Así es el armario ropero perfecto para ti

Cuando conoces las claves deco imprescindibles, aciertas al elegir el armario idóneo para ti y tu ropa. Medidas, distribución interior, materiales y más. La interiorista Bárbara Siegfried nos desvela todos los trucos de profesional.

Primera pregunta: ¿qué vas a guardar en el armario?

Sin duda es la pregunta a la que debes responder en primer lugar, antes de elegir armario. El contenido determina el tipo de armario, medidas y, sobre todo, la distribución interior.

“No todos los armarios son iguales, depende de lo que vayas a almacenar; ropa de mujer, hombre, niños; abrigos, ropa de verano, de invierno, accesorios, maletas…”, indica Bárbara Siegrfied, de Siegfried Interiorismo.

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El lugar idóneo para colocar el armario

A veces el armario cuenta ya con una ubicación concreta en la casa, pero en otras ocasiones -en el caso de una reforma o de los armarios exentos- es posible elegir dónde colocarás el armario. Según su uso y lo que vayas a guardar el armario puede ir en una estancia u otra. Por ejemplo, como explica Bárbara, “si guardas abrigos de temporada, ubícalo en la entrada; si es ropa de cama o de hogar, en el cuarto de la plancha; y si se trata de ropa de temporada, en el vestidor”.

El diseño del frente del armario

“El diseño del armario por fuera, es decir, lo que se ve, debe ir en línea con el estilo del resto de la vivienda o de la estancia. Hay infinidad de materiales y diseños, todo depende de tu gusto personal: puertas lisas o con dibujo, en colores a tono con el resto de la decoración, puertas de hierro y cristal, con frentes empapelados o entelados, con cuarterones de espejo que multiplican la luz y el espacio, puertas recuperadas de la vivienda o de derribo, cristal lacado a gusto del cliente…. ¡Y no hay que olvidarse de los tiradores!"

Ten en cuenta que cuanto más lisos, más sensación de amplitud logras porque las puertas del armario llenarán menos visualmente (como en este dormitorio decorado por Natalia Zubizarreta Interiorismo).

El tipo de puertas del armario

A la hora de elegir el tipo de apertura de las puertas del armario debes pensar si tienes delante espacio suficiente para un diseño abatible o si hay muebles que dificulten la apertura. En tal caso sería preferible contar con puertas correderas o en acordeón (como las de esta imagen de la firma Schmidt).

También piensa en el tamaño de las puertas. Las abatibles no deben superar los 50-65 cm por hoja o puerta para que no se descuelguen con el tiempo y su propio peso. Las correderas pueden ser mucho más grandes porque van en guías sobre las que se deslizan, desde 60 cm a 150 cm.

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Materiales para el armario

El interior de los armarios suele ser de chapa de madera o melanina, también puede ir pintado, entelado o empapelado. Es importante, sobre todo, cuidar el interior del armario cuando estos van sin puertas, tipo vestidor abierto. Las melaninas tienen muchos acabados posibles para que escojas el que más te apetezca. No siempre el interior tiene que ser del mismo color que las puertas, puedes cambiar. Bárbara nos da un consejo: “el papel pintado para la trasera de los armarios vistos aporta un plus de originalidad y decoración”.

En cuanto a las puertas, como ya ha comentado Bárbara, hay diferentes materiales que también hacen que varíe el precio. Desde puertas de DM lacadas o revestidas con melanina o chapa de madera natural, puertas de madera maciza, de hierro, con espejos, con cristal… Para decidir guíate por tus gustos, el estilo que quieras conseguir y del presupuesto que tengas. “Para los armarios con puertas, hoy en día existen en el mercado múltiples acabados que proporcionan calidez a los interiores, como por ejemplo el acabado efecto lino”, aconseja la interiorista.

Eso sí, no escatimes en herrajes. Las bisagras, guías y sistemas de apertura son los que harán que el armario tenga una larga vida y aguante bien cada apertura y cierre.

¿Cuándo prescindir de puertas en un armario?

Bárbara recomienda eliminar las puertas de un armario “cuando el usuario sea ordenado, pues ver un armario desordenado dará la sensación de desorden general. También me gusta prescindir de puertas en armarios en proyectos de casas ubicadas junto al mar, pues el salitre y la humedad tienden a dilatar la madera y a oxidar los herrajes, por lo que las puertas en madera tienen mala vejez en zonas de costa. Para estos casos, si no se quiere tener armarios a la vista, se puede instalar una barra con cortinas en algodón, solución ligera, bonita, fácilmente mantenible y muy económica”.

La distribución interior del armario ropero

Cuando se trata de distribuir el armario que usarán personas adultas hay una serie de medidas estándar que verás a continuación, pero lo más importante para saber cuánto espacio dejar para cada tipo de prenda es analizar precisamente qué ropa tienes. Es decir, no estará igual distribuido un armario de una persona que no use trajes de chaqueta en su día a día que una que vaya a trabajar con ellos. Las personas que usan mucha ropa deportiva, por ejemplo, no necesitan tanto espacio de barra para colgar la ropa ya que la mayoría de estas prendas se dobla y guarda en estantes o cajones. Así que la primera tarea es pensar qué tipo de ropa usas (¿más pantalones? ¿Vestidos largos?)

