Entramos en la mansión minimalista que Orlando Bloom vende en Beverly Hills

El intérprete de ‘El Señor de los anillos’ o ‘Piratas del Caribe’ vende su mansión de Beverly Hills (Los Ángeles, California). Quizás para mudarse a vivir con su prometida a alguna de las casas que la cantante posee en la zona, quizás, como apuntan otros rumores, para comprarse una en común. Distribuida en una sola planta y con más de 370 metros cuadrados, los espacios son abiertos, buscando tanto la conexión con el exterior como entre ellos, ya que el salón, la cocina y el comedor actúan como un mismo ambiente. Destaca la gran zona de estar, situada a ras del suelo, con varios sofás haciendo un rectángulo.

Dicen que una casa dice mucho de sus moradores y esta no es una excepción. Moderna y minimalista, hace de la sencillez más cuidada su mejor baza decorativa. ¿El precio? Casi ocho millones de euros.

Construida a finales de la década de 1950, fue reformada por el arquitecto Miguel Angel Aragonés, que transformó un rancho típico de los años 50 en una residencia de estilo minimalista, con un aire a los hoteles-boutique de Miami Beach. Rodeada por una abundante vegetación, el exterior cuenta con una espectacular piscina y una relajante zona de spa.

El actor adquirió la vivienda en 2017 por poco más de seis millones de euros y mantuvo casi en su totalidad los cambios realizados por el arquitecto mexicano. Para adaptarla a sus necesidades, únicamente actualizó la zona de estar exterior, aumentando el número de bancos y colocando una chimenea, para las noches más frescas.

La cocina, abierta al resto de la casa, apuesta por un mobiliario lacado blanco, que ofrece un acabado brillante, moderno y sofisticado. Para potenciar una atmósfera ‘limpia’ y profesional, los electrodomésticos y la encimera son de acero. Al estar comunicada con el salón y el comedor se ha utilizado el mismo suelo de madera, en tablas anchas, de estética mucho más actual, manteniendo la continuidad visual. 

La mansión de Orlando Bloom en Beverly Hills cuenta con cuatro dormitorios, tres de ellos en suite, y cuatro cuartos de baño. Este dormitorio, junto el salón y la cocina, tiene salida directa al exterior, fomentando tanto la vida fuera de casa, como el placer de levantarte por la mañana tocando casi el agua de la piscina. La decoración de esta habitación eleva a la máxima potencia dos máximas del minimalismo: la limpieza visual y la funcionalidad. El cabecero, que hace las veces de escritorio, es una buena muestra de este estilo.

El dormitorio principal, inundado de luz, cuenta con una zona de spa, que Bloom añadió cuando realizó la compra de la casa. La coqueta terraza, con vistas al océano Pacífico, tiene todo para haber sido durante los cerca de dos años que el actor ha vivido aquí, en su refugio para desconectar entre rodaje y rodaje. La bañera exenta actúa como límite visual entre el exterior y el interior, aportando un plus de encanto al ambiente. 

El blanco se convierte en el protagonista absoluto de este dormitorio, erigiéndose como el mejor representante del estilo minimalista. Este universo ‘white’, que toma paredes, suelos, ropa de cama y mobiliario, adquiere calidez y sensación de hogar, gracias a las texturas y a las telas, por un lado, y al suelo de madera, por otro. Elementos que además disipan cualquier aire monacal, otorgando un toque sofisticado y ‘chic’.

Una pasarela de madera, que comparte diseño con el pavimento de interior, bordea toda la casa, logrando no solo integrar el exterior dentro de casa sino, además, multiplicar los metros cuadrados del interior, ya que, al abrirse las grandes correderas de cristal, desaparecen las barreras entre ambos espacios. Los ventanales están vestidos con cortinas blancas, manteniendo el protagonismo absoluto del ‘white’.

El anuncio de la venta llega tras el anuncio del compromiso del actor con Katy Perry, aunque todavía la pareja no se ha pronunciado sobre si adquirirán una nueva vivienda por la zona, donde la cantante tiene su residencia principal, o estrenarán hogar.