Una casa en el campo con espíritu urbano y estilo contemporáneo

Cuando la belleza y elegancia clásica se alían con la funcionalidad, la sofisticación y el encanto de la modernidad, el resultado es tan espectacular y bien avenido como el que muestra esta mansión de la campiña inglesa. Por algo, ha recibido un galardón en los International Property Award de 2018, uno de los premios más importantes en el sector inmobiliario mundial.

El estilo contemporáneo se expresa a través de un ambientes minimalistas y limpios, materiales artesanales y el toque de calidad y estilo del diseño italiano, con los muebles de Alivar vistiendo las distintas estancias. En el salón, eje vertebral de la vida diaria, nos encanta el mirador junto al gran ventanal con la mesa redonda, que nos recuerda a las típicas camilla, y las dos sillas. Un coqueto espacio que crea un rincón perfecto para un desayuno de domingo o para el momento del té o el café a primera hora de la tarde. 

Construida por Thomas Cubitt en 1850 y con vistas a las colinas de Surrey (a 50 kilómetros de Londres), The Mansion at Sondes Place ha sido restaurada por Twist, añadiendo a su esplendor georgiano un lujoso toque contemporáneo, que, además de hacer la vida diaria más cómoda a sus moradores, se encuadra dentro del diseño del siglo XXI. Su enclave permite vivir en el campo, pero sin renunciar a las comodidades de la ciudad.

Las dimensiones del gran salón se amplían visualmente, gracias a las puertas con cuarterón de cristal, que comunican con la cocina y el recibidor y que, si se mantienen abiertas, aportan mayor profundidad al espacio. Los sofás y reposapiés de Portofino ocupan un lugar central en el ambiente, que la alfombra se encarga de delimitar.

En tonos neutros (gris y beige), las formas esbeltas y sinuosas de los asientos muestran un sofisticado minimalismo, junto a la mesa de centro con sobre de mármol (Poggio de Portofino). Y, por supuesto, no podemos dejar de mirar el techo (uno de los elementos de la casa que más protagonismo tendrá durante este 2019), que eleva su altura hasta los 3,8 metros, y el suelo de madera de roble, colocado en espiga.

Junto al salón, pero en una habitación independiente se encuentra el comedor. Sus puertas permiten integrarlo o dotarlo de intimidad, según la situación. Con el estar comparte estilo decorativo, techo y pavimento, lo que facilita la unión de ambos espacios y la creación de un solo ambiente.

Con chimenea, una gran mesa rectangular con el sobre de mármol es la estrella principal, junto con las cómodas sillas Diva de Alivar (alivar.com) y la gran lámpara de techo. Dos aparadores Side Up de la misma firma ocultan un exclusivo bar con cajones y estantes, poniendo el broche final al conjunto.

Con un moderno estilo (cien por cien ‘made in Italy’), la cocina blanca juega con el minimalismo más funcional, eliminando los tiradores y otros elementos superfluos de las puertas de los muebles. Una gran isla central, acompañada con los taburetes Kiron de Alivar en policarbonato, se erige como la protagonista absoluta del espacio. Apostando por la practicidad, la parte superior se desliza para crear una cómoda barra de desayuno y office de diario. Tres lámparas de techo de cristal refuerzan la iluminación general.

Una escultural escalera nos traslada al primer piso, donde se ubican los dormitorios. Amplio y luminoso, el principal incorpora un agradable rincón de lectura junto al gran ventanal. La cama Arca con cabecero de capitoné y la mesilla de noche Meridien (ambos de Alivar) completan un conjunto lleno de estilo que, al igual que el resto de los espacios de esta mansión campestre, apuesta por la sencillez de líneas y el minimalismo decorativo.

El gris se apodera de las paredes, la ropa de cama, las cortinas y el pavimento de los dormitorios de esta espectacular mansión de Surrey, aportando su toque sofisticado y estiloso. Una gran cama preside la estancia, mientras curiosamente (llevaba un tiempo fuera del circuito decorativo) una moqueta viste los suelos, proporcionando una pisada cálida y confortable.

Los dormitorios son tipo suite e incorporan el cuarto de baño a la habitación, como en este ambiente, donde las puertas correderas permiten la privacidad, según se precise. El gris vuelve a ser el color dominante, aunque por motivos prácticos se sustituye la moqueta por un pavimento porcelánico, mucho más resistente al agua y las manchas. 

En las casas actuales, el cuarto de baño ocupa un lugar relevante en la distribución y decoración de la vivienda. Este con bañera exenta es perfecto para crear una zona de spa, donde descansar y desconectar del estrés diario. La gran ventana es un plus a la hora de crear la atmósfera ideal.

Desde la terraza de la azotea se disfrutan de unas excelentes vistas a la colina de Surrey, mientras se disfruta del sol o se lee un libro en el sillón Fortuna de Alivar de piel de vaca. sin duda, cada detalle de esta mansión demuestra que se puede vivir en el campo, sin perder un ápice de estilo urbano.