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El menaje: vajilla, cristalería y cubertería

Cuida la elección de las piezas. Según el estilo que quieras conseguir puedes colocar en la mesa toda la vajilla y cristalería del mismo modelo o mezclar y alternar para un resultado más vistoso e informal. Lo más importante es combinar bien colores y estampados y poner todas las piezas necesarias, tampoco más si no se van a usar. Es decir, no lleves a la mesa cubiertos de pescado si no vas a servirlo en el menú. Usa bajoplato porque da mucha presencia y viste la mesa.

 

Cuenta con vasos para el agua y copas de tamaño intermedio para servir vino tinto o vino blanco indistintamente. Puedes colocar en la mesa copas para cava desde el principio o traerlas cuando llegue el momento de hacer un brindis.

 

Y en cuanto a los cubiertos se colocan cuchara, cuchillo y tenedor, así como cucharilla de postre (básicos). Como marca el protocolo, el cuchillo queda a la derecha del plato y a su lado (exterior) la cuchara sopera. El tenedor a la izquierda del plato. La cucharilla de postre en oblicuo por encima del plato. Si incorporas varios tenedores o cuchillos, se sitúan en orden de fuera hacia dentro del plato según el turno de uso.

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La decoración de la mesa: las flores

Una vez que tienes la mesa montada, debes colocar los arreglos florales. Es importante que estén en consonancia con el estilo que le hayas dado a la mesa, pero es fundamental que decoren sin molestar. Es decir, evita composiciones muy altas que entorpezcan la visión entre comensales. Este tipo de arreglos es preferible usarlos en mesas tipo buffet para decorar, donde no molestan.

 

Pero no son el único recurso deco. También decora con otros objetos, pequeñas figuras, adornos de papelería, marca sitios, apoya cubiertos… Sé creativa y busca por los cajones detalles que tengas y que puedas recuperar.

 

Un truco de Cayetana en Rosa para decorar la mesa es que si no hay demasiado espacio, “no te empeñes en colocar algo grande. Bastan con varias velas de vaso y guirnaldas de lucecitas led por toda la mesa de manera que no entorpezcan,  esto le dará un aire chic y acogedor”.

8/12 © Cayetana en Rosa

Otros detalles que llamarán la atención de los invitados

Colocar marca sitios es uno de esos detalles de anfitriona perfecta. “Cada nota por pequeña que nos parezca a nosotros, le hará mucha ilusión a los invitados. En definitiva, se trata de marcar de alguna manera la diferencia a la hora de recibir en nuestras casas”, añade Sonia.

9/12 © Salvador Bachiller

Una fiesta con mesa tipo 'buffet'

Siempre es un acierto contar con una mesa de este tipo. Resulta práctica, cada invitado puede acercarse a servirse, es informal, crea buen ambiente… “Son muy dinámicas y resultan muy atractivas si logramos una buena disposición (diferentes alturas, vajillas, elementos decorativos, flores, velas…)”.

 

Ten en cuenta que aunque quieras montar una reunión de este tipo, de pie, siempre debes tener previstos asientos. Pueden ser sillas, cojines en el suelo en el jardín, sillones, pufs o taburetes.

 

Lo más positivo de una reunión así, es que como anfitriona perfecta, si lo planificas bien, podrás disfrutar de la velada y hablar con unos y otros mientras todo está al alcance de cualquiera. Los invitados se relacionan más.

 

Es importante que en este tipo de mesas o celebraciones. escojas bien el menú. Los platos fríos triunfan porque si alguna receta es caliente deberás pensar en dónde servirla para que se mantenga. Y ya sabes que puedes preparar todo tú, contratar algún catering o encargar la comida, recogerla y así no tener que meterte en la cocina.

 

Lo ideal es separar la comida de la bebida. Es decir, preparar dos mesas o una con dos zonas diferenciadas. También debería ser específico el lugar que ocupen los postres y dulces, siempre que el espacio lo permita.

10/12 © Vista Alegre

Se siente pero no se ve: el olor de tu fiesta

“Su elección es fundamental. Hay una gran variedad de fragancias florales frescas, especiadas, amaderadas… la elección identificará el ambiente y el momento y, sin duda, a la anfitriona y a su casa, que quedarán ligadas a ese olor”, nos revela Sonia. Sin duda, todos hemos sentido en ocasiones como un aroma u olor nos traía recuerdos y de eso se trata precisamente. De lograr que todos los detalles sean perfectos. Puedes recurrir a las flores pero también a ambientadores, velas con olores exclusivos, difusores de varillas de cerámica… No escojas un aroma demasiado intenso que pueda resultar fuerte para algunas personas. Es preferible que sea sutil.

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11/12 © Raplh Lauren Home

La música de la anfitriona perfecta

No tiene nada que ver una reunión en la que se escucha música de ambiente a una sin ella. La anfitriona perfecta tiene en cuenta este detalle a la hora de organizar una velada en su casa. El tipo de música, como nos explica Sonia, deberá estar relacionada con el motivo de la celebración. Incluso, puedes pensar en una música de ambiente para el momento en el que llegan los invitados, otra para la cena y una más para el momento de charla posterior. ¡Toma nota!

 

En el momento de la recepción de invitados, la música debe estar a un volumen perceptible, pero que permita saludar y conversar de forma fluida. El estilo chill out puede resultar la elección más adecuada, sin olvidar temas de jazz funk (Sakatak) e incluso soul (SADE) o new age (Enya).

 

Durante la comida o cena en la mesa, si se apuesta por contar con música de fondo, el tono debe ser casi imperceptible, apostando por ritmos suaves y armonizando ritmos actuales con algunos más clásicos (big band-blues), como Sinatra o Santana, e incluso Vangelis. En todo caso, la música instrumental de piano y boleros de fondo, siempre resulta agradable de escuchar.

 

Prepara una o varias listas de reproducción con tiempo y tenlas preparadas en tu dispositivo móvil para lanzarlas vía Bluetooth a un altavoz o, si eres una nostálgica, deja que los vinilos llenen de acordes tu reunión.

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Y por último: el 'look' de la anfitriona perfecta

“La forma en que nos vestiremos en nuestro evento debe ser cuidada y en sintonía con el tipo de celebración. No pienso que por mucha confianza que se tenga valga ponerse cualquier cosa”, explica Sonia, aquí en la foto con un look informal, posando en Hacienda Zorita Wine Hotel & Spa, desde donde nos atendió para darnos todas las claves para ser la anfitriona perfecta.

 

La ropa que escojas puede ser sencilla y cómoda (no te ciñas al protocolo), pero si pensamos en la elección se notará que nos hemos preparado especialmente para la ocasión. Una velada perfecta, es la suma de muchos detalles.

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