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Son un recurso lleno de fuerza visual, del que muchas veces renunciamos por miedo a que en combinación con otras telas y objetos el resultado sea estridente y poco armonioso. Pero la primavera y el verano son tiempos de valientes. Por eso, queremos convertirlos en los protagonistas de los espacios.
A todo color
Olvídate del minimalismo y de los grises y neutros y sumérgete en el paraíso del color: azules, verdes, rosas, rojos… Son los primeros de esta lista multicolor, donde nadie se queda fuera. Por eso, si no te atreves, empieza por introducir pequeñas pinceladas, como los cojines del sofá, y acostúmbrate a su llamativa visión. Después, será mucho más sencillo.
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‘Flower power’
No sabemos si atraídas por el buen tiempo o por las tendencias de la pasarela, pero lo cierto es que las flores, especialmente en formato XL, se apoderan de las telas de esta temporada. No hay elemento que se les resista (cojines, cortinas, ropa de cama…) ni estancia (dormitorios, salones…) que no se deje seducir por su estilo. En colores llamativos, recreando un jardín, trasladándonos a lugares exóticos o al universo de Laura Ingalls en ‘La casa de la pradera’, se convierten, sin duda, en los motivos preferidos para vestir nuestras estancias. Puedes apostar por el ‘cosy stile’ con flores en colores alegres y un halo romántico o por otro más pop, con colores intensos y originales estampados, que ponen la nota divertida y chic. Lo importante es que la flores lo llenen todo de su espíritu natural, fresco y alegre.
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Motivos geométricos
Pero las flores no son las únicas que ‘toman’ las telas esta temporada. Los motivos geométricos (líneas, rombos, hexágonos…) son también recursos infalibles. Los encuentras con cierto aire clásico o con pinceladas minimalistas, aportando sencillez de formas en colores veraniegos. La clave de su éxito está en usarlos con prudencia, de manera que encuentres en ellos un aliado, no un enemigo. Y si la cosa no funciona, equilibra con neutros y resérvalos únicamente para accesorios (cojines, ropa de cama…). No renuncies a casi nada, piensa que un estampado clásico puede funcionar al lado de otro contemporáneo y que la osadía, muchas veces, es sinónimo de personalidad y buen gusto.
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Manual de uso
Cuidado con su poder, ya que realzan y enriquecen los ambientes, pero también pueden ‘destrozar’ una decoración. Equilibrio y sensatez son los dos principios que deben servirte de guía en su uso. Puedes mezclar y recargar sin miedo, siempre que tengas un objetivo claro y diseñes un conjunto lleno de armonía. Ten cuidado con los estampados demasiado llamativos en las cortinas, ya que “con la excusa de animar el ambiente, puede que pierdas calidez e impidas, muchas veces, el paso de la luz” aconsejan desde R Diseño.
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Y, aunque no lo parezca, piensa que en los espacios clásicos, los estampados o dibujos contemporáneos dan valor añadido, ya que crean atmósferas llenas de encanto y personalidad. Porque si algo aportan los estampados son personalidad propia a los ambientes, sólo debes encontrar la tuya, para sentirte a gusto rodeado de flores, rombos o animales.
