Se ha pasado el otoño y el invierno a medio gas, pero cuando llega el buen tiempo, nos acordamos de él y volvemos a pensar en barbacoas, comidas con amigos y fiestas al aire libre. Por eso, antes de nada, es preciso hacerle una puesta a punto y ver qué necesita.
1. Bien limpio
Para que luzca bonito, necesita estar libre de malas hierbas y hojas. Recuerda arrancarlas de raíz, para que no vuelvan a salir o usar un herbicida, para que te ayude en la tarea. También debes podar y recortar los setos (abril y mayo son los meses idóneos para estas tareas), para que crezcan más bonitos.
2. Hora de plantar
Tras unos meses bajo mínimos, es el momento de plantar y devolver el esplendor a tu exterior. Desde arbustos y trepadoras hasta plantas de hoja perenne y anuales. Espera hasta final de mes o primeros de mayo para las petunias y otras especies de temporada.
3. Inspección general
Aunque no podrías vivir sin ellas y con los preciosos muros vegetales que crean, las trepadoras suelen pasar desapercibidas a la hora de la puesta a punto. Pero es importante que revises bien, que ates las ramas que quieres que trepen y compruebes que las celosías están bien y los puntos de sujeción.
4. A pie de tierra
¿Tu césped tiene una calva? Resiembra para que puedas extender tu toalla sobre una ‘alfombra’ tupida y abona, para que parezca un manto verde precioso y mullido, por supuesto. Si quieres un efecto ‘verde rápido’, desde Jardiland recomiendan un fertilizante de latigazo. Recuerda que muchas veces la culpa de que no parezca una bella pradera es culpa del drenaje y que, para estimular el crecimiento y densificar la hierba, debes cortarlo regularmente.
5. Temporada de riego
Revisa el riego automático, por si alguno de los tubos o aspersores se ha deteriorado o está roto, y adecúa la cantidad y los minutos de agua, aumentando paulatinamente, según vayan subiendo las temperaturas. Recuerda que es mucho más fácil para ti y más recomendable para plantas y árboles establecer siempre el mismo horario de riego y hacerlo, preferiblemente a la caída del sol, que es cuando más se aprovecha el agua.
6. Prepara la piscina
Después de unos meses sin uso es preciso limpiar los filtros, revisar que la rejilla, el vaso y otros elementos están en perfecto estado y comprobar la iluminación y las escaleras. No subestimes su poder en el diseño del jardín e intenta siempre que esté integrada con el entorno: “La piscina no es solo un lugar de recreo sino que también constituye una estructura compositiva muy importante. Así, si ponemos un fondo con gresite azul claro conseguiremos dar sensación de frescor y, además, reflejar el firmamento en tonos suaves. Los acabados en madera proporcionan calidez y un aire natural, mientras que los tonos grises son perfectos para conseguir el efecto de agua marina, transparente y limpia”, señala el paisajista Fernando Pozuelo.
7. Luces y acción
Sin ellas, las cenas y las veladas nocturnas no serán lo mismo. Por este motivo, es el momento de comprobar el buen estado en general de la iluminación exterior, cambiar bombillas fundidas, renovar guirnaldas y farolillos y colocar alguna antorcha que cree ambiente y, de paso, ahuyente a los mosquitos.
8. Muebles, a examen
Saca las sillas, las mesas, las tumbonas y las sombrillas y revisa cómo han pasado el invierno. Es el momento de limpiarlas, darles aceite de teca para que la madera vuelva a brillar, repasar si hay alguna rota, comprobar las cremalleras de los cojines, manchas… Después, piensa qué pieza necesitas reponer y empieza a echar un vistazo a los catálogos de exterior. Como estamos en una época de lluvia, mejor que mantengas los cojines y los almohadones guardados, para que no se estropeen antes de tiempo.
9. Macetas en buen estado
Tanto si se trata de una terraza como de un jardín, no olvides que las macetas también existen y que, de vez en cuando, es necesario cambiarlas por deterioro o porque la planta necesita más espacio. Y ya puestas, haz memoria y piensa cuándo cambiaste su sustrato: ¿Más de dos años? Toca hacerlo de nuevo. Un consejo: si quieres evitarte problemas y plantas secas, elige una maceta que incorpore un sistema de riego automático. Y si quieres que tenga un 'plus' de encanto 'deco' opta por un modelo con luz, como esta de Linea Light Group.
10. Pon un huerto
Y apúntate a la lista de famosos (o no), que prefieren comer lo que cultivan ellos mismos. Alejandro Sanz es uno de ellos, incluso llegó a comercializar alguno de sus productos, y no olvides que la mismísima Michelle Obama mandó construir uno cuando llegó a la Casa Blanca. Elige un lugar en el que dé el sol varias horas al día. Al principio, opta por cultivos fáciles, como lechugas o ajos, y procura plantar las semillas más altas detrás, para que no den sombra a las más pequeñas.