Aunque cualquier tipo de piscina nos va a garantizar horas y horas de juegos y de relax, lo cierto es que la arquitectura ha jugado un papel fundamental para actualizar las piscinas y convertirlas en algo más que una pileta con agua: en una fuente de naturaleza, relax y equilibrio estético.
Juega con la línea del horizonte
Una tendencia muy de moda es tratar de eliminar la línea de separación entre el bordillo de la piscina y el final de esta. De tal manera que la piscina tiene forma de C, donde el lado más lejano se funde con el paisaje. En este caso, el resultado es mucho más extraordinario si aquello que tenemos de fondo es el propio mar o el bosque. La sensación de pisar el bordillo de la piscina y notar cómo el agua produce una continuación natural del espacio es un lujo, más allá de la estética, que también es sensorial.
Y lo que no es la piscina
No solo es interesante atender al diseño de la propia piscina, sino que además podemos jugar con muchos otros elementos en la zona exterior, dónde situar los sofás o tumbonas y crear un espacio de relax y descanso a medida de nuestro entorno. Te proponemos un toldo construido a base de listones, que dejan pasar la luz pero que generan una sombra agradable y natural. Si confiamos en el blanco para todo este mobiliario sin duda acertamos, pues no hay mejor maridaje que este color y la piscina para las tardes de sol de disfrute y paz.
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Un secreto en casa
Disponer de una piscina interior no solo está al alcance de casas inmensas. Esta fantástica piscina cubierta es un ejemplo maravilloso de cómo podemos dotar a nuestro hogar de una zona de piscina con un espacio más que válido y un entorno recogido, relajante y muy sugerente. Un pasillo de tablones de madera y una pared de ladrillo de pizarra convierten a este espacio un spa privado dentro de nuestra propia casa. La longitud de la piscina es suficiente para hacer largos individuales y disfrutar de la luz exterior en días soleados. Además, las puertas correderas permitirán que entre el aire fresco cuando sea necesario.
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Agua llena de color
Las piscinas no son solo para el día, por la noche son zonas estupendas para realizar fiestas y reunir a los amigos alrededor de música, conversación y relax. Para hacer que la piscina siga constituyendo el eje de la acción de nuestras reuniones veraniegas podemos adecuar su iluminación interior con leds de colores, y elegir cómo queremos que luzca en función de la temperatura o de nuestro estado de ánimo. Los leds son muy versátiles y pueden hacer que sintamos que la piscina es “nueva” en función de la combinación de colores que elijamos.
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No sólo cuadradas
Las piscinas cuadradas nunca pasarán de moda, e incluso ahora están en tendencia porque las formas simétricas y lineales son un must que vino para quedarse. Sin embargo, las piscinas con formas curvas también son un clásico de refinamiento y elegancia. Este tipo de piscinas se asocian a casas con glamour, con mucha personalidad y que buscan la armonía. No en vano, las formas curvas son las que adquiere la naturaleza en todo su esplendor.
Naturaleza frondosa
Una piscina no es solo un lugar donde nadar, sino que puede representar una absoluta declaración de estilo en cuanto al tipo de arquitectura y de vida que pretendemos vivir. Cuando la piscina se muestra rodeada de vegetación, estamos hablando de una comunión estable y equilibrada entre arquitectura y vida. No olvides dotar a tu piscina, además de plantas, de césped y árboles, de una plataforma de madera sobre la que reposar y colocar las tumbonas. Ahora, respirarás un olor a naturaleza, frondosidad y frescura que te trasladará al relax que necesitas.
Tumbonas esculpidas en mármol
No siempre podemos tener la piscina para nadar. Para gustos están los colores y, en este caso, las formas. Una idea muy interesante es incluir dentro de la propia piscina dos tumbonas de mármol sobre las que podremos descansar sin la sensación de inestabilidad y movimiento contínuo de las colchonetas. Estas tumbonas esculpidas sobre la piscina son un elemento estético muy útil sino no somos fans de la natación, aunque si construimos la piscina en forma de L aun hay espacio para hacer unos largos.
Materiales para el campo
Aunque asociamos las piscinas a la playa, lo cierto es que donde más falta hacen es en entornos de campo y de bosque, donde no es tan fácil darnos un chapuzón. Incluir una piscina en plena naturaleza nos hace incorporar los olores y las texturas de la naturaleza en nuestro baño. De esta forma, podemos recurrir a materiales rústicos para las tumbonas, con un diseño moderno y actual, pero integrándose perfectamente en un ambiente de campo.