Decoración de interiores: un piso moderno y atrevido, pero con el estilo de un clásico

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

Situado en el barrio de Salamanca de Madrid, este ático, diseñado por la interiorista Inés Benavides (inesbenavides.com), posee el atrevimiento y la frescura de los pisos modernos, pero sin perder el encanto de las viviendas clásicas.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

El arte moderno es una constante en la decoración de este piso madrileño, cuya reforma es obra de Inés Benavides. La carátula del disco 'Celebration' de Madonna, realizada por el artista Mr. Brainwash, refleja muy bien el espíritu de la vivienda.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

El logro de la arquitecta de interiores Inés Benavides en este ático es combinar piezas contemporáneas con otras de estilo clásico y antigüedades. Sobre la chimenea, la obra 'El beso' de Romero Britto.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

Una gran mesa de madera preside el comedor, donde las dos sillas Carlos III de las cabeceras contrastan con las seis sillas Tulip de los lados. La escultural lámpara de techo aporta sofisticación al espacio.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

La cocina de este ático posee una estética depurada, pero es una estancia funcional y cómoda para trabajar. La gran isla azul, cuenta con una encimera a doble altura que crea una zona de barra, ideal para desayunos o comidas informales.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

Inés Benavides ha cuidado al máximo cada detalle, manteniendo ese espíritu juguetón, pero elegante, en todos los espacios. Como en el distribuidor, donde se combina una cómoda gustaviana del siglo XVIII con un 'carré' de Hermès de edición limitada.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

El baño principal es un espacio lleno de encanto, gracias a la bañera exenta, el detalle de la cortina (práctico y sofisticado, al mismo tiempo) y el estor de la ventana. El pavimento es todo un acierto.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

Las texturas y los colores cálidos se apoderan del domitorio principal de esta casa madrileña, propiedad del exfutbolista Julien Escudé y su mujer.

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La casa cuenta con tres habitaciones. En el dormitorio infantil, Inés Benavides, artífice del proyexto, apuesta por el binomio blanco-rojo.

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Moderno, pero con el espíritu de un clásico

La decoración de la terraza ofrece un agradable rincón, donde desconectar de la rutina. Todo un lujo viviendo en la ciudad. Para aprovecharla también en invierno se ha instalado un cerramiento.