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Una alfombra para el salón

Déjate llevar por tus gustos y mezcla formas y materiales para diferenciar las distintas zonas del salón. El color del suelo es importante en este caso: si es oscuro agradecerá una alfombra en tonos claros que aporte luz. 

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Alfombras de vinilo: perfectas para el comedor

En realidad son ideales para cualquier estancia, pero en el comedor resultan muy sufridas, además de estilosas.

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Una pisada mullida en tu dormitorio

Puede que te guste caminar calzada por la casa, pero seguro que entras y sales de la cama descalza, y poner el pie sobre una superficie mullida y caliente es una sensación de lo más agradable. Elige materiales que lo faciliten, como el algodón y la lana. Elige un diseño a juego con la ropa de cama o con los colores que predominen en la habitación. En cuanto a la limpieza, aspírala con frecuencia para mantener tu dormitorio libre de polvo.

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Y en el dormitorio de los niños

Los niños pasan gran parte de su infancia jugando en el suelo, y una alfombra les permite sentarse en una superficie cómoda que además les aísla del frío. Como seguramente se manchen muy a menudo, puedes buscar una alfombra sintética, que sea resistente y fácil de lavar. Podrás encontrarlas en una gran variedad de colores y texturas. Además, son más económicas, por lo que también son más fácilmente reemplazables.

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