2. Pon los abrigos a buen recaudo
No podemos hacer que los metros de tu casa crezcan, pero sí que saques partido a cada elemento, especialmente en esta época. Por eso, antes de que abrigos y bolsos ‘tomen’ el salón, prepara el recibidor. Si el número de invitados no es muy alto, puede que el perchero de la entrada sea suficiente. Eso sí, complétalo con una silla, un banco o una pieza similar, para dejar el bolso. Si sois muchos, puedes instalar un burro con perchas para tal fin o, en el último caso, destinar una habitación a ropero improvisado. Hang it all de Charles & Ray Eames, en Vitra (vitra.com).