¿Has notado alguna vez que hay plantas que cierran sus hojas al caer la tarde? Parece que se preparan a dormir, ¿verdad? Este movimiento que realizan es conocido como nictinastia, un fenómeno fascinante que ocurre en determinadas especies vegetales. La nictinastia es un movimiento vegetal pasivo, generalmente de las hojas o pétalos, que ocurre en respuesta al ciclo diario de luz y oscuridad. Estos movimientos son rítmicos y están controlados por el reloj circadiano de la planta, aunque lo hacen teniendo en cuenta la luz y la temperatura del ambiente.
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Este mecanismo natural tiene como objetivo reducir la pérdida de agua y proteger los tejidos más delicados del rocío o del frío de la noche. Las plantas que presentan nictinastia suelen adaptarse bien a interiores con buena luz natural y ambientes húmedos, aunque cada especie tiene necesidades particulares que conviene conocer a fondo. Estas son algunas de las especies que lo experimentan.
La mimosa es una de las más populares plantas que “duermen”, pero lo más sorprendente es su sensibilidad al tacto. Cada vez que la tocas, repliega sus hojas en cuestión de segundos, y al llegar la noche, lo hace de forma natural como parte de su ritmo circadiano.
Para mantenerla saludable, colócala en un lugar con luz indirecta brillante y asegúrate de mantener el sustrato siempre ligeramente húmedo. No tolera el frío ni los cambios bruscos de temperatura, así que protégela del aire acondicionado o las corrientes. Le gusta la humedad ambiental, por lo que agradecerá una pulverización ligera con agua sin cal.
El Oxalis no solo llama la atención por sus intensas hojas púrpuras en forma de mariposa. También lo hace por su forma de “cerrarse” en las noches, como si se recogiera para descansar.
Ubícalo cerca de una ventana luminosa, evitando la luz solar directa, que podría decolorar sus hojas. Necesita riegos moderados, dejando secar la capa superior del sustrato entre riego y riego. Durante el invierno entra en reposo, y es normal que pierda parte de su follaje. Cuando esto sucede, hay que reducir los riego y espera a que brote de nuevo en primavera.
Este árbol ornamental también muestra movimientos nictinásticos: sus delicadas hojas se cierran cada noche. Esta planta es ideal si dispones de un jardín o una terraza soleada, ya que necesita abundante luz directa para desarrollarse bien. El suelo debe tener buen drenaje y mantenerse húmedo, pero sin encharcar.
Durante la floración, la Albizia julibrissin produce unas inflorescencias rosadas muy decorativas que atraen polinizadores. Es resistente, pero no tolera bien las heladas intensas, así que conviene proteger sus raíces con acolchado si vives en una zona fría.
LaMaranta leuconera es conocida también como “planta de oración” debido a la manera en la que sus hojas se levantan al anochecer, experimentando los movimientos de la nictinastia.
Para que luzca en todo su esplendor, coloca tu Maranta leuconera en una zona interior con mucha luz, pero lejos del sol directo. Agradece un sustrato rico en materia orgánica y con buen drenaje. Asimismo, necesita riegos regulares, sin dejar que el sustrato se seque por completo. Puedes usar un humidificador o colocarla sobre un plato con piedras y agua para mejorar la humedad ambiental.
Esta curiosa planta no solo “duerme” por la noche: durante el día, mueve sus hojas secundarias en respuesta a la luz, la temperatura y otros estímulos. Se trata de una planta poco conocida que necesita un entorno cálido, buena luz indirecta y riegos frecuentes durante el crecimiento.
Colócala en una zona interior bien protegida, ya que no resiste bien el frío ni los vientos fuertes. Además, agradece abonos líquidos ricos en potasio para estimular su peculiar movimiento.
Lascalatheas son una de las especies más populares en decoración. Sus decorativas hojas con los nervios marcados y patrones intensos ofrece un juego de color inigualable. Entre sus variedades, la calathea makoyana es conocida también porque sus hojas se pliegan al anochecer.
Entre sus cuidados, cabe destacar que necesita una ubicación en la que reciba luz difusa y alta humedad ambiental. No tolera la sequedad, por lo que agradecerá riegos regulares con agua sin cal y pulverizaciones frecuentes. El sustrato debe ser suelto y con buen drenaje, manteniéndose siempre ligeramente húmedo. Evita las corrientes de aire y los cambios bruscos de temperatura, ya que afectan directamente a su vitalidad.
Esta particular planta, característica por sus hojas finas y plateadas y sus flores rojas intensas, también muestra comportamiento nictinástico, cerrando ligeramente sus hojas durante la noche. Es ideal para terrazas o balcones bien soleados, porque necesita mucha luz para florecer con intensidad.
Tolera bien la sequía, así que solo debes regarla cuando el sustrato esté completamente seco. Ten en cuenta también que prefiere suelos ligeros y arenosos, con muy buen drenaje, y agradece abonos ricos en fósforo durante la primavera. En climas fríos, conviene protegerla en interior o ubicarla en maceta para poder trasladarla.
Este árbol ornamental, conocido por sus espectaculares flores similares a las orquídeas, también repliega sus hojas al anochecer, como una estrategia natural para conservar humedad. La Bauhinia variegata es ideal para jardines en climas cálidos y templados, donde pueda recibir sol directo durante varias horas al día.
Entre otros cuidados, requiere riegos regulares durante su etapa de crecimiento, pero es bastante tolerante a la sequía una vez establecido. Prefiere suelos fértiles, bien drenados y algo alcalinos. Además, atrae mariposas y abejas, favoreciendo la biodiversidad en tu entorno.
Habitual en praderas y jardines, el trébol blanco también presenta movimientos nictinásticos: sus hojas se cierran discretamente por la noche. Aunque parezca una planta simple, su comportamiento refleja lo bien que se ha adaptado al entorno.
Crece mejor en suelos frescos, bien drenados y ricos en materia orgánica. Le gusta el sol, pero también tolera semisombra, y es muy resistente a pisadas y condiciones cambiantes. Necesita riegos regulares si el clima es seco, y puedes abonarlo cada cierto tiempo para estimular su expansión. Es ideal como planta tapizante.