Debbie Reynolds y su hija Carrie Fisher han sido, sin duda, dos de las actrices más emblemáticas de Hollywood. El recuerdo y admiración de las protagonistas de ‘Cantando bajo la lluvia’ y Stars Wars’, respectivamente, permanece en la memoria de todos nosotros desde que ambas muriesen en diciembre de 2016, con solo un día de diferencia.
Hoy su recuerdo se hace aún más vivo porque el próximo mes de octubre sale a subasta el imponente rancho que Debbie Reynolds poseía en Creston (California).
Esta subasta incluye la residencia principal, con 'home theater' personalizado, una biblioteca, un gimnasio, una casa de huéspedes, un estudio de arte, granero, un estudio profesional y un set de producción de televisión; además también está prevista la subasta de sus efectos personales, tanto de ella como de su hija Carrie.
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Calidez y armonía es la sensación que brinda el salón familiar, donde los tonos tierra se mezclan en perfecta simbiosis con la sobriedad y la elegancia que aportan los grandes sofás de cuero marrón.
El punto focal de este espacio es la chimenea enmarcada en piedra de granito, también en tonos ocres. Sobre ella, se observa una antigua escopeta de caza y un bello cuadro de estilo cowboy que, en conjunto con los elementos decorativos en hierro forjado, acentúan una decoración rural.
La iluminación está protagonizada por bellas lámparas estilo Tiffany y una escultura de bronce oscuro que termina en una lámpara que añade una luz tenue al espacio. Las grandes alfombras clásicas de los mismos tonos que el resto del salón, delimitan el espacio que invita al relax y al descanso.
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Desde otra perspectiva del salón, con un juego a doble altura, podemos comprobar la pasión de la actriz por la música: tres guitarras eléctricas y dos clásicas presiden la estancia en elegantes vitrinas de madera, así como un piano de cola de la marca Baldwin, una prestigiosa compañía del siglo XIX, cuyo su lema es “Los pianos preferidos de América”.
A lo lejos, podemos vislumbrar una mesa de billar con su correspondiente iluminación, una zona ideal para poder evadirse y disfrutar de la tranquilidad que transmite esta estancia. También era evidente el gusto de Debbie Reynolds por los cuadros, ya que protagonizan gran parte de la sala.
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En esta lujosa estancia, no puede faltar una cuidada y armoniosa escalera. De madera de nogal con los pasamanos del mismo material y detalles de estrellas en hierro forjado, quizá esté indicando que en esa vivienda han convivido dos de las estrellas mundiales más admiradas.
En la parte inferior de la misma, se encuentra un pequeño bar con múltiples botellas de vino y diferentes tipos de copas en sus vidrieras y encimeras. Asimismo, esta zona cuenta con una barra con encimera de granito, acompañada de elegantes butacas de madera de caoba.
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La parte trasera de la residencia tiene mucho encanto. Está enmarcada en una extensa vegetación donde predominan grandes árboles y áreas verdes, con colonias de patos que andan libremente por la propiedad.
En este espacio, uno de los preferidos de las actrices para celebraciones y fiestas familiares, podemos toparnos con una gran tarima de madera con mesas, sillas y tumbonas de mimbre que rodean una pequeña piscina. El lugar está dotado de barbacoa, carrito de palomitas y todo lo necesario para pasar buenos momentos.
Llaman la atención las puertas francesas de la entrada al hogar y, sobre ellas, un precioso balcón típico de las casas americanas.
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Como hemos mencionado en la introducción, el rancho de la actriz, además de su vivienda, cuenta con un set de producción televisivo donde se graban múltiples programas. Aquí podéis ver el ensayo de uno de ellos, llamado ‘Posture System’, un espacio presentado por Roger Fredericks.
Es un espacio amplio donde tienen cabida parte de los técnicos responsables en la producción de un programa, cuatro cámaras fijas, una grúa y diversos focos de iluminación.
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Además de un set de grabación, estas instalaciones cuentan con un estudio de montaje y edición. Junto con diversos monitores y ordenadores, completan la sala varios posters alusivos a la película ‘Transformers’, una colección de llaveros cinematográficos y objetos únicos que tienen que ver con el mundo del cine, como por ejemplo el muñeco Jigsaw, de la saga ‘Saw’, y el coche en miniatura de ‘Regreso al futuro’. Sin duda, un lugar espléndido para los amantes del séptimo arte.
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El despacho de la protagonista de ‘Cantando bajo la lluvia’ posee una muestra de toda su carrera artística. A un lado, se observan carteles de algunas de las películas en las que participó, como ‘Give a girl a Break’ o ‘Say one for me’.
Muy cerca, encontramos un rincón, con iluminación especial, donde se ven algunos de los premios recibidos, incluido un Oscar Honorífico, y un sinfín de placas de reconocimiento que le fueron otorgados a lo largo de su vida.
En el extremo izquierdo, podemos ver una completa biblioteca con sus libros cinematográficos, algunos objetos de colección (que saldrán en venta en la subasta) y fotos familiares. Completa el espacio un gran escritorio de madera de nogal y una mesa de reuniones donde la actriz trataba sus asuntos más importantes.
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