Los zapatos deben ir en cajas o en un zapatero en la zona inferior del armario (en zapateros extraíbles o no) cuando no se tiene un módulo específico para ellos. La zona central del armario es la más cómoda así que en ella debes organizar lo que más uses. Los cajones también deben quedar a una altura media. Las barras pueden ser más altas, incluso, las hay abatibles para aprovechar las zonas altas de los armarios. El maletero queda cerca del techo y suele aprovecharse para guardar ropa de otra temporada, de poco uso o mantas o edredones. Y si tienes que guardar bolsas de deporte o algún elementos especial en el armario, planifica también un compartimento específico, como aquí se ha hecho con las bolsas de palos de golf, en este interior propuesta de Schmidt.

Las medidas básicas de un armario que debes conocer

Un armario para la ropa debe tener 60 cm de fondo. 50 cm como mínimo. En esta medida cabe una percha aunque la ropa no queda tan holgada. Los armarios de puertas correderas tienen algo más de fondo para que el hueco interior quede de este tamaño, descontando el espacio que ocupan las guías en las que se deslizan las puertas. Lo mismo ocurre con las puertas de apertura tipo acordeón. Así que tenlo en cuenta en el diseño. Las puertas abatibles no restan espacio al interior del armario.

En cuanto al largo, un armario ropero para una persona ha de tener mínimo 1 m de ancho. Pero esto depende del espacio con el que cuentes y de lo que vayas a guardar porque habrá gente que en 1 m de ancho no pueda guardar todo lo que tiene. Quizá sí la ropa de temporada pero necesite otro módulo de 50 cm para zapatos y complementos. Para un armario de niño sí que es suficiente pero para un adulto puede quedarse demasiado justo. Lo ideal es que aproveches el ancho máximo que te permita el espacio. Y en cuanto al alto, en función de la altura del techo puedes hacer que llegue hasta arriba o dejar un hueco, aunque cuando te planteas un armario a medida es preferible llevarlo hasta el techo para aprovechar esos centímetros para guardar y almacenar.

Las medidas interiores del armario

Un consejo: escoge estantes y baldas adaptables en altura para que puedas organizar el interior según cambien tus necesidades con el tiempo. A partir de aquí, y aunque el espacio que dediques a cada tipo de compartimento dependa, como hemos visto, de la cantidad y tipo de ropa que tengas, las medidas básicas son:

- Barras: debes colocarlas a una altura que te sea cómoda para alcanzar las perchas y según la ropa que vayas a colocar para que las prendas no se arruguen. Los vestidos largos necesitan un espacio de 1,30-1,50 m de alto mientras que faldas y pantalones solo 90 cm. Camisas y chaquetas: 1,10 m. Es importante además que cada prenda esté colgada en una percha adecuada, para que no se deforme y para ganar espacio. Por ejemplo, las perchas para pantalones y faldas no “cuelgan” tanto como las de camisas o chaquetas. Son más planas y hace que ganes centímetro en la parte inferior sobre una balda. Una percha de perfil ocupa unos 3 cm aproximadamente. Esta medida te sirve para contar cuántas perchas tienes y saber qué espacio de barra necesitas.

- Pantalonero: recuerda que los pantalones también pueden ir en el accesorio pantalonero extraíble. Toma como referencia una medida de 40 x 60 x 70 cm para instalar un pantalonero y caben 10-12 pantalones, según modelo, al tiempo que se mantienen perfectamente colocados (lo que evita arrugas y marcas).

- Baldas: son buenas para ropa voluminosa como jerséis gruesos y deben estar a 30 cm una de otra. Mucho más hace que las pilas de ropa no sean cómodas (se caerá al sacar una prenda).

- Cajones: pueden ser de poca altura (10 cm) para complementos como cinturones, corbatas, gafas o joyas; o de hasta 25-30 cm para camisetas. La ropa doblada mide de ancho aproximadamente 30-35 cm (calcúlalo para que en una balda entren dos filas o una, sin desperdiciar espacio a los lados).

Cuantas más divisiones tenga un armario más encarece su precio en el caso de los armarios a medida. El acabado más económico es la melanina. Si no tiene puertas, eso que ahorras. Y en cuanto al tipo de puerta, la corredera es ligeramente más económica que la abatible.

Accesorios o complementos que favorecen el orden

“Los accesorios siempre ayudan a optimizar y organizar el espacio, entre mis favoritos destacaría; compartimentos para cinturones, gemelos, relojes; corbateros; cubículos para las bufandas y fulares; compartimentos para la ropa interior, medias y calcetines y el zapatero”, comenta Bárbara Siegfried.

Siempre los accesorios específicos te ayudarán a rentabilizar el espacio y que lo que guardes esté perfectamente localizado y colocado. También puedes añadir perchas en el interior de las puertas abatibles y cajas y cestas en estantes.