Un selección de cocinas abiertas a otras estancias, que buscan la funcionalidad y la comodidad. Ambientes en los que destaca la distribución, el color o la luz, la creación de una zona de estar… Pero todas son especiales, con un toque de encanto
Todo parece conjugarse en este ambiente de Miele. La luz natural, el blanco de su mobiliario, la integración perfecta de los electrodomésticos con modelos empotrables... Aspectos que llenan de vitalidad la cocina, haciendo suyo el concepto de "alma" de la casa.
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La clave para convertirla en alma de la casa es hacerla cómoda y funcional. Contar con una distribución, que permita moverse cómodamente; y tener capacidad de almacenaje, con armarios y módulos que aprovechen el espacio, son dos imprescindibles. La mesa adosada en la encimera es también otra buena idea. De SCIC.
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Una solución de diseño impecable, que cuida, además, los aspectos más prácticos. Un equilibrio que se basa en los detalles y en la adecuación al espacio. De Snaidero.
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En este ambiente de Ikea se juega con la combinación del blanco puro con un verde vitaminado y flúor. El resultado es una cocina alegre y juvenil, muy cómoda para el día a día.
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Pocas cosas hay que den tanta “vida” y vitalidad a un espacio como la luz. Ilumina, multiplica los metros y transmite bienestar. En este ambiente de Bulthaup, la cocina se integra en la arquitectura y se muestra abierta tanto a la cocina como al exterior.
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El blanco lo llena todo, multiplica los metros y la luz. En este ambiente de Bulthaup, las paredes se aprovechan al máximo, improvisando un armario en vertical, que puede soportar hasta 1.000 kg de peso.
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Este estilo rústico, pero chic, al mismo tiempo, crea espacios personales, llenos de encanto. La mezcla del blanco con el papel pintado y las molduras de las puertas contribuyen en gran parte a ello. De Leroy Merlin.
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Personaliza una pared o el frente de una pared con una pintura especial, como esta de pizarra de Bruguer. Ideal para anotar la lista de la compra, las citas de la semana o todo aquello que no quieres que se te olvide.
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Juega con las paredes y con el color de las mismas, ya que ayudan a crear atmósferas y ponen un toque personal. En este ambiente de Bruguer, el romanticismo nos envuelve gracias al suave lila. ¡Un acierto con los muebles blancos y la encimera de madera!
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Nada parece desentonar en este ambiente de Miele, que incorpora una zona de escritorio. La ausencia de tiradores en el mobiliario y la capacidad de los electrodomésticos para integrarse son parte del éxito.
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La mezcla de estilos es una de las formas de dar personalidad a tu cocina. En este ambiente de SieMatic la mesa de madera rústica y las sillas son el contrapunto perfecto a las líneas minimalistas y puras del resto del mobiliario.
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En este ambiente de Gicinque Cucine no sabes dónde empieza o termina la cocina. Esta fusión se logra a través del uso del mismo pavimento, lo que otorga continuidad visual, y mediante un mobiliario de líneas elegantes, como el armario-librería que alberga también el horno y la nevera.
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Personal, masculina, diferente… Desde el juego de damero del pavimento hasta la vitrina colgante, que llega hasta el techo. Esta cocina de Ikea hace un ejercicio de originalidad y funcionalidad que saca todo el partido a la escasez de metros.
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Abierta al exterior, gracias al gran ventanal, y al interior de la casa. Una cocina dinámica, con módulos abiertos, que juegue a mostrar ciertas cosas y a ocultar otras. De Cesar Cocinas.