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El modelo Grönlid de Ikea, un sofá con módulos (desde 699 euros) que pueden combinarse de diferente manera dependiendo de las necesidades de cada persona, se convierte en la solución perfecta para las familias que necesitan mucho espacio para poder sentarse.

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Las mesas auxiliares y de centro suelen ser una buena opción para conseguir algo de desahogo durante la Navidad. Diseños como las mesas Stockholm 2017 de Ikea (99 euros), elaborada en una combinación de fresno y ratán, permiten conseguirlo mientras aportan un aire elegante al espacio.

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Disfrutar de una película y de un chocolate caliente es uno de los planes más recurrentes en Navidad. Eso sí, mejor hacerlo protegido con una manta como Ingabritta de Ikea (29,99 euros), elaborada en punto de tacto muy suave.

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Tener un espacio en el que poder almacenar la vajilla, las mantas o cualquier otro elemento se vuelve imprescindible en cualquier casa. Si además ayuda a dar un aire más cálido a la estancia como el armario Stockholm 2017, de Ikea (349 euros), mucho mejor.

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Decorar la Navidad con los adornos de siempre -velas, campanas de cristal…- es una opción cada vez más elegida. Stråla, es un candelabro color bronce (24,99 euros), con siete brazos, que funciona con luz led, una peculiaridad que le hace consumir un 85% menos de energía.

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Y Begåvning (14,99 euros), una campana de vidrio en la que se pueden exponer todo tipo de elementos, por ejemplo, una flor blanca o luces de Navidad.

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Para dar un toque de modernidad a la mesa, en lugar de optar por una vajilla de un único tono se pueden combinar piezas de diferentes colores. Las de la imagen, por ejemplo, pertenecen a la Formidabel de Ikea, que ofrece platos y cuencos de diferentes formas, dimensiones y tonos.

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La comodidad de los comensales es otro de los elementos imprescindibles para estas fechas. Una característica de las sillas Volfgang de Ikea (49,99 euros) que, gracias a su asiento cómodo y flexible, permanecer un buen rato en ellas gusta.

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Una luz indirecta y cálida ayuda a crear un ambiente más navideño. Además, diseños como la lámpara de techo Sinnerlig de Ikea (59 euros), un modelo elaborado en bambú, aportan un toque más decorativo.

